Hatred { Horn } (9 años en el pasado)

El miedo, el odio, el olor a sangre seguían inundando su mente, quedando presente en todos sus sentidos, así como aquel recuerdo, aquella tortuosa imagen en la que Corinne vio los cadáveres de sus padres en el salón de lo que antes llamaba hogar...ya no tenía lugar al que llamarlo así, ya no, solo la acompañaba un insaciable deseo de venganza.

Gracias a los estudios y apuntes de sus padres sobre demonología, pudo hallar los medios para llevar a cabo su codicioso deseo...y ahí estaba, en la mansión abandonada de la que tanto hablaban. Se hizo con una lámpara portátil y caminó al interior del sótano, habiendo cerrado antes la puerta del mismo para evitar interrupciones.

— Bien... aquí. Este es el lugar. — Comentó mientras se arrodillaba en el piso, dejando el libro a su lado.

Sacó una daga y se clavó la punta en el dedo índice de su mano, usando la sangre de aquel dedo para dibujar un pentagrama y una cabra con cuernos. — Ahora...la invocación. —

Se hizo con el libro y comenzó a recitar unas palabras incomprensibles, pudiendo percibirse la mezcla de distintas lenguas, pudiendo entenderse un poco que llamaba al mismo demonio...y siguió recitando durante un rato, con todas sus fuerzas, volviendo a su cabeza aquel recuerdo de sus padres muertos, pensando en matarlos... — ¡Aparece de una vez...! — Gritó desesperada aquella niña de ocho años. — ¡Te daré lo qué quieras! —

Era impresionante que una niña de tam solo ochos años de edad hiciera una invocación tan interesante como el llamado de Horn, podía sentir el deseó de venganza de la pobre niña sabía perfectamente lo que deseaba y ella la ayudaría a cumplir dicha "Venganza" después aquella niña dijo que le daría lo que quisiera no podía negarse a dicha petición.

─ Calma pequeña...si gritas de esa manera tan desesperante dudo que alguien te pueda oír.... ─ La figura femenina de aquella rubio se hizo presente delante de la menor, esbozó una pequeña sonrisa mirando fijamente a niña al mismo tiempo ella se agachó tomándola de las mejillas sonriendo a su vez. ─ Eres demasiado atrevida al haberme invocado....pero me agradas pequeña~ ─ Podía sentir el delicioso olor de la sangre de la menor, sus ojos carmesí brillaban con intensidad, la sangre en el suelo había despertado el apetito de la rubia quién ahora mismo deseaba succionar un poco de dicha sangre, pero no lo haría sin el consentimiento de la pequeña.

─ Escuchá....te ayudaré, pero debes hacer algo por mí... ─ Soltaría la mejillas de la menor para así alejarse un poco. ─ Primero, debes darme de tú sangre... ─ Sentenció esto último en un tono de voz bastante firme para acto seguido cambiarlo a uno más amable y así darle un pequeño pellizco a la nariz de su contraria.

Por suerte la menor se había topado con un demonio no tan "Exigente", es la primera vez que alguien tan pequeño se atrevía a invocarla. Pero no tenía más remedio que cumplir las peticiones de su pequeña invocadora; claro. Todo esto si ella accede a cumplir la condición de la rubia.

Estaba completamente desesperada ya que, aparentemente, no había funcionado, no obstante, pudo notar lo equivocada que estaba...¡Había funcionado! O eso parece...no se esperaba un demonio rubio cuyas características le recordaban mucho a los de un vampiro, más que nada, por los colmillos.

Era demasiado fácil que la rubia accediera a ayudarla y, por supuesto, quería tomar de su sangre, así que Corinne alzó la mano y la colocó de una forma que diera a entender a la demonio que se quedara quieta. — Ha pedido el pago habiendo aceptado mi parte del trato y sin haberla oído, ¿Qué clase de demonio es usted? — Preguntó con el ceño fruncido mientras cruzaba sus pequeños brazos.

— Me gustaría saber su nombre y qué clase de poder tiene. Hice la invocación para algo de suma importancia, no para que me chupen la sangre como una sanguijuela a la primera. — Comentó sin relajar su postura. — ¿Su nombre? —

La vampiresa estaría bastante sorprendida, ¿Cómo alguien tan pequeño puede ser tan inteligente? Sin duda alguna esa pequeña es bastante interesante. ─ Jajaja tienes razón pequeña, que mala educación de mi parte no haberte oído primero. Mia disculpas ando un poco, sedienta~ ─ Sonrió con algo de picardía mirando de reojo a la menor, para ser exacta. Miraba más que todo a su cuello. La sangre de los menores es bastante exquisita.

─ Deberías de saberlo ¿No? Después de todo tu me has invocado pequeña, pero bueno. Mi nombre es Horn Skuld, como puedes ver soy un vampiro con habilidades especiales. En resumen soy bastante útil, pero lamentó si no cumplo tus expectativas, en fin...soy todo oído, dime que es lo que quieres y por qué le has invocado tan repentinamente.

Chasqueo ambos de dedos de ambas manos y en cada una aparecía un arma, en su derecha estaría su espada y en la izquierda estaba su látigo; Usa su látigo para los ataques de medio alcance, y una espada para los de distancia corta y para la defensa. Son armas útiles después de todo, sin mencionar lo fuerte y veloz que puede ser. Además de que puede regenerarse fácilmente las heridas que no hayan sido caudas por un arma maldita.