Lo que trajo una Paradoja (Elesis + Libre)

Era una bella tarde en la cafetería de la Academia Legacy, aparentemente todo estaba normal y tranquilo en aquel lugar a excepción de una cosa y es que Byprox ya hacía sentado en una de las mesas de la cafetería totalmente triste y deprimido, enfrente suyo sobre la mesa estaban lo que alguna vez fueron sus dos bayonetas que habían quedado totalmente destrozadas luego de la batalla en la ciudad contra aquel Golem. Byprox había salido herido severamente, pero durante estas semanas en las que se estaba recuperando, no había tenido éxito alguno en reparar sus armas que una vez el había construido, mas que nada porque no tenía las herramientas necesarias como para lograr restaurar sus armas.

Los minutos pasaron y Byprox seguía sentado en aquel comedor sin despegar la mirada de sus armas totalmente destrozadas, había pensado en unos momentos tratar de pedir de ayuda a alguien de La academia que pudiera ayudarlo, pero simplemente no había respuesta alguna ya que sus compañeros no se encontraban justamente y otros estaban en misiones fuera de la ciudad a excepción de una de sus compañeras, pero que ni siquiera sabia donde estaba, sinceramente para Byprox aquella mujer es todo un total misterio desde que llego, pero aún así no la juzgaba de mala forma.


—» Maldición... No sé cómo voy a reparar estás cosas...


Sin nada que poder hacer, Byprox se disponía a abandonar la cafetería, pero en cuanto decidió ponerse de pie pudo sentir una presencia que ingresaba a la cafetería, una presencia que era capaz de alborotar los sentidos del joven albino como si se tratará de una entidad desconocido.

Desde que llegó a la Academia, no ha tenido un rol importante que pudiera desempeñar, lo único que ha hecho en todo esté tiempo fue haber tenido unas breves interacciones con algunos de sus compañeros, Pero en esta ocasión ha tenido la oportunidad de volver a interactuar con un compañero que le ha llamado la atención desde que ingresó a la Academia, un joven albino al cual ha estado "ayudando" de cierta forma. Ingreso a la cafetería puesto que ya sabía que su compañero se encontraría, quería darle un pequeño susto y aparecer de sorpresa, pero la idea se desvaneció en cuanto ingreso a la cafetería y observó al chico sentado totalmente solo y deprimido por lo que se acercó hasta el mientras lo llamaba por su nombre.


╰┈➤ ¿Byprox? ¿Te encuentras bien? No es normal verte de esa forma.


En todo esté tiempo en el que ha llegado a interactuar con Byprox siempre lo ha visto con una actitud muy animada y alegre, por esa razón es que se sorprendió verlo de esa forma tan triste y deprimida, pero al instante pudo comprender el porque ya que observó en la mesa lo que parecían ser las armas habituales que Byprox siempre suele llevar consigo, pero con la enorme diferencia de que estas estaban destruidas.

Ella misma podía comprender el dolor por el que Byprox esta pasando, no es fácil ver como algo que has construido y puesto empeño se rompe con tanta facilidad, más que nada porque ella misma también suele crear Armas de todo tipo y en ocasiones le tocaba ver como llegaban a ser destruidas en el transcurso de una batalla. Fue así que ella tomo la decisión de ayudar a su compañero a reconstruir sus armas, si él necesitaba piezas pues ella se las daría, si él necesitaba herramientas pues ella se los daría sin problema alguno.


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Finalmente supo de quién se trataba aquella presencia que estaba perturbando sus sentidos, se trataba de nadie más y nada menos que Add, la misma chica de la cual había estado pensando hace unos instantes, eso dibujo una pequeña sonrisa en el rostro del chico, pero que se desvaneció al escuchar las preguntas de su compañera, no estaba de ánimos para conversar del tema.


Aún así no podía ser descortés con ella, no iba a dejar que sus preguntas se volaran en el aire por lo que se tomó un breve tiempo antes de poder ver a su compañera y responderle con las siguientes palabras.




—» No es nada importante... Solo son mis armas las que han quedado destrozadas y ahora no tengo como repararla




En aquel momento Byprox decidió ponerse de pie mientras tomaba con sus manos lo que quedaba de sus armas, pero ¿A dónde iría ahora? La realidad del asunto es que Byprox no pensaba ir a ninguna parte, como se mencionó no esta con los ánimos necesarios para poder hacer alguna actividad que lo ponga de buen humor, solamente tenía pensado en dirigirse a su habitación y quizás descansar un poco hasta que se encuentre mejor.




—» Lo siento Add, Pero necesito estar solo por unos momentos...




Una vez que tenía sus armas en mano, se dispuso a dejar la cafetería sin voltear a ver a su amiga y no es que tratará de ser descortés, simplemente hablar en estos momentos no le iba a ayudar y tampoco quería aburrir a su compañera con algo como eso, quizás más adelante encontraría alguna forma de poder reconstruir sus armas.

A ella le estaba doliendo ver a Byprox de esa forma, estaba empezando a extrañar esa cálida sonrisa que el Albino siempre suele mostrar, por ello es que no iba a dejar que el se retire de la habitación así nada más por lo que termino chasqueando los dedos de su mano izquierda para que ambos sean Teletransportados a la habitación de la mujer, aunque más que una teletransportación era como si todo el escenario hubiera cambiado en un abrir y cerrar de ojos, pasando de ser la cafetería en dónde estaban a la habitación totalmente arreglada a gustos de la mujer, pero más que una habitación parecía que se había convertido en una especie de laboratorio personal.


╰┈➤ No, no, no mi querido amigo, no puedo dejar que te quedes con esos ánimos tan desastrosos


Mencionaba la albina con un tono bastante animado, quería transmitir los ánimos hacia su amigo.


╰┈➤ Tu rostro se caracteriza por tener una bella sonrisa ¿Dónde está esa expresión tan alegre? Me entristece saber que se ha apagado.


Con respecto a esas palabras, incluso la albina se animó a sonreír para el con tal de hacerlo sentir mejor aunque ya tenía en cuenta de que si lo ayudaba a reparar sus armas sus ánimos cambiarían a como son tradicionalmente.

Era el momento de empezar con el propósito con el que lo había traído hasta su habitación, Add se acercó hasta un botón que había instalado al lado de la puerta el cuál no dudo en presionar y al hacerlo toda la habitación se activo de golpe y tanto las pantallas como las mesas holográficas que tenía instaladas se encendieron alrededor del panel de control, es como si toda la habitación se hubiera fusionado con un laboratorio proveniente del futuro. Ahora toda la habitación estaba en funcionamiento para iniciar el proceso de reparación, será lo bastante fácil si ella cuenta con tal tecnología para llevarlo a cabo.



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Justo en el momento en el que Byprox se disponía a caminar hacia la puerta de salida de la cafetería, se vió asombrado debido a que en tan solo un abrir y cerrar de ojos todo el escenario había cambiado y ahora parecía ser que ambos estaban ubicados en lo que parecía ser la habitación de la mujer, algo que de por si era muy extraño debido a que de la nada ya estaban ahí y sin duda es algo que Byprox no puede comprender, más que nada porque no tiene algún conocimiento sobre la naturaleza de aquella mujer y de sus extraños poderes.

Si Byprox comenzaba a pensar que eso era de lo más extraño, lo siguiente que presenció fue a su compañera sonreír que de por sí no era algo malo, incluso se podria decir que es un tierno gesto de su parte si no fuera porque le daba miedo esos ojos totalmente negros y con lo que parecía ser unas iris totalmente brillantes de color púrpura. Volviendo al tema, Byprox comenzó a dar un breve vistazo a la habitación de su compañera, si que le había hecho una gran remodelación siendo lo mas notable aquellas pantallas holográficas que se activaron alrededor del panel de control, pero aún así seguía sin entender el motivo del porque estaban ahí, estaba tan desanimado que ni siquiera podía darse cuenta de que la intención de su compañera era ayudarle a reparar sus armas.




—» Entonces.... ¿Por qué estamos aquí?




Aquel albino se vio en la necesidad de preguntarle directamente a su compañera el porque estan ahí, por lo que se mantuvo en su lugar a la espera de recibir una respuesta mientras aún se mantenía agarrando sus armas quebradas.

La albina tenía en mente de que su acompañante ya entendiera la razón del porque estaban aquí, pero sus pensamientos rápidamente se vieron desmoronaros al escuchar la pregunta por parte de Byprox ¿Enserio aún no entendía el por qué estaban ahi? Ella se puso a pensar de que quizás Byprox se estuviera haciendo el tonto, Pero también tenía que tomar en cuenta de que el chico estaba pasando por un momento depresivo por lo que era de esperarse de que no estuviera atento a lo que sucede a su alrededor.

Aquella situación no le molestaba en absoluto, parecía mantenerse muy paciente con el chico por lo que no le quedaba de otra que explicar la situación para que pudiera entender el motivo de la llegada a la habitación de la albina.


╰┈➤ Como ambos sabemos, tus armas sufrieron un daño muy grave en aquella pelea con ese Golem, usaste con demasiada fuerza esas armas que terminaste por quebrarlas a base de puros golpes contra la coraza del monstruo, un humano inferior no podría ayudarte con aquel problema así que yo me encargaré de no solo reparar tus armas si no que también de añadirle algunas mejoras que te ayudarán en combate.


Fue entonces que en aquel momento se acercó a una de las mesas holográficas que se activaron para comenzar a recrear un prototipo experimental para la renovación de las bayonetas, no iba a demorar mucho puesto que la IA de la mesa hacia todo el esquema en tan solo un par de minutos hasta que finalmente ya estaba listo.


╰┈➤ ¿Me las prestas?


Add volteo a ver a su compañero con la misma sonrisa que mostró anteriormente a la vez que extendía su mano en dirección a la del joven, dando a entender que le estaba pidiendo que le diera las armas destrozadas para comenzar con el proceso de reparación.

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Debía reconocer que Byprox tenía buen ojo para ver las cosas, quería darle algunos detalles sorpresa como la función de infinito que tenía pensado añadirle a las armas, pero ya que Byprox se había dado cuenta de ello pues no le quedaba de otra más que explicarle sobre aquella función que tenía pensado añadir.


╰┈➤ Oh, déjame explicarte con más detalle.


Para que la explicación sea más detallada, ella presionó con su dedo índice de la mano derecha sobre aquel icono de infinito lo que provocó que se abriera una pestaña en dónde salía a mas profundidad sobre los detalles de aquella función.


╰┈➤ Con infinito se refiere a la capacidad infinita de munición que podrás disparar, ya no serán balas que tengas que esperar para recargar puesto que serán reemplazadas con balas de energía infinita y no te preocupes por si se llega a sobrecarga, cuando eso suceda podrás liberar la energía sobrecargada al golpear con la modalidad de espada.


Como es bien sabido, las Bayonetas de Byprox son dos armas en una sola puesto que pueden ser usadas como armas de fuego, pero también pueden ser usadas como unas espadas al contar con unas hojas afiliadas, pero que ahora tendrían que reemplazar puesto que quedaron hechas añicos en aquella pelea. Habían más funciones que le gustaría explicarle, pero todo a su momento ya que se las explicaría mejor cuando sea la hora de entrenamiento en donde ella le otorgaría un entrenamiento especial al joven albino, Pero claro solo si es que el chico aceptaba entrenar con ella.


╰┈➤ Podrás acomodarte a las nuevas funciones con la experiencia, explicandote no serviría de mucho ¿Que me dices, Byprox? ¿Te gustaría entrenar conmigo?


Ella se mostró con total confianza al invitar al chico a entrenar, era la primera vez que invitaba a alguien a entrenar y para esa ocasión quería que fuera con alguien a quien ve mucho potencial, en este caso sería Byprox.



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