Cita a Ciegas (Fremy)

— Supongo que esto es algo nuevo para mí… — Dijo el pelinegro para si mismo.
Hace algo de tiempo había aceptado tener una cita a ciegas, era un evento que estaban haciendo en la academia; la verdad no estaba seguro de por qué lo hizo si nunca ha mostrado ser alguien que quiera una cita, lo más cercano a una ha sido con Charlotte y realmente dudaba que lo fuese; quien lo diría…

— Bueno, no debe ser muy difícil, sólo es durante este día nada más, veamos… — Miró a su alrededor.
Actualmente se encontraba en un bosque donde estaba el río, bastante hermoso y le parecía adecuado para una cita estar al aire libre y teniendo una linda vista.
No sabía si tenía que traerle algo a su acompañante pero si ese era el caso ya se las arreglaría de alguna manera.
Aún era de día, bastante temprano así que el día sería largo, el prefirió llegar antes así que le tocaba seguir esperando a que la misma hiciera acto de aparición.

Debía admitir que había un ambiente muy agradable, con una brisa fresca y un sol no muy ardiente... Además de que el sonido del río era relajante y estar sentado en aquella cómoda fauna era como un regalo.
Si de algo estaba casi seguro es que había escogido un buen lugar para al menos iniciar, aún no estaba seguro de si se quedarían allí el resto del día o luego visitarían más lugares.

Sobre su vestimenta, realmente no era algo muy formal, utilizaba el mismo atuendo de casi siempre, una bata blanca con pantalones largos, pero se aseguró de estar bien pulido para esta ocasión.
Sin más que decir o hacer, se sentó delante de un árbol y recostó su espalda en él a la espera de quien le haría compañía durante este día; sólo esperaba no arruinarlo de alguna forma, pues realmente él no era bueno en estas cosas.

Un pequeño pero muy radiante rayo de sol entraba por el vidrio de la ventana; cubriendo el rostro de la albina.

Se levantó tranquilamente de la cama en donde reposaba, soltando un largo suspiro mientras estiraba las extremidades de su pequeño cuerpo para desentumir sus huesos.

Aquella luz que se presenciaba era la señal de que afuera quizás se guardaba un lindo día, apto para salir. Y vaya que debía hacerlo.

Esta había sido invitada a una tal "Cita a ciegas", junto con otro compañero de la academia, al cual no conocía, literalmente.

─ ¿Fastidian con esto?, Bien podría hacerme cargo de una misión ─ Exclamó la chica, dirigiéndose al baño para tomar una refrescante ducha.

El agua estaba helada y recorría todo su frágil y esbelto cuerpo. Se sentía bien, era una sensación de no querer salir del sitio.
Al pasar unos cuantos minutos terminó.

Tomó entre sus manos la toalla que se encontraba más cercas de su alcance y cubrió su pálida piel con ella para secarse.

─ ¿Qué debería ponerme? ─ Preguntaba para si misma. En realidad no tenía la mínima idea de lo que podría llevar puesto. Al final terminó por decidirse en unas botas, camisa de color negro y un pantalón cómodo. No muy diferente a sus prendas de costumbre.

Cepilló su cabello y acomodó la flor azul que llevaba a un costado de su cabeza. Estaba preparada y su destino era definitivamente el río...

Al llegar a dicho sitio, no se presenciaba alguien aún. Esto ponía a Fremy un poco desafiante y despertaba su desconfianza, tal vez por algo de nervios.

Caminó un poco sobre el lugar tan encantador hasta parar cerca de un gran árbol. Fue donde ocurrió.

─ Debes ser tú ─
Comentó en un tono un poco alto y con su firme seriedad.
Se dirigía hacia él, quedando menos distanciada.

─ Mucho gusto...─

Estaba pensando en algunas cosas pero algo que lo sacó de dichos pensamientos fue una voz femenina, pudiendo notar la figura de una mujer albina y de piel muy pálida.
A simple vista parecía como si estuviera hecha de cristal... frágil; era la primera vez que veía a alguien así.
También le daba la impresión de ser alguien "tranquila" en cierta forma, su voz también sonaba un poco fría e inexpresiva.

— Supongo que tú eres mi cita... — Comentó.
Ya que ella había dicho "debes ser tú", seguramente ella también vino en busca de su cita, y si, Gray lo era.
Se levantó para poder estar justo frente a ella, Gray era notoriamente más alto y tenia más musculatura, ella era mucho más delgada.
— Soy un Gray y si, creo que soy tu cita, no soy muy bueno en estas cosas pero haré lo mejor que pueda — Aclaró con sinceridad.

— Dejaré que tu elijas que quieres hacer primero... podemos quedarnos aquí o explorar, dicen que este bosque es muy bonito — Sugirió.
Se rascó la mejilla mientras hablaba, en verdad no sabía mucho sobre que hacer en este tipo de situaciones pero seguramente pronto lo sabría; por ahora dejaría que ella escogiera a donde debía ir.

— Por cierto... ¿por qué te interesaste en entrar a esta actividad? — Preguntó.
Sería bueno saber algo de ella como el motivo por el cual se interesó en esto de las citas a ciegas; Gray aún no entendía por que decidió entrar cuando nunca había hecho algo así.

Aseguraba no ser un experto en "cosas" como estas.
Parecía que estaba nervioso, pero su tono de voz no bajaba de intensidad. Era agradable para el oído.

«Parece que puede ser amable»

─ Ya veo, Gray. Tampoco soy alguien que sepa sobre esto, así que no vayas a preocuparte ─
Comentaba la albina mirando al cielo y otras direcciones.

Dado a que le había otorgado la libertad de decidir a dónde ir, inmediatamente dió una respuesta.

─ Solo caminemos. ─

Repentinamente se puso a dar pasos lentos, esperando que este le siguiera el paso.

Lo suyo era viajar y adentrarse a lugares para explorar. Claro, con un objetivo siempre en cada de sus misiones. Esta vez la situación cambiaba, tendría que ir con su compañero a pasear...

─ Gray, revisemos todo el lugar. ─
Exclamó brindando una gentil y pequeña sonrisa.