Se bienvenid@ Invitado a ~ +ACADEMIA LEGACY+ Foro de rol literario ~. Fue creado el Jue Mar 13, 2014 4:55 pm, es decir que tenemos exactamente 3702 días de vida. Hasta ahora sus 164 usuarios han escrito 11980 temas en los 120 foros que existen. Tú, Invitado, haz escrito 0 posts desde que te registraste el Miér Dic 31, 1969.

El último de nuestros usuarios registrado fue Cyno
Conectarse

Recuperar mi contraseña

Notificaciones












Online
¿Quién está en línea?
En total hay 15 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 15 Invitados

Ninguno

El record de usuarios en línea fue de 223 durante el Lun Ene 01, 2018 4:08 am
Últimos temas
» Lo que trajo una Paradoja (Elesis + Libre)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCLun Abr 29, 2024 8:39 pm por Elesis

» Patrullaje Nocturno en la Ciudad (Aisha)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCLun Abr 29, 2024 3:35 pm por Aisha oz Sorcerer

» En el gimnasio (Moonlight, Jung + libre)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCLun Abr 29, 2024 3:00 am por Moonlight

» Encuentro con lo desconocido. (Gilgamesh y Lumine)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCLun Abr 15, 2024 7:50 pm por Gilgamesh

» "Dame un respiro..." (Libre)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCMiér Abr 10, 2024 8:44 pm por Alhaitham

» (EVENTO DEL MES) E: Sona y Bell
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCSáb Abr 06, 2024 1:40 am por Sona Buvelle

» Presagio (Nilou, libre)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCSáb Abr 06, 2024 12:37 am por Nilou

» (EVENTO DEL MES) B: Shinobu y Tomioka
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCJue Abr 04, 2024 11:19 am por Shinobu Kocho

» Una extraña en la enfermería (Kanae, Aisha, Shukra)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCMiér Abr 03, 2024 4:50 pm por Kanae Kocho

» Hakai - Destrucción en la ciudad. [Battler, Rimuru]
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCMar Abr 02, 2024 5:06 pm por Battler Ushiromiya

» ¡Peligro en el Baile! Una invasión de demonios (Mitsuri, Tanjiro)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCDom Mar 31, 2024 8:06 pm por Kamado Tanjiro

» ¡Acorralado en el techo! (Navia, Zhongli y Neuvillette + libre)
Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  GLS9UWCDom Mar 31, 2024 5:58 pm por Cuentacuentos















Licencia Creative Commons
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 2.0
Academia Seeds of Legacy por Beatrice y Gilgamesh se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Permisos que vayan más allá de lo cubierto por esta licencia pueden encontrarse en https://academialegacy.activoforo.com/.

El crédito por el diseño del foro se da a Jack, quien ha trabajado en la estructura visual de éste y en otros aspectos metafuncionales. Los planificadores de la trama del foro son los administradores Beatrice y Gilgamesh. El crédito por el sistema interno del foro se da a los miembros fundadores: Jannei MC.Clov., Jyu Viole Grace, Mavis Blanc y Suigintou, en conjunto con los otros administradores. Asimismo, a Darren Criss por el modelo de fichas, a las obras de varios autores -cuyo uso está exento de ánimos de lucro- y a los administradores que operan desde la página oficial de Facebook, la cual es propiedad del foro. Ante cualquier semejanza con el diseño y trama de este foro, los administradores llevarán a cabo el proceso pertinente estipulado por la normativa de Creative Commons para iniciar acciones relacionadas a propiedad intelectual.

Academia Seeds of Legacy. 2014-2021.

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

2 participantes

Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Gray Fullbuster Mar Jun 16, 2020 4:18 am

~ Tiempo después de lo sucedido en la mansión abandonada ~

Un artefacto que le arrebata los poderes quienes no lo poseen... Eso es lo que había descubierto el pelinegro cuando se dirigió a la mansión abandonada hace un par de días; pues se encontró con la sorpresa de varios Asgardianos allí, pero podría decirse que gracias a ciertas circunstancias como el tener compañeros, pudo salir con vida.
Algo que no dejaba de inquietarle... ¿Qué planearía Asgard ahora? ¿Su objetivo seguía siendo Legacy, o primero acabarían con aquellos artefactos? No tenía conocimiento alguno de cuales serían sus próximos pasos.
Por ahora, Legacy estaba en desventaja... Y si, también pasaron malos momentos contra Svartgard y Merak y lograron superarlos al final, pero los nuevos enemigos se estaban moviendo con mucho más cuidado, y eso le preocupaba; tuvo la oportunidad de conocer "a la nueva generación" en aquella mansión, y debía reconocerlo... eran de temer.

Ahora mismo se encontraba en la academia, no sabía cual sería su próximo movimiento... Tampoco que debería hacer al respecto sobre aquellos artefactos; trabajar junto a Asgard no era una opción viable, ¿no?
Dudas y más dudas... Siempre ha ayudado a su bando a superar las adversidades, pero esto se tornando muy complicado, incluso para él; hasta Mirajane se había ido al lado contrarío...

— Archer, Rin, Rimuru... El poder mágico de todos ellos, era enorme. Si hubiera luchado contra ellos yo sólo, habría muerto, no puedo arriesgarme nuevamente de esa forma... — Murmuró.
Entonces, escuchó el sonido de unos pasos los cuales llamaron su atención; al subir la mirada, pudo notar como de repente una silueta se hizo presente frente a él, estaba encapuchado y no se le veía el rostro... al instante Gray adoptó una pose defensiva.

— Tranquilo, no he venido a atacarte... —

Aquel tenía una voz muy tenebrosa, pero a la vez tranquila... Bajó los brazos, pero aún así estando alerta a los movimientos de ese ser misterioso; entonces, de una forma algo amenazante, preguntó y entabló una conversación.

— ¿Quién eres y que quieres? —

Se mantuvo unos segundos en silencio, hasta que contestó con una sonrisa poco notoria en su rostro.

— Solo soy un narrador que desea contar otra historia, y sentí la necesidad de hablar con dos de mis personajes... Te sientes confundido, en un pozo lleno de dudas y sin saber que hacer o con quien acudir. Y si te dijera...
¿Qué conozco a la persona con la que necesitas hablar? —


Gray estaba sorprendido, pero hacía un esfuerzo por mostrar indiferencia... Aquel describió exactamente como se sentía; ¿cómo era posible? Y realmente, aunque se lo preguntó, no tenía idea de quien era... Tampoco desprendía magia alguna que pudiera sentir, es simplemente... como si ese ser no existiese realmente.
De todos modos, le siguió el juego.

— Y si te dijera que es así... ¿A quien te refieres? — Cuestionó.

— Es uno de los personajes más importantes de mi historia, ya lo viste en una de las escenas anteriores.
Un arma valiosa para Asgard, y temeraria para Legacy... La "Reina" en el tablero de ajedrez... Rimuru Tempest, el Rey Demonio, no creo que lo hayas olvidado... fue quien más te llamó la atención en esa reunión, ¿no es así? —


Una gota de sudor se hizo presente en el rostro de Gray... es cierto, recordaba perfectamente a aquel ser de apariencia engañosa; creyó que realmente se trataba de un demonio, pero su análisis había sido incorrecto... Lo que si logró sentir, fue un aterrador poder mágico proveniente de un cuerpo tan pequeño como el que posee.
Alguien tan poderoso debía ser uno de los lideres de Asgard, aquellos que controlan las cuerdas...

— Aún si llegara a encontrarme con él, es obvio que no me revelará sus planes, así que no resolverá ninguna de mis dudas —

— Esas no son las preguntas que necesitas resolver... Tanto tú como él, tienen dudas que ni siquiera saben cuales son, pero pueden aclararse entre sí. Un viejo guerrero que ha estado participe en mis dos historias anteriores...
Y un ser capaz de alterar el resultado previsible donde los buenos siempre ganan... Ustedes dos son como dos caras de la misma moneda. ¿Qué pasaría si los junto? —


No entendía esa forma de hablar como si todo esto fuera una historia para narrar, y quizás se tratase de una trampa, pero no podía negar el hecho de que tenía interés en ver a ese Rey demonio nuevamente... por lo que luego de pensar un tiempo, respondió.

— ¿Y si te dijera que estoy interesado en hablar con Rimuru? —

— Te llevaré a un lugar donde lo esperarás... si él acepta, lo llevaré allí. Solo te haré dos aclaraciones...
Si tratan de pelear, ambos serán transportados a su respectiva ubicación, después de todo, no quiero que interfieran de ese modo en la trama, aún no es el momento~... Y cuando terminen de hablar, también volverán al lugar respectivo, pero no recordarán nada sobre mi, solamente que estuvieron allí y lo que hablaron... ¿Y bien, quieres conocer a uno de los personajes principales de mi historia, Gray? —


Abrió los ojos como platos al escuchar su nombre, pues nunca se lo había dicho...
Rimuru... ¿En verdad sería buena idea hablar con una persona así?
No lo sabría hasta descubrirlo, así que... Gray asintió, lo que significa que aceptaba la propuesta.

— Sabía decisión, esto marcará un gran giro en la historia... Ahora sé un buen chico y espera a tu cita~ —

Al haber dicho aquello, todo por un momento se vio borroso, y de repente y sin explicación alguna, estaba en una roca muy alta, bastante; nunca había venido aquí, pero conocía este lugar... "La roca de los suicidios" era su nombre; todos tenían prohibido estar aquí, muchos se habían suicidado en este lugar, y se podía sentir un ambiente espeluznante.
Además, era media noche, y la luna ni siquiera era visible, estaba cubierto pos nubes grisáceas... El viento de vez en cuando se había presente, y el frío en el ambiente era grande.
Gray se sujetó su propia bata azulada mientras miraba a su alrededor confundido, lo último que escuchó es que debía esperar allí.

Sus dudas no eran sobre los movimientos de Asgard
¿Era realmente eso cierto?
¿Quien era ese sujeto?
¿Por qué Rimuru era el indicado para hablar con él?
¿Y por qué Gray lo era para Rimuru?
El resultado era inesperado...


Gray Fullbuster
Gray Fullbuster


Volver arriba Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Re: Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Rimuru Tempest Alfa Mar Jun 16, 2020 2:07 pm

El día es radiante. Sumamente radiante. El cálido y cegador sol se filtra por las ventanas como un constante recordatorio de que el día ha empezado ya y está en su mayor punto. El sonido de las aves puede apreciarse casi como musica que la naturaleza ofrece al que tenga los oídos puestos para oírla. Como si todo estuviera perfectamente orquestado, como si fuera el amanecer una obra de arte que se exhibe cada mañana, con sus frondosos árboles frutales listos para ofrecer un desayuno grato al alma y al paladar, con sus hermosas flores vestidas de prendas tan espléndidas y perfectas que jamás ha habido monarca alguno sobre la tierra que haya vestido de forma tan sublime, con los cristalinos ríos corriendo sagazmente en una carrera de velocidad hasta el mar azul... En fin, una mañana espléndida afuera.

Pero es esa misma naturaleza tan encantadora la que hace que uno se pregunte cómo puede alguien preferir vivir encerrado. Pues bueno, aquella no era una situación rara en lo absoluto para Rimuru Tempest. El mundo afuera podría ser el mismísimo infierno o un completo paraíso y este no se inmutaría en lo absoluto, en tanto que tuviera provisiones suficientes para pasar el rato. Y es que ver a una niña de sexto grado en camiseta pasando el tiempo libre leyendo mangas y comiendo comida chatarra no es nada del otro mundo. Realmente es una escena de lo más cotidiana. Pero las cosas se tornan extrañas cuando consideramos que quien está ahí no es una simple niña. ¡Por Dios, estamos hablando del Rey Demonio! ¿Cómo es posible que el mismo ser que por las noches aterroriza y devora sin compasión a los habitantes de Japón desperdicie sus mañanas leyendo historias de chicas mágicas y llenándose la boca de pockys?

Por supuesto, la respuesta es mucho más simple de lo que parece: porque le gusta. El slime de cabellos celestes disfruta leer mangas, comer golosinas, arrasar con las máquinas de Pump It Up, conocer lugares nuevos, pasar el tiempo con chicas lindas, dar clases de magia y molestar a los héroes idealistas. Está en su naturaleza, y nadie puede escapar de lo que es propio de su naturaleza. Rimuru siempre hace lo que hace porque quiere y puede, es así de simple. Desde su punto de vista, todo cuanto existe le pertenece por derecho. ¿Por qué no iba a poder disfrutar de lo que es suyo como mejor le plazca? Así de sencillas eran las cosas para él... O eso es lo que él quiere creer. El andrógino se ha montado a sí mismo tantas ideas por la fuerza para preservar la poca estabilidad mental que tiene, que realmente ya no está seguro de cuales le pertenecen realmente.

– ¿Te diviertes, slime?

Una presencia más se hizo presente en la habitación. Un hombre cubierto por un manto negro dirigió su voz al limo que hasta ahora se encontraba recostado en la cama. Este último lanzó una mirada de mala muerte al primero y, como si fuera un reflejo ya, chasqueó los dedos rápidamente. En circunstancias normales, esto significaría que el objetivo del slime debería ser aplastado por un círculo de gigantescas raíces espinosas como una lata de refresco vacía. Sin embargo, nada sucedió. El limo lo intentó una segunda vez, con el mismo resultado. Quiso entonces llevar la mano a su bolsillo para usar su encendedor de mano, pero literalmente solo tenía puesta una camiseta con la leyenda "Training to beat All Might". Como último recurso, intentó cambiar de forma, solo para cerciorarse de lo que temía: no podía usar ninguna de sus habilidades.

– ¿Qué diablos buscas aquí, eh? –Preguntó, fastidiado, el demonio. Por curioso que parezca, no se le veía sorprendido o asustado. Por el contrario, mostraba una total indiferencia ante la situación, y se tornaba iracundo solo por haber sido interrumpido en su lectura– Si deseas algo, dilo ya. Y si no, lárgate.

– Veo que ni siquiera cuando sabes que no puedes defenderte puedes comportarte –Respondió la voz, sin moverse de su sitio– Pero no son tus sentimientos honestos. Te propusiste hace tiempo a nunca tener miedo. Decidiste que jamás te dejarías intimidar ante nadie, porque un Rey Demonio no debe sentir miedo. Así que transformas tu temor en ira y orgullo para que nadie te vea doblegado...

– No sé de qué me hablas –El limo respondió tajantemente– Si no vienes a buscar nada, entonces fuera de aquí. Mira que espiar a una niña en su habitación... Y además cuando está prácticamente desnuda... ¿Eres alguna clase de pederasta pervertido? Qué asco me das.

– No eres una niña y lo sabes. En realidad, ni siquiera sabes lo que eres. Afirmas ser un demonio. El Gran Rey Demonio, Rimuru Tempest. Te convences de ser un villano malévolo y de hacer actos atroces como si te parecieran divertidos, cuando tu estilo de vida dice claramente que eso no te importa en lo más mínimo.

El andrógino trataba de no mostrar sorpresa ante las palabras del contrario, pero la verdad es que la curiosidad comenzaba a abundar en él. Si sabía tantas cosas de él... ¿Acaso sería magia para leer la mente? No, no era posible eso. Ya se había enfrentado a Ayana Shade y al espíritu de clase Caster, William Shakespeare. Sabía de primera mano cómo se sentía que alguien entrase en su mente, y esto era completamente distinto. Era como si aquel conociera de antemano todo lo que el slime había hecho. Cada pensamiento, cada decisión, incluso hasta los detalles más íntimos y que solamente él y su habilidad conocían, todos parecían haber sido observados por aquel. Solo entonces pudo llamar la atención del slime el averiguar la identidad de quien estaba frente a él, y ya que sus habilidades no respondían, esta sería la primera vez en su vida que haría aquella pregunta.

– ¿Quién eres y qué quieres?

– Al fin has dejado tu orgullo de lado ¿eh? –Respondió el encapuchado con un tono de satisfacción, procediendo a contestar las preguntas del limo– Podríamos decir que soy el narrador de una historia, en donde tú eres uno de los personajes. Lo único que quiero es darte la oportunidad de contestar tus dudas más importantes.

– ¿Dudas?

– Eso es, tus dudas. Sé que siempre te preguntas si estás tomando las decisiones correctas. Si tu yo del pasado estaría de acuerdo con lo que has hecho de ti mismo. Sé que te preguntas si las personas tienen algún valor, si tiene sentido ser un héroe, si de verdad existen la justicia, la bondad, el amor o el perdón. Y sobre todo, sé que te preguntas si los objetivos que persigues te llevarán a algún lado. Bueno, te ofrezco una oportunidad de oro que te ayudará a aclarar las grandes preguntas que no has podido resolver.

El demonio se quedó pensativo por unos instantes. Sin la ayuda de Gran Sabio, no había forma de saber si aquel mentía o no, y tampoco existía forma de defenderse si era una trampa. Después de todo, Rimuru Tempest no era nada sin sus habilidades. Pero la curiosidad finalmente ganó aquella disputa mental, y el monstruo de mazmorra cedió ante el ofrecimiento de su contrario, quien le explicó con detalle de qué se trataba aquella oferta. Contrario a lo que se pudiera pensar, a Rimuru no le pareció una mala idea la oportunidad de hablar con un miembro de Legacy. Después de todo, tenía unos cuantos amigos ahí, como Arturia y Mizore. No estaría de más poder hablar con alguien importante en el instituto e intercambiar algunas palabras. Además, si quería terminar la conversación, solo tendría que intentar matar al contrario y mágicamente sería traído de vuelta a la comodidad de su hogar. Era un premio doble.

– Tú ganas, "narrador". Iré a esa aburrida plática, quizás no sea del todo un desperdicio de tiempo...

Y fue de esa forma que el Rey Demonio fue teletransportado a un lugar que ya había visitado en más de una ocasión: la roca de los suicidios. Un lugar de lo más lúgubre e inhóspito. Es un sitio perfecto para alejarte de todo y de todos cuando estás cansado, o esa era al menos la opinión del limo. Notó entonces, ya estando en el lugar, que ni siquiera se había tomado la molestia de vestirse antes de salir. No era que le importase realmente si lo veían de esa forma. Después de todo, como ser andrógino que era, no tenía nada bajo la falda de lo cual pudiera avergonzarse, ni como chico ni como chica. Pero de cualquier forma, solo para asegurarse de que sus habilidades le hubieran sido devueltas, se quitó ahí mismo la única prenda que llevaba puesta, para luego extender la mano hacia arriba.

– Gran Sabio, dame algo elegante.

« Afirmación: Un atuendo será recreado a partir de la "Habilidad Extra: Hilo de Acero Pegajoso" »

Aquella suave voz en la cabeza del demonio le hizo esbozar una leve risa, pues era la prueba irrefutable de que había recuperado lo que le faltaba. Esa voz que oye el slime en su mente es la "Habilidad Única: Gran Sabio", el, por decirlo de alguna forma, administrador de tareas del rey demonio. Una inteligencia sin emociones que responde a las órdenes del limo y le permite hacer un mejor uso de sus habilidades del que él podría por su propia cuenta. Fue así como, saliendo de la mano del propio peliazul, una serie de hilos blancos y negros comenzaron a cubrirle rápidamente, formando tela en cuestión de instantes. Tanto era así que, en cuestión de pocos segundos, donde antes había solo había una blanca piel desnuda, ahora relucía un vestido victoriano que recordaba a la realeza inglesa.

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  DrGMU-IVYAEaJCX?format=jpg&name=900x900

– Uhh, mi vestido favorito. Tú sí me conoces, Gran Sabio.

Y fue entonces que se dirigió a donde estaba aquel al que se supone que debería encontrar. Lo había visto ya a la lejanía, pero prefirió no llamar su atención hasta que fuera a hablar con él realmente. La forma alegre con la cual daba pequeños saltos y aquel rostro de ángel daban testimonio de que quien se acercaba era una niña de primaria o tal vez secundaria. Sin embargo, había en ello una clara contradicción con la abrumadora aura de oscuridad que despedía. Una energía tan pesada que los humanos normales sienten escalofríos solo de pasar cerca de ella.

– Es gracioso que te llamen Devil Slayer siendo yo el Great Demon Lord ¿No crees? –comenzó a hablar el limo, con toda naturalidad. Su voz no podría encajar mejor con su aspecto, siendo casi hasta tierna. Sin embargo, al ser tan inexpresiva, producía un sentimiento de extrañeza, similar al que se siente cuando un niño está enojado contigo y no sabes por qué– Es una experiencia interesante conocerte, Gray Fullbuster.
Rimuru Tempest Alfa
Rimuru Tempest Alfa


Volver arriba Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Re: Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Gray Fullbuster Mar Jun 16, 2020 5:34 pm

Él aún se mantendría a la espera de la llegada de su "compañía", pero mientras esperaba comenzó a sentir una energía enorme, maligna y desagradable, que le recordaba a la energía que desprendía uno de los magos más oscuros de todos los tiempos... Zeref.
No esperaba que luego de su derrota, llegara a sentir algo tan parecido a aquella energía oscura; si fuera el mismo Gray de hace mucho tiempo, incluso llegaría a sentir terror, ya que antes le tenía miedo a los demonios realmente, ya que uno de ellos le quitó todo lo que tenía... Pero en la actualidad, si bien no llega a tal punto, si le causa incomodidad e inquietud.

— (Esta energía tan tenebrosa… ¿de dónde proviene?...) —
Pensaría a la vez que miraba a su alrededor, hasta que finalmente notó la pequeña figura que se estaba acercando mediante saltos leves, como si se tratara de un niño dando un paseo en el campo alegremente.
A diferencia de aquella, quien se acercaba  y se notaba muy tranquila, Gray se mostraba muy tenso, su cuerpo estaba rígido y apretaba un poco los dientes aunque no fuera visible.
El contrarío terminó por cortar la distancia, y debido a la diferencia de tamaños la cual era enorme, tuvo que bajar la vista poder ver el rostro de ese ser.
Escuchó sus palabras, pero se mantuvo en silencio y pensante por unos segundos.


— (No hay duda… este poder le pertenece a él) —
Una gota de sudor recorrió su mejilla, eso debido a un poco de nervios, ya que no había nada de calor… pese a todo, evitó lo mayor posible mostrar alguna característica que mostrara inseguridad, cosa que era difícil debido a los malos recuerdos que le causaba esa presencia.
Gray también tenía un gran poder mágico el cual podría sentirse, pero era menor al de aquel; sin embargo, a diferencia de su aparición en la mansión, la energía que desprende ahora mismo no es malvada… Eso debido a que no está usando magia para cazar demonios, la cual evita usarla para evitar terminar caer en la locura y mancharse de oscuridad.
Finalmente, luego de un poco de silencio, emitió las primeras palabras hacía aquel.

— Tienes razón… Pero más gracioso es que un ser como tú, adopte esa forma. ¿A quién quieres engañar con ese aspecto? —
En su mirada se denotaría un poco de molestia y desagrado… Lo había visto en la mansión, con “sus otros ojos”.
Ahora mismo, estaba viendo a una tierna niña con un lindo vestido, la cual hablaba con una voz adorable, pero… Nadie se percataría que a través de toda esa dulce imagen, se escondía algo que para cualquiera sería considerado asqueroso.
En aquel momento, pudo ver como es realmente… No sabría explicarlo, pero no se borraba la imagen de su cabeza, una especie de cosa gelatinosa… Si tuviera que decir algo lo más cercano posible a ello, sería Juvia, una compañera de gremio que puede convertir su cuerpo en agua, pero aun así esto era muy distinto.

— Pude ver tu verdadera forma… Pero aun así, no sé lo que eres, ni siquiera sé si eres realmente un demonio. De lo que si estoy seguro, es que no eres una tierna niña como aparentas a simple vista… Rimuru —

Se acercaría un poco más, al punto de que la distancia sería de menos de un metro… Si, sus ojos reflejaban a una niña bonita, un aspecto totalmente falso.
La verdad, nunca pensó que se acercaría tanto a alguien apodado como Rey Demonio sin tratar de atacarle, pero ciertamente, solo había venido a hablar.

— Ahora que te veo de cerca, debo reconocer que he sido bastante descuidado… La primera vez que te vi fue en la mansión, pero antes de eso ya tenías tiempo con Asgard, ¿no es así? Ha sido un gran error de mi parte no haberte conocido mucho antes —

Sinceró; realmente, nunca se habría imaginado que alguien tan poderoso se uniera a las filas de Asgard… Como lo temía, “la nueva generación” era muy peligrosa, y siendo honesto, no estaba seguro de si podría ganar una confrontación con ese supuesto demonio.
Aun así, luego de aquel encuentro en la mansión había investigado un poco, pero no logró descubrir mucha información sobre Rimuru… solo algunas cosas de lo que ha sido capaz, nada más.

— El gran Rey Demonio, Rimuru, aquel que es capaz de comer a sus enemigos, sin dejar ni un rastro, para adquirir sus habilidades… Eres alguien bastante popular y temerario, supongo que sería una desgracia para ti si todos nos quedáramos sin habilidades de repente —
Añadió; ya había pasado algo de tiempo pero… no dejaba de sentir esa inquietud que le generaba estar tan cerca, realmente era una sensación desagradable, no concordaba para nada con la actitud, tamaño y apariencia de aquella “cosa”, ni siquiera sabía cuál era su género realmente, pero en ese caso se dejaría llevar por la engañosa apariencia.

— Pero si vives a costa de devorar a otros… ¿Por qué alguien como tú está en Asgard? No lo entiendo… El objetivo de Siegrain es exterminar a la humanidad, si eso llegara a cumplirse, no habrá nada que puedas comer. ¿Es eso lo que también deseas? —

Preguntaría con suma curiosidad, ya que a su parecer, eso era bastante contradictorio.
Es cierto que su aura estaba llena de pura malicia, pero… ¿realmente Rimuru era pura maldad? Ya ha tenido malas experiencias con los demonios, pero, si Mirajane siendo un demonio pudo llegar a ser parte de Fairy Tail al igual que Natsu, realmente no podría decir que todos son iguales…

— No… no lo creo, dudo que compartas el mismo ideal que Siegrain, pero… ¿Acaso lo haces por simple gusto? — Cuestionaría, para luego retroceder dos pasos, manteniendo un poco más de distancia pero con cuidado de no caerse.
Se colocó una mano en la frente a la par que otras gotas de sudor se hacían presente, era como si se sintiera… ¿Enfermo? Estar muy cerca de Rimuru le hacía recordar muchas cosas desagradables, traumas... así que tuvo que alejarse un poco, pero sin dar el motivo.
Pese a que su forma fuera falsa, realmente era algo humillante que “una niña adorable” le esté haciendo sentir de ese modo, cuando la misma lucía tan tranquila y relajada e inexpresiva, mientras que Gray sentía su cuerpo totalmente pesado; desde hace mucho que no tenía tal sensación tras estar cerca de un demonio, dejó de hacerlo cuando superó su miedo y se convirtió en un Devil Slayer… ¿En verdad existía alguien así en Asgard? Nunca notó algo semejante en Svartgard y Merak.

— Hugh… Quien… Quien carajos eres… —
Incluso sabiendo su nombre y que le llaman Rey Demonio, preguntó eso, lo que daba a entender que aquella era alguien que superaba sus expectativas.
Su respiración era muy profunda, más de lo normal… Todo esto no pudo notarlo en la mansión ya que estaba en su forma de Devil Slayer en ese momento, pero ahora que estaba cerca de aquella sin utilizar dicho estado, tenía la sensación de estar vulnerable, y aunque trataba de no demostrarlo, era imposible no mostrar algo de debilidad.
Era como si pudiera sentir en esa energía a miles de seres gritando de agonía... bastante espeluznante, e incluso... a pesar de ser un mago de hielo al cual no le afecta el frío; llegó a sentir escalofríos.

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Fairy-Tail-S2-76-06
Gray Fullbuster
Gray Fullbuster


Volver arriba Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Re: Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Rimuru Tempest Alfa Miér Jun 17, 2020 4:19 pm

La escena en curso era un tanto cuanto curiosa, por no decir menos. El hombre con el que había venido a hablar estaba hecho una piedra. No es que pudiera leer su mente o algo parecido, no. En realidad, la "Habilidad Única: Gran Sabio", en combinación con la "Habilidad Extra: Percepción Mágica" era capaz de analizar todo en el rango de vista del limo. Cosas como la presión arterial, temperatura corporal y micro movimientos involuntarios eran un juego de niños para la capacidad de evaluación del Rey Demonio. Era de esta forma que podía conseguir estos datos y entender la situación de su rival, sabiendo así incluso si está cansado y agotado en una pelea y solo fanfarronea. En otras palabras, es casi imposible engañar al demonio, aunque no es una táctica infalible. Hay personas que saben ocultar bien sus reacciones, y eso es un problema de cada cuanto.

Sea como fuere, el punto aquí es que el slime escuchaba al azabache mientras este hablaba. Pensó en comenzar una conversación común y corriente, pero parece que este tipo sí había hecho su tarea. Sus preguntas, una tras otra, buscaban desenmascarar de a poco la identidad del limo y la razón detrás de sus acciones. La verdad no es que fuera algo que le molestase. En sus propias palabras "las mentiras son propias de la naturaleza humana, no de la demoniaca", por lo que no le resultaba especialmente incómodo responder a ninguna de las preguntas del hombre. Así pues, determinó que hablaría sin trabas en la medida de lo posible, aunque obviamente no fuese a regalar información comprometedora. Si tenía que mentir para proteger algo, lo haría sin problemas. Después de todo, tampoco es que le preocupase decir algo falso.

– Primero que nada –el demonio levantó su mano derecha al aire, como un general que detiene el avance de su batallón. En ese momento, toda la energía oscura que el demonio emanaba se disipó cual humo hasta ser inexistente. De hecho, de no ser porque se veía físicamente, cualquiera diría que el slime había desaparecido. No había rastro de su presencia en lo absoluto. No emitía ningún tipo de energía y no tenía aroma alguno. Incluso podría pensarse que se trataba de una ilusión, aunque conseguiría tocarle cualquiera que lo intentase– Noté que te molestaba. Lo siento, es una mala costumbre dejar mi aura visible. Aunque no lo creas, es más ventajoso de lo que parece. Sin embargo, me sorprende que puedas percibirla con tanta intensidad. Normalmente solo los animales huyen al sentirla.

Si se preguntan si cabe la posibilidad de que aquello fuera una burla o un insulto, la respuesta es "sí". Pero es que el limo hablaba con tanta amabilidad que incluso si lo fuera sería difícil sentirse ofendido al respecto. De cualquier forma, no lo hacía por molestar. Rimuru Tempest estaba diciendo la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Para alguien que ve a los humanos como insectos, los animales suelen resultarle aún más repugnantes que insectos. Es cierto que tenía sus excepciones, pues no es raro encontrar al demonio acariciando cada gato que se encuentra por la calle cuando sale de turismo a Japón. Pero ya que, de ahí en fuera suelen resultarle un fastidio, los evita en la medida de lo posible con aquella energía estremecedora que los humanos generalmente no son capaces siquiera de percibir.

– ¿Ahora bien, ya que hiciste bastantes preguntas, las responderé una por una y de paso yo te interrogaré a ti. Es suficientemente justo para ti? –preguntó el peliazul a su contrario, con esa voz tan amable y pícara que le caracterizaba, para a continuación proceder con su respuesta.

– Número uno: ¿Qué problema tienes con este cuerpo? A mí me gusta. Esta apariencia es linda y le viene bien todo tipo de ropa, tanto masculina como femenina. Además, en esta forma puedo probar cosas deliciosas, correr, bailar, y se ve más cool cuando estoy en combate, algo así como las chicas mágicas de los mangas. Esta apariencia es mi único recordatorio de alguien que ya no está a mi lado. Sería una pena no usar este don que me dejó y disfrutarlo al máximo.

Aquella respuesta el demonio mismo no podía creerla del todo. No porque fuera falsa, sino porque había más verdades ahí de las que había notado antes. Él mismo no era capaz de recordar a esa persona que le había dado aquella apariencia, ni sabía cómo realmente es que la había obtenido. Pero había dentro de él una corazonada, un sentimiento que permanecía radiante y que le susurraba constantemente que ese cuerpo tenía un significado y un valor inigualables, aún si no podía recordarlos. Aún si le preguntasen quién era esa persona, se haría de oídos sordos. Él no podía recordar absolutamente nada de ella, excepto por una frase que venía a su memoria de forma extraña, diciendo "la persona con la que debo estar".

– En segundo lugar, estás en lo cierto. Llevo bastante tiempo en Asgard. No significa realmente mucho para mí si te digo la verdad, pero pues vivo feliz ahí. El internado es lúgubre y deprimente. Su estilo me recuerda a Drácula de Bram Stoker, así que es divertido andar por ahí cuando lees una novela de terror. Yo tampoco te había visto antes de lo de la mansión, así que no me extraña que no nos conozcamos. Debe ser el destino evitando que nos matemos entre nosotros, ¿no crees?~

Mencionó eso último en un tono de broma. La verdad era difícil para el Rey Demonio tomarse todas las cosas en serio, a tal grado que terminaba completamente aburrido si lo intentaba, y eso le llevaba a ignorar por completo a la otra persona, por lo que hacía bromas ocasionales para pasar el rato, aún si son malos chistes o bromas de mal gusto. Cualquier cosa mientras pueda soltar la tensión del momento. La realidad es que Rimuru Tempest no cree en algo tan absurdo como el destino. La idea de que los resultados de las decisiones de todos se encuentren escritos ya es toda una ridiculez, o al menos es eso lo que piensa el limo. A su opinión, el mundo es como un tablero de ajedrez. Hay una cantidad limitada de posibles resultados, pero cualquiera de ellos es igual de posible.

– Número tres: Estás mal informado tanto de mí como de los planes de Asgard –Tras decir esto, el slime soltó un suave bostezo, cubriendo su boca con una mano por algunos instantes. Posteriormente a esto, se dejó caer hacia atrás, como si fuera a sentarse en una silla. Inmediatamente, una estructura de roca salió del suelo, formando un trono de piedra en el cual aterrizó el demonio, cruzando entonces las piernas como una "señorita"– Asgard no quiere extinguir a la humanidad, y yo no siempre voy a necesitar comer seres vivos. Necesito energía mágica por montones para alcanzar mi objetivo, y comer personas es la manera más efectiva por ahora. Aunque, si hubiera una guerra del grial, preferiría mil veces ir tras ese objeto que seguir llenándome las manos de sangre. Etto... Aquí entre nos... N-no sé usar una lavadora. Si mi ropa se arruina, tengo que conseguir nueva... No puedes mandar a la tintorería tu vestido bañado de sangre tres veces por semana...

Aquellas últimas palabras las dijo con un tono de vergüenza. Pese a tratarse de algo tan tétrico y enfermizo, aquel lo contaba como una niña pequeña que confiesa que se hace en la cama. Realmente es como si aquella vida llena de sangre y de muerte como algo completamente normal. No como si le pareciera divertido o como si actuase por maldad, sino más bien como si su vida entera se le hubiera enseñado que nada de malo había en lo que hacía. Después de todo, aunque costara admitirlo, de verdad se comportaba como una niña. Una tétrica y caprichosa, pero niña a fin y al cabo.

Esto se pudo notar con mayor claridad cuando suspendió su explicación abruptamente por un motivo completamente fuera de lugar. En ese instante chasqueó los dedos y, solo entonces, un portal se abrió al lado del limo. Dentro de este se veía tan oscuro que sería imposible alcanzar a ver algo. Sin embargo, de él salió una chica de hermoso semblante y de sensual figura. Con una piel pálida como la nieve y cabellos blancos como la seda. Sus ojos, como zafiros, sus prendas claras como la luz. Con un aspecto de lo más tradicional, aquella joven figura con ojeras de zorro y nueve largas colas entró en escena.

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  20190728163950_JENAU.thumb.700_0

– Es una belleza ¿No crees? Pero bueno, ese no es el punto. Lo que pasa es que se me antojó un bocadillo, espero no te moleste.

La joven kistune, que no tenía signos vitales y cuya temperatura estaba por debajo de la necesaria para la supervivencia de cualquier ser vivo conocido, arrastró desde el portal un carrito de servicio, como los de los restaurantes y los aviones, el cual estaba repleto de comida chatarra. Bolsas de patatas, mini pizzas, hamburguesas, chocolates, gomitas y refresco de uva sin gas. La mujer sirvió refresco de uva en dos copas de cristal, tras lo cual entregó una al demonio, junto con una hamburguesa, en una charola de plata o de acero inoxidable, no sería fácil determinarlo con solo verla. Seguido de esto, llevó de la misma forma la segunda copa de jugo, una bolsa de patatas, una hamburguesa y algunas golosinas frente al azabache, esperando inmóvil a que aquel tomase algo.

– Anda, no seas tímido, come algo. Te juro por mi gran nombre, Rimuru Tempest, que nada está envenenado. Admito que no es la comida más saludable del mundo, pero un poco de comida rápida no va a matarte –mencionó el limo, dando una buena mordida a su hamburguesa y bebiendo un poco de jugo. Un gesto de placer se le escapaba mientras comía, tanto así que sus mejillas se teñían de rosado. Y es que pocas cosas, si es que hay alguna, pueden hacer feliz al Rey Demonio como la comida lo hace– Ahora, número cuatro: mi nombre es Rimuru Tempest. Me han llamado de muchas formas. Dai Maō, Demonio. Diablo. Slime. Monstruo. Asesina de magos. Espíritu diabólico. Dragón antiguo. Pero, si tuviera que definirme yo mismo, solo diría que "no soy un slime malo"~

A continuación, el slime guardó silencio por unos minutos. Más específicamente, este se dedicó a comer tranquilamente. Se notaba que disfrutaba de su comida pacíficamente, con una alegría que era casi hasta contagiosa. No parecía que fuera a dar importancia a ninguna otra cosa hasta que hubiera terminado su almuerzo. Y, efectivamente, no fue hasta que terminó de comer que volvió en si, entregando la copa a la joven kistune quien, sin haber pronunciado una sola palabra desde que apareció, recogió los utensilios usados y se quedó a un lado del carrito, como esperando por si alguien pedía algo más. Por su parte, el demonio comenzó a hablar nuevamente, con la misma actitud alegre de siempre, mas con una mirada mucho más determinada.

– Tengo entendido que llevas bastante tiempo en la Academia Seeds of Legacy. Sé que estuviste en los tiempos en los que Asgard no existía, y el Internado Merak era liderado por Yuno Gasai. En esos tiempos, la borracha de tu directora... Cómo es que se llama... ¡Suigintou! Ella no estaba a cargo. Tengo entendido que fue el Espíritu Heróico Gilgamesh quien dirigía la academia en esos tiempos. ¿Cómo podía un hombre que es tan ambicioso, prepotente, orgulloso y sanguinario como yo ser el líder de tu amada escuela de héroes? Para empezar ¿Existe alguna diferencia entre héroes y villanos? Ambos queremos cambiar algo y luchamos por conseguirlo. ¿Qué nos hace diferentes?

El limo comenzó con una pregunta curiosa, mirando al azabache directamente. Si había alguna cosa que le interesaba saber, era esa. Entender el punto de vista de un héroe debería ser fundamental para un villano. Comprender a tu rival es de suma importancia para saber cómo actuar en relación con él. Es por eso que se apresuró de inicio a hacer las preguntas que de verdad quería saber. Una tras otra, sus incógnitas fueron formuladas de forma rápida y directa, esperando que aquel pudiera responderlas. Después de todo, si había una razón para que ese tal "narrador" lo llevase ahí, debería ser esa ¿No?

– Si las leyes que tanto defiendes te impidieran salvar a alguien que es sumamente importante para ti ¿Dejarías morir a esa persona solo porque es lo correcto? Yo actuaría conforme a las reglas sin pensarlo si eso me ayudara a alcanzar mi objetivo con más facilidad. Pero te tengo noticias: Asgard puede ofrecerme más que Legacy. Asgard me permite actuar conforme a mis ideales. Además, no tengo que responder ante la ley por mis acciones. Sería imposible alcanzar mi objetivo si la ley me lo prohíbe. Sería considerado una amenaza. Me restringirían en la medida de lo posible. Me dirían qué hacer con mi poder todo el tiempo, y me convertiría en una marioneta de la humanidad. Pero tú ¿Estás bien con gente que te diga qué hacer? ¿Estás bien dejando que otros decidan por ti lo que es correcto y te cataloguen como un villano si no te apegas a sus expectativas? ¿Está bien volverte el enemigo de todo aquel que no obedece las reglas que otros han creado para su propio beneficio?

En ese momento, el demonio se quedó callado. Chasqueó los dedos una vez, y la mujer que había traído para atenderle tomó una bolsa de patatas del carrito de servicio, llevándosela al slime. Este, con toda tranquilidad, decidió abrir la bolsa y volver a comer tranquilamente, mientras aguardaba por la respuesta de su contrario.
Rimuru Tempest Alfa
Rimuru Tempest Alfa


Volver arriba Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Re: Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Gray Fullbuster Jue Jun 18, 2020 1:46 am

Si… definitivamente no estaba en una buena posición ahora mismo; necesitaría algunos segundos para adaptarse a esta presencia, y evitar recordar el pasado.
Pero… abrió los ojos de sorpresa al ver que de un momento a otro, ya no sentía nada… aquella energía que “la menor” emitía, había desaparecido por completo.
Se sentía extrañado… pero lo que suponía es que ella era capaz de ocultar su presencia y energía, ya que no lograba percibir nada, como si no estuviera allí; debido a eso, pudo tranquilizarse nuevamente, no sin antes respirar un poco profundo y calmarse, a la par que escuchaba sus palabras, en medio de la pausa que se haría, él respondería.

— Los magos… somos sensibles a esas cosas… Especialmente los que son como yo que ya estamos familiarizados con ese tipo de energías… —
Hacía algunas pausas, similar a como hablaría alguien que acababa de correr bastante y estaba cansado; pero poco a poco, estaba volviendo a la normalidad.
Claramente, un humano no cuenta con esa capacidad, y otros magos, quizás no se habrían sentido intimidados, pero Gray conoce muy bien esa clase de energía, y sabe que cuan peligrosa puede llegar a ser.
Ella hablaba con mucha “amabilidad y educación”, pero eso no le hacía confiarse sobre el filo que pudiesen tener sus palabras, aunque de momento, no ha notado nada.

Gray mantenía la vista hacia abajo, viéndose muy pensante, pero aun así lograba escuchar y entender todo lo que ella decía, por lo que asintió cuando mencionó lo de luego hacer preguntas, pues era algo justo. Entonces, procedería a oír sus respuestas; primero fue sobre su apariencia, entendió un poco lo que quiso decir sobre que no estaba mal esa forma, aunque no entendió a qué se refería con chica mágica de manga… Y algo que le hizo levantar la vista nuevamente y llamó su completa atención, fue el hecho de escuchar que esa forma le pertenece a alguien que ya no está, pero su forma de decirlo, denotaba que fue alguien importante para ella. ¿Un ser así, puede llegar a sentir algo por alguien? Al parecer… la respuesta es sí.

— …. —

Permanecería en silencio, aún no era su momento de hablar; la segunda respuesta, nuevamente mencionó algo que no conocía, pues realmente, Gray no leía, y tampoco se distraía viendo esa clase de cosas, por lo que simplemente no lograba entenderle del todo cuando mencionaba eso… Pero si, era por lo menos curioso que no se hayan visto antes, tomando en cuenta que ambos son miembros muy importantes para su respectivo bando, y que la desaparición de uno de ellos podría llevar al otro bando incluso a la victoria.

Algo que estaba notando Gray, es la manera de responder las cosas que tiene el Rey Demonio, hablaba literalmente como si fuera una mezcla entre un niño y un adulto… Por un lado respondería seriamente, pero por otro… parecía estar bromeando, lo cual era un poco molesto a decir verdad, pero comenzaba a comprender su manera de pensar a medida que continuaba escuchando.
Notó que aquella dispuso de una silla, por lo visto creada por ella, para “mayor comodidad”, pero el pelinegro continuaba en la misma posición, estando de pie y con los brazos mirando hacia abajo, sin quitar su vista de ella.

Lo que dijo después, fue de sumo interés… Y no, no se refería a lo de no saber usar una lavadora, si no, su preferencia… Había escuchado sobre el Santo Grial gracias a unos amigos que tuvo en el pasado; un objeto capaz de concederte algo que desees, y si aquella pudiera conseguir eso, dejaría de comer personas. La verdad, llegado a este punto, no sabía que pensar sobre Rimuru. Y bueno, algo también de importancia, es que lo que mencionó sobre no saber lavar, denotó algo de vergüenza, lo que le dio a entender algo. Sus pensamientos seguían siendo un misterio, pues hasta ahora, no había dicho ni una sola palabra, ni realizado gesto alguno, continuaba con su posición de solo escuchar, aún no… aún no ha formulado sus palabras…

Miró a otra parte cuando luego de un chasquido, se abriera un portal muy oscuro; no podría ser alguna especie de ataque, el narrador se los había advertido, por lo que no se pudo en guardia y continuó observando con curiosidad. Notó que de ella emergió una persona, no estaba seguro de si era la misma que había visto en la mansión… pero de ser el caso, ¿entonces se trataba de una invocación de Rimuru? Lo más curioso es que, podía sentir algo muy familiar para él que provenía de ella, por un momento lo dudó pero luego…

— (¿Hielo…?) —

Gray podría reconocer esa magia, incluso si no lo pareciera… Aquella chica, realmente, se veía pura y sin rastro alguno de maldad, lo cual es bastante irónico siendo una invocación de alguien que desprende semejante energía oscura. Gray siempre ha pensado que la magia de hielo es de las más puras y bellas, y quienes eran capaces de usarla, en su mayoría tenían bondad dentro de sí… Todos los enemigos que usan dicho poder y ha enfrentado en el pasado, la mayoría luego de ser derrotados terminaron redimiéndose incluso luego de hacer acciones atroces. Notó el acercamiento de la recién llegada con los bocadillos, aún seguía inmóvil y realmente no tenía ganas de comer, pero tras escuchar la insistencia de Rimuru, vio por unos segundos la hamburguesa y la tomó, para darle un mordisco y de ese modo, seguir escuchando las respuestas que Rimuru otorgaba.

Si, tenía muchos nombres… aunque ahora sabía lo que era esa forma gelatinosa; Slime. Pero, ella pese a sus acciones… ¿No se considera un Slime “malo”?
Gray dio otro mordisco a su hamburguesa, era claro que comía mucho más lento que ella.
Aun así, terminó por comerla, y tomar un trago del jugo de uva, lo suficiente para saciar su sed… A pesar de lo que hablaban, ella se notaba muy alegre, como una niña que fue llevada a comer en su puesto de comida favorito. Por otro lado, Gray ya no se notaba tenso, pero tampoco se le veía alegre, simplemente estaba tranquilo y frío, similar a aquella mujer que no había dicho ninguna palabra desde que llegó, y solo recogió las cosas como si fuera su único propósito.

De pronto, sintió la “pesadez” en la mirada de Rimuru, en toda la conversación no le había visto de tal modo, por lo que presentía que le iba a preguntar algo que le interesaba saber; la contraria ya respondió todas las preguntas que hizo.
Era cierto, Gray estuvo en los tiempos en que Gigalmesh era el director, y lo conoce muy bien, también sabe de muchos otros hechos que ocurrieron en ese tiempo…
Pero seguía sin decir ni una palabra, pues Rimuru no había terminado de hablar, y eso no fue todo, pues añadió algo más sobre ello, y realmente le resultaba curioso que el Rey Demonio se interese por saber lo que pensaba al respecto, y dichas preguntas le tomaron de imprevisto; al igual que Gray, sus dudas no tenían que ver con los movimientos o planes del otro bando, tal y como lo había dicho el narrador.

— …….. —

Finalmente, cuando Rimuru expresó sus dudas, todo se mantuvo en silencio completo por un tiempo, siendo que solo el viento se hacía presente y los ruidos que provocaba la peli-azul al masticar sus patatas. Gray, quien ha permanecido callado todo este tiempo, simplemente bajó la mirada, sus ojos eran cubiertos por la sombra de su cabello. De ese modo, comenzó a caminar hacia donde yacía sentado el Slime, y sin mediar palabras, pasaría por su lado, como si se estuviera retirando del lugar.  Pero se detendría dándole la espalda a una distancia prudente, y luego colocaría una mano en el suelo a la par que murmuraba unas palabras casi inaudibles.

En ese instante, comenzó a ser notoria un aura gélida a su alrededor, que representaba el elemento hielo. Dicha aura empezó a materializarse en forma de hielo al frente de él, adquiriendo forma y moldeándose… Si ella decidía mirar hacia atrás, podría ver unos railes de hielo, los cuales se formaban y alargaban, primero por el suelo y luego ascendiendo, creando algunos círculos/circuitos en el cielo. Luego de llegar a gran altura, comenzarían a descender y nuevamente ascenderían, creando más círculos y movimientos curvos.
Al final, los raíles pasarían por espaldas de Gray, hasta conectar con los que tenía frente a su mano; luego frente a él, se creó un tren conformado por vagones, en los cuales pueden subirse las personas. El resultado final… Una montaña rusa hecha de hielo.  Gray era un mago capaz de crear cualquier cosa hecha de hielo, el único límite era su imaginación; normalmente la usaba para batallas pero la verdad, es que esa magia es muy versátil, y puede utilizarla también para otros fines.
Luego de eso suspiraría y se levantaría, para caminar nuevamente hasta donde estaba Rimuru, quería posicionarse justo al frente.
— (No puedo creer que vaya a hacer esto…) —
Diría en su mente mientras ofrece su mano a Rimuru, a la par que con la otra se rasca la mejilla con un dedo y en su rostro se denotaba un leve rubor, pues estaba algo avergonzado por esto.
Gray se había mantenido en silencio toda la conversación, para analizar totalmente al Rey Demonio, viendo con detenimiento sus expresiones y escuchando su forma de hablar… Pese a que aquella apariencia no fuera “real”, y que quizás ella es incluso mayor que él en lo que respecta a edad, llegó a la conclusión de que… Rimuru es una niña, y como todo niño, debía odiar aburrirse y estar siempre en el mismo lugar. Entonces, para entender completamente a Rimuru, tenía que “hablar su mismo idioma”, y realmente, esto es algo que quizás ella no se esperaba, porque Gray tampoco tenía esto en mente y sería imposible creer que estuviera haciendo esto con alguien que es un demonio... Pero al final, con algo de vergüenza y algunas pausas en sus palabras pronunció.

—… ¿Te gustan las montañas rusas? Puedes subir conmigo si quieres, y ella también si lo desea… Allí responderé todas tus dudas… — Diría esperando alguna respuesta de la contraría, la cual si decidía tomar su mano, la llevaría a dicho tren.
Cada vagón solo permitía dos personas, por lo que si la otra chica decidía subirse, tendría que ser en el segundo, Gray tenía pensado subir con Rimuru en el primero, porque quería que le escuchara atentamente. Si todo iba como quería, abriría la compuerta helada para que ella se siente, y luego lo haría él a su lado; pese a ser de hielo, realmente no estaba húmedo, se podría sentir como si realmente estuvieran sentados en un tren de hierro.
Cuando estuvieran todos adentro, él soltaría la mano de Rimuru y dicho tren comenzaría a moverse, Gray era capaz de controlar su hielo, por lo que podría hacer que se moviera sobre los rieles tal y como deseaba. La primera parte era despacio, ir subiendo primero… y tendría tiempo suficiente para responder con tranquilidad antes de que se pusiera intenso.
Entonces, apoyando su codo en una de las compuertas y mirando al lado contrarío de su acompañante, expresaría sus respuestas.

— Estoy en la academia Legacy desde hace mucho tiempo, prácticamente desde sus inicios… Es cierto, Gigalmesh era el director en aquel entonces, y llegué a conocerlo, por lo que puedo confirmar lo que dices sobre su actitud. Pero Rimuru… Todos pueden cambiar, para bien o para mal, y si nunca lo hacen es porque murieron antes de lograrlo. Rin y Archer son tus amigos, ¿no es así? En ese momento no los reconocí, pero ahora los recuerdo… Ellos fueron parte de Legacy, y Rin llegó a ser mi amiga, pero ahora que los vi nuevamente, pude darme cuenta de que no son los mismos de antes y ahora están en contra de lo que alguna vez, ellos protegían… Gigalmesh, terminó siendo asesinado por un Legaciano, Emilia, quien era una de mis mejores amigas, confié mucho en ella y nos la pasábamos juntos, y aun así… asesinó al director de su academia. ¿Quieres saber la diferencia entre un héroe y un villano?  Realmente, yo no estoy jugando a ser un héroe, Rimuru; mis amigos están en Legacy y… — Aun subiendo, le miraría directo a los ojos, teniendo una expresión de molestia — ¿crees que podría quedarme de brazos cruzados, viendo como mis camaradas son devorados por ti? Por como hablaste, en algún momento tuviste a alguien que te importó, ¿acaso no harías lo que esté a tu alcance, para protegerla? Un villano, no le tomaría importancia a eso, simplemente trataría de conseguir sus ambiciones sin pensar en nadie más, no está interesado en tener amigos… Yo no me considero un héroe, solo quiero proteger a mis amigos… Además, Rimuru, te equivocas en algo… — Diría mientras soltaba una leve risita, y mostraba una sonrisa — Conocí lo suficiente a Gigalmesh para estar seguro de que no te pareces a él, la diferencia entre ustedes… Es que él si tenía claro sus propósitos —

Dejaría de mirarle, para luego ver al cielo, hubiera sido una linda vista si estuvieran las estrellas pero tristemente… solo eran visibles las nubes grisáceas.

— ¿Leyes? — Gray comenzó a reír sobre eso; él si se tomaba las cosas en serio, pero, realmente era gracioso que mencionara eso, ya que él al igual que su gremio, muchas veces han actuado en contra de la ley para hacer lo correcto — Aún no me conoces… Yo he tenido que actuar en contra de las leyes al igual que mis compañeros, porque seguir las leyes todo el tiempo no está bien, pero tampoco ignorarlas… Asgard es un mundo sin reglas, y sé que a alguien como tú eso debe gustarle, los niños odian las reglas. ¿Tengo razón? — Hizo una pausa, para fijar sus ojos en los de aquella, denotando determinación en su mirada, a la vez que exclamaba — ¡Pero un mundo sin reglas no sirve! Tarde o temprano se desmoronará… Debe existir un balance. Parece que piensas que somos robots que solo seguimos ordenes, ¡pero no es así! ¡A mí me da igual ser un héroe o un villano mientras pueda proteger a los que me importan! ¡Aún si eres un demonio, y sabiendo todas las atrocidades que has hecho, no quisiera matarte, Rimuru! ¡Si fueras mi compañero, yo te protegería de cualquiera que trate de hacerte daño, incluso si eso significa romper las leyes y convertirme en un criminal, porque para eso están los amigos! Dijiste que no sabías lavar, ¿Cierto? Pues yo podría enseñarte, porque aún puedes aprender cosas nuevas—

Levantaría mucho la voz, si bien parecía estar enojado, realmente no era así… Aunque si parecía como si se tratara de un padre regañando a su hijo.  Ahora bajaría la voz, notándose más tranquilo.

— Porque con tus respuestas puedo ver, que no eres un villano desquiciado sin remedio como quieres creer… Me atrevo a decir que eres más una niña como aparentas… Pero ahora me doy cuenta… de que soy el único que puede ponerte un alto… Es la única forma de saber que mis compañeros estarán a salvo —

Quizás todas sus palabras eran en vano, y a ella le de igual o se lo tome como broma, pero igualmente… solo suspiraría y si ella se lo permitía, colocaría una mano sobre su cabeza para acariciarle un poco con delicadeza; por un momento, había olvidado que tenía a su lado a un demonio aterrador que es posiblemente mucho más poderoso que él y que si no fuera por la advertencia del narrador, sería capaz de comérselo; y estaba comenzando a creer que realmente solo estaba con una niña.

— Yo seré quien selle tu oscuridad, Rimuru —
¿Era una promesa, amenaza o aclaración? Quien sabe... Ella tendría que interpretarlo como más lo creyera.

— No espero que cambies tus creencias, y lo más seguro es que sigamos siendo enemigos, pero… Trata de disfrutar el paseo—
Diría para quitar la mano de su cabeza, pues finalmente habían llegado al punto en que el tren bajaría bruscamente y comenzaría lo divertido.
Gray Fullbuster
Gray Fullbuster


Volver arriba Ir abajo

Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]  Empty Re: Conociendo al Rey Demonio [Rimuru]

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.