Jeanne (Estudiante)

  ▲Clase: Tanque

  ▲Raza: Espectro

  ▲Procedencia: Francia

  ▲Apodo: La Doncella de Orléans

  Retrato del Personaje

  Físico: Jeanne es una mujer de estatura media, de cabellera color ceniza y ojos de un amarillo intenso. Es relativamente delgada, aunque posee un busto generoso y tiene el pelo corto ,hasta casi rozar los hombros, al menos aparentemente.
Jeanne esconde la gran parte de su pelo bajo su armadura, ya que al ser largo (le llega hasta la mitad de los tobillos), suele estorbarle la mayor parte del tiempo. Su armadura está compuesta por un peto negro completamente, en el cual debajo están un vestido negro, que al final pareciera haber sido quemado, y un chaleco del mismo color. Lleva unas cadenas para sujetar la armadura y guanteletes negros, además de botas del mismo color. Además, lleva un cintillo negro de metal en la cabeza.Casi siempre lleva sus botas negras con medias del mismo color pero un tono más suave, que dejan un "Zettai Ryouiki" bastante amplio. Al despojarse de su armadura suele llevar el pelo suelto completamente, mostrando lo largo que es, y cambiar de guanteletes y botas, que se vuelven más grandes y más detallados. Lleva su espada en la funda de su cintura, además del estandarte con la bandera de su alianza y su capa, que la igual que su vestido, parecería estar quemado en el fondo.

Tanto sus brazos (desde la manos a los codos) como sus piernas (desde los pies hasta las rodillas) tienen quemaduras visibles, producto de la exposición al fuego.

  Psicológica: Jeanne dejó de ser la mujer santa de antaño para convertirse en una mujer más irritable y errática, aunque sigue manteniendo algunos aspectos de la antigua. Adopta una postura defensiva contra todo aquel que se le acerque, incluido su posible master. Es posiblemente debido a su actitud de gato acorralado. Es intimidante, pero solo hace para protegerse, por dentro sigue siendo una mujer amable pero con un objetivo distinto.

Ella a dejado de preocuparse por el mundo, siendo ya una especie de villana. En realidad, su único deseo ahora es básicamente "quemar todo lo que existe". Una especie de venganza, nada más. Aún así, ella puede demostrar afectividad en ciertas ocasiones, ya que por dentro sigue siendo como una chica de 16 años (mucho más edgey). Aún así, ella ha dejado de manifestar actitudes tan propias de su supuesta edad, convirtiéndose en alguien más refinada, con mucho más aires de la realeza.

Su actitud cambia mucho si se llega a entrar en pelea o a enojar con alguien. Su comportamiento se vuelve muy, pero muy violento. Inclusive puede que empiece a decir cosas sin sentido por más se que intente razonar. Esta llena de rencor, por lo que no dudara en  masacrar al enemigo que tenga en frente sin importarle la vida de los demás. Es extremadamente amenazante, mucho más peligrosa y quizás con la mente mucho más dañada de lo que podría parecer en un principio. Se podría decir que esta es su verdadera personalidad.

Es algo inocente ante temas afectivos, sobre todo cuando se le muestra un cariño hacía ella. Generalmente primero se niega, pero más tarde puede que termine aceptando. Cree que realmente no puede ser perdonada por todos los pecados que ha cometido, se ve a si misma como un pecado viviente y por eso rechaza la relación con gente que no sea tan "sucia" como ella. Puede mostrar su lado más dulce y alegre si se puede explotar este punto.

  Historia y Llegada

  ▲Nacida en Domrémy, Francia, Jeanne fue hija de dos granjeros. En una ocasión, ella recibió el comando de Dios para poder luchar, liberar a la gente de Orleans. Ella escuchaba los lamentos de Dios, lamentos por la propia humanidad. Así, ella dejó la vida de campesina para convertirse en una mártir más, dejando de lado la idea de poder amar y ser amada por nadie más que fuera Dios. Así, ella se convirtió en una guerrera. Una que lucha por su Dios y gente, una mujer que solo vive para el pueblo, siempre trayendo la bandera de su propia tierra, luchando al lado de Gilles de Rais.

Aunque ella intentó aprender a leer y escribir, para entender aquellas sagradas escrituras, simplemente le fue imposible aprender a escribir más que su propio nombre. Aún así, ella siempre intentó dar lo mejor, sobre todo para rezar al Señor. Aquel Dios lo era todo para ella, todo por lo cual luchaba, más que por la propia gente

Finalmente, Jeanne logró ganar. Había logrado finalmente la libertad de su pueblo, la completa absolución del "mal". Jeanne y Gilles fueron nombrados héroes nacionales por el Rey Charles. Aunque esa dicha no logró durar...tanto.

Jeanne fue sentenciada a muerte. La sospecha de brujería y la Inquisición había un punto crítico por ese entonces.

Estaba confundida, pero no tuvo más remedio que aceptar. Terminó aceptando que Dios la había abandonado. Aquel Dios por el que luchó tanto, por el cual vivió tanto, por el cual dedicó su vida la estaba dejando de lado. ¿Qué podría hacer sino aceptarlo? Quizás amaba demasiado a ese Dios como para odiarlo en ese entonces.

Con las manos atadas a una estaca y debajo de ella, un montón de yesca, paja seca. Se decía que el fuego tenía propiedades que purificaban el cuerpo y el alma. Una forma de pagar limpiarse de los pecados. Una forma de poder ser perdonado. Pero, ¿qué debía ser perdonado? ¿Qué había hecho mal? Incluso todos eran sospechas. Solo pudo quedarse rezando mirando el cielo, desando que un milagro la salvara.

El fuego, las llamas redentoras, se encendió debajo. Pronto comenzó a expandirse, cubriendo todo a la redonda. Su piel comenzó a quemarse, pero eso no detuvo sus oraciones. Rezaba, rezaba y rezaba en ese infierno, el infierno que la purificaría. Solo se detuvo cuando el dolor fue insoportable. Le dolía todo el cuerpo, ¿por qué seguía consiente? Solo deseaba morir, lo había aceptado, entonces, ¿por qué Dios simplemente no la dejaba morir?

Comenzó a recordar su vida en el campo, lo que pudo haber hecho, si tan solo, tan solo...
No, ella no podía arrepentirse. No podía, no había hecho nada malo. Los culpables eran los propios inquisidores, los verdugos que la habían atado, que la estaban asesinando. Dios ya no estaba con ella, ya nunca más lo estaría, entonces ella tampoco estaría con él. Una resolución tan simple, pero que la llenó de dolor. Antes de morir, soltó un fuerte grito, mirando el cielo...lloraría si no tuviera los ojos completamente quemados. Y de esa forma, su consciencia se apagó.

Pero ella no terminó ahí. Simplemente...no podía abandonar el mundo. Cuando despertó, parecía que había sido un sueño. La chica rubia pensó que la muerte le había jugado una broma, nada menos alejado de la realidad. Jeanne había ascendido al Trono de lo Héroes. Un lugar extraño y misterioso, pero que extrañamente del cual logró adaptarse rápido.

La verdad, es que poco tiempo pasó hasta que fue finalmente invocada. Aunque claro, ella no era algo natural. Era una anomalía. Jeanne D'Arc, quién había sido llamada por el Santo Grial en esa ocasión, había obtenido habilidades extrañas.


  Habilidades y matrícula

  ▲Habilidad de clase: Superarmadura

  ▲Habilidad de raza: Ayuda de los Espíritus

  ▲Habilidad personal: Telekinesis

  ▲Habilidad de adquisición: Superdestreza

  ▲Estatus: Estudiante

  ▲Armas y poderes:

Saint: Recupera lentamente sus heridas después de un combate y solo si está quieta. Debilidad: al estar quieta, puede estar más vulnerable.

La Grondement Du Haine: Su Noble Phantasm. La bandera que carga, como la representación de todos sus rencores, es lo más apropiado para ella en esta clase. Usando la bandera, la cual suele usar como lanza improvisada, es capaz utilizar este ataque tan poderoso.

Gran salto: Puede saltar varios metros en el aire.

Detección: Puede detectar objetos invisibles con solo reunir las suficientes energías. Debilidad: una vez detecta al enemigo, no puede atacarlo primero.

  ▲Pacto: Servant

  ▲Ocupación: x

 
   Datos adicionales (opcionales)

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Jeanne D'Arc / Fate Grand Order / Jeanne