[Flashback.] El día que conocí a un héroe (Midoriya).

Todo parecía indicar que aquel sería un día  normal, sobre todo ordinario. ¿Quién  iba a sospechar que tal accidente obligaría a todos los peatones a detener su paso? La respuesta   era simple: nadie. Mucho menos Uraraka Ochako, que volvía a su casa luego de clases, tarareando una pegajosa canción  que había  oído   mientras andaba en el metro.

Para cuando quiso darse cuenta, todos a su alrededor habían formado una multitud e incluso   algunos autos habían parado en aquella calle de un barrio comercial japonés. Incluso  así,  la castaña apenas podía  tener una idea de lo que ocurría; la cantidad   de personas que se concentraban en ese lugar apenas le permitían   ver o escuchar. Por su altura y sus cuchicheos.

《¡Es como una gran gelatina! ¡Ese villano se está tragando al chico!》, ese comentario  que llegó   a sus oídos  le impulsó a acercarse, esquivando a las personas para llegar hasta la primera fila y convertirse en la espectadora de lo que pronto se convertiría en una catástrofe. Sí. Podía  verlo. Era una masa verde, con apariencia viscosa. Era muy desagradable , o al menos ese fue su pensamiento antes de que algo le hiciera alertarse: podía  controlar al chico que había  atrapado, tanto en lo físico  como en lo que a sus poderes se refería.  Y no tardó  en hacerlo saber: unas chispas azules salieron disparadas hacia los edificios más   cercanos, logrando que los vidrios estallara y algunos escombros cayeran en dirección  a la escena.

En pocos segundos todo se convirtió  en un caos. Había   gente corriendo en la dirección opuesta, con desesperación. Todos querían  huir y esperar que otro  se hiciera cargo de ese monstruo. ¿Qué  podía  hacer una chica de 13 años en un momento así? Evidentemente el miedo se había  apoderado de su cuerpo, haciéndola actuar con torpeza; y entre tantas personas, no fue algo extraño tropezar y encontrar el suelo.

 Nadie la ayudó, porque nadie quedaba. Sólo   ella y otra chica más, a la que pudo ver por el rabillo del ojo. Era un estudiante de otra escuela. Su tobillo  había  sido atrapado  por los escombros que habían   caído  del edificio.  Estaba llorando. Un nudo se apoderó   de su garganta e hizo un esfuerzo para ponerse de pie, dejando su mochila allí antes de correr hacia la muchacha, que intentaba zafarse inútilmente de esa ese peso.

- ¡No desesperes! Y-yo voy a intentar ayudarte...

Si es que eso era posible.

Lo que no sabía era que aún corrían peligro, pues ese bribón de apariencia  desagradable ya había  logrado su primer objetivo; el banco de esa calle había  sido saqueado. Sin embargo, no iba a quedarse aún  con los brazos cruzados; y lentamente, mientras dejaba atrás   el cuerpo ya inconsciente  del joven que había   capturado, se acercaba a la joven que activaba el Gravity Zero en las rocas.

El joven  héroe  saltaba  de edificio en edificio con su traje verde sin su máscara , en dirección hacia la criatura de  gelatina, Para  con la velocidad   que el joven héroe llevaba poder atravesar a dicha criatura, sacando de su interior  a, el joven que estaba atrapado para detenerse frente  de la joven chica atrapada en los escombros, este sonrió bajando lentamente al chico que había rescatado, gritarle  mientras este corría, - Llama a un oficial … uh… -  Este miro a la chica atrapada algo nervioso para sonreír, - ¿Dime estas herida?.-


El joven héroe suspiro un poco pesado,  para sentir algo de frió en su rostro y tocar su propia cara, notando el cómo no tenia su máscara puesta,  - No puede  ser,  siempre olvido colocar mi mascara,  así jamás me reconocerán como héroe, en fin por lo menos se que tu no me olvidaras mi querida bolsa de fango preferida .. Aun que no creí que fueras capas de liberarte de esa poke cosa en la que te capture, creo que no era buena idea encerrarte en un juguete para niños-


La sonrisa de el joven héroe  era enorme,  mientras sacaba su máscara de su bolsillo trasero de su pantalón,  mientras se la colocaba poco a poco, para mirar a  la joven chica de pelo castaño, que se encontraba atrás de él, mientras este se sonrojaba  algo nervioso, ya que este no estaba acostumbrado a hablar con las chicas para solo mirarla algo nerviosos.

Uraraka parpadeó un par de veces, confundida. ¿En qué momento había aparecido ese chico? Ni siquiera le había oído. Se había concentrado demasiado en hacer flotar las grandes y pesadas rocas de concreto, aunque inútilmente, pues él había sido más rápido para salvar a la chica.

La castaña, de pronto, fue sorprendida por las preguntas que ese desconocido de cabellos verdosos le había hecho, y sólo pudo reaccionar asintiendo a su pregunta, con cara anonadada. No estaba segura de si debía decir algo, así que, mientras apartaba la mirada, juntó las yemas de sus dedos y liberó los escombros, que cayeron pesadamente hacia el suelo, haciendo un fuerte ruido y levantando un poco de polvo.

— ¡Es Deku! —dijo la joven que habían liberado de los escombros, qué seguía arrodillada allí, pues no podía moverse correctamente por culpa de la herida en su pie.

« ¿Deku? ¿Quién es Deku? », se preguntó Uraraka para sus adentros.

Pero no era lo único que ella ignoraba. Detrás de sí, esa masa de fango verdosa se acercaba con sigilo. La única que lo advirtió había sido esa chica de secundaria que estaba herida. Y era demasiado tarde. Cuando quiso darse cuenta, se había apoderado del cuerpo de la castaña, y poco a poco Ochako sentía que la respiración le falla. Aunque se resistiera, moviéndose con frenesí, esa cosa era fuerte y no planeaba soltarla esta vez.

Con su voz retorcida el villano exclamó: —No intentes acercarte a mí, niño, ¡o si no te haré flotar con los poderes de esta chica! —Rió con demencia.

Uraraka estaba llorando. ¡No quería morir de esa forma tan horrible!

El joven peli verde sonrió, al escuchar que la chica lo había reconocido, al fin la promesa que había hecho, se cumplía, la gente comenzaba a reconocerlo, su opción de no entrar a la UA, había sido el camino correcto, pero al estar distraído, pensando en eso no pudo notar a la criatura, que tomo a la chica de cabello castaño, para levantar las manos retrocediendo un poco mientras miraba las manos de la chica y las piedras que había levantado, anterior mente.-Tranquilo, Tranquilo, no hagas otra tontería.-


El chico de traje verde, se puso en cuclillas, mientras estiraba un poco los brazos y las piernas, parecía que este tenia algo en mente, ya que poco a poco el joven héroe comenzaba a despedir de su cuerpo, ligeros rayos verdes, mientras sus ojos se tornaba mas y mas brillantes, con forme este murmuraba poco a poco, mirando a su alrededor, -One for all, 10%, 15%, 20%, 3o%-.


El chico desapareció de la vista, apareciendo por pocos segundo en los edificios que rodeaban a la criatura y a la chica, mientras una enorme corriente de aire comenzaba a formarse, levantando poco a poco los escombros, a la criatura y a la chica , formándose un tornado directamente sobre ellos, mientras se escuchaba la voz del chico de extraño traje verde gritar, - Prepárate.-


El joven héroe, usaba los propios escombros para impulsarse dentro del mismo tornado, ahora haciendo mas pequeño el mismo, y bajando de forma rápida de este ,para desde el propio centro tomar a la joven chica de pelo castaño, y abrazándola un poco para protegerla del suelo, ya que este con la velocidad que llevaba se le dificulto bajar la velocidad, este choco contra el piso dejando un cráter humeante , donde se encontraba el , y abrió poco a poco los brazos, para soltar a la chica sana y salva -¿Dime estas bien?-.


EL chico con su traje algo dañado, se puso de pie mirando como esta criatura, continuaba elevan doce por el tornado, este giro la miraba a la joven de pelo castaño que acababa de salvar, para sonreír algo nervioso,-No tendrás alguna botella o recipiente, donde pueda guardar a ese villano ¿o si ?-. este lo decía algo nervioso mientras rascaba un poco su cabeza.