La llegada de Saori al Castillo ( con Uraraka Ochako)

Era una hermosa mañana en el santuario de atena, todo estaba en calma y perfecta armonía, pues una vez mas la diosa atena, había salido victoriosa de otra guerra santa junto a sus caballeros, esa misma mañana recibió una especie de sobre, pues era una invitación para conocer un hermoso castillo . Ella decidió partir y dejar el santuario a cargo de sus fieles caballeros, los cuales protegerian en su ausencia.



Ella partió de Grecia hacia Japón, luego de unas horas de vuelo llego a su destino, llego a dicho castillo en un lujoso helicóptero. La verdad se sentía algo emocionada ante tal lugar, podía observar lo grande y majestuoso que se veia el lugar, era ers realmente sorprendete. Después de todo ella se mantenía en calma, ya que se encontraría con una persona en este lugar. Sin embargo pasaron unos minutos y notaba que no llegaba. Asi que decidido entrar al castillo por su cuenta.

Por dentro era algo increíble, había algunos cuadros en la pared, el piso de mosaico brillaba como l una hermosa joya valiosa. Sin mencionar que estaba iluminado por unas velas. No sentía temor alguno, al contrario noto el lugar muy agradable.

—Bien por donde debería empezar. Al aparecer la persona que me guiaria no pudo venir, no creo perderme en este lugar.

Mencionó la joven, mientras comenzaba a caminar por el pasillo principal. Miraba cada uno de los recuadros, algunos eran interesante y otros algo raros.

Hasta que llegó a uno el cual le llamo la atención, pues en el se le notaba una figura, algo que a ella se le hacía familiar.

Se quedó pensativa mirándolo por unos minutos, sin darse cuenta que recibiría el susto de alguien.

La castaña terminaba sus clases, habían sido semanas agotadoras, exámenes y tareas de a montones, afortunadamente, justo ese día todo aquello terminaba, pues ya había aprobado la mayoría de sus materias y avanzo con anterioridad todos sus trabajos. Antes de salir del salón escucho el rumor de que a Legacy se unía una diosa; La diosa Atenea.

Se quedó escuchando atenta, y corrió hasta el lugar donde se suponía aquella misteriosa chica estaría. Ochako era curiosa, siempre estaba chismeando para ver quien llegaba, ya que muchos de sus antiguos amigos se encontraban en Legacy y ella ni enterada, por eso tomó la decisión de estar siempre metida en el chisme.

Se quedo impactada ante semejante belleza, la piel blanca y fina, no tenía dudas era la más hermosa, digan de ser llamada Diosa. Inmóvil, así se encontraba, quería encontrar el momento para presentarse, después de esperar un rato y ver que nadie llegaba a hablarle decidió aproximarse.

Sigilosos fueron sus pasos, estaba nerviosa, ¿Cómo sería ser amiga de una Diosa?, tan solo pensar en eso la entusiasmaba, estando en Legacy encontró amistades muy variadas. Antes de decir palabra alguna se quedo espiándola a escasos metros de distancia, los cuadros le llamaban la atención, así que la castaña pensó en que podía impresionarla diciendo algún comentario sobre dichas pinturas.

━¡HEY HOLAAAA!. Son hermosas pinturas ¿no es así?.━ Mencionaba aproximándose, su intento por no asustarla había fallado, pues la chica dio un pequeño salto en cuanto escucho a Ochako hablar. Y es que la culpa fue de la castaña, pues no pensó en que decir, simplemente dijo lo que se le venia a la mente.

En su rostro se asomaba una sonrisa, pues si la primera impresión no fue buena daría lo mejor para darle una segunda buena impresión.━ Mi nombre es Uraraka Ochako.━ Mencionaba estirando su mano para saludar.