Vigilancia secreta.

Un patrullaje se le fue encargado, había hecho más de uno anteriormente, vaya que la había pasado mal en estos. Sin más, Tomo su equipo correspondiente que constaba de algunas banditas para rasguños o cortadas pequeñas y su ya conocido bastón. en cuanto a vestimentas para pasar desapercibida llevó algo casual con lo que fácilmente se podía hacer pasar por una civil común y corriente. Lo distinto a este patrullaje era que no iría acompañada de alguna otra chica como lo era la rubia Charlotte, más bien iría con un hombre del cuál desconocía gran parte de detalles físicos.

[♡] ───He-....Espero no tardar...quiero dormir un rato más tarde.───

bostezo antes de salir. Para ese punto ya estaba algo emocionada por llevar acabo la tarea que se le encargó, vigilar a miembros de legacy, algo sencillo sin dejar de ser algo entretenido que tenían que esconderse o ser demasiado sigilosos para que no los atraparán en el acto. Cuando estuvo presente con dicho acompañante, solo le observo de reojo para que no la considerará indiscreta o demasiado Chismosa. Si algo se destacaba de la pelirrosada, era su amabilidad, incluso siendo de Ossor por lo que sin esperar mucho, saludo a el hombre.

[♡]───Es un placer. Puedes llamarme freia. Vamos, tenemos trabajo que hacer.───

Diría la joven, tomando su rumbo ya fijo, caminando de manera algo rápida pero siendo demasiado discreta y disimulando para que nadie sospechara las intenciones que llevaban. Giro su cabeza solo en dos ocasiones, tal y como lo supuso, aquel iba siguendole el paso sin problema. cuando estuvieron cerca de los terrenos de legacy, paro en seco para asegurarse que nadie los hubiese visto ni seguido. Inclinándose ligeramente colocó la diestra sobre el pavimento, por suerte no sintió una tercera energía aparte de la de ellos. Ser hechicera y las variantes de la misma le daba ciertas ventajas en las misiones secretas.

[♡]───Uh, Está bien, podemos seguir...¡Escondamonos ahí!───

En el perímetro habían distintos rincones para escabullirse, tenían los registros de zonas poco cuidadas en legacy y de las cuales se podía escapar con rapidez si los llegaban a ver. Entre las opciones estaba el jardín. Los árboles daban algo de apoyo para que sus siluetas no pudieran ser distinguidas. Al menos para ella no hubo problema en subir a uno. Se colgó fácilmente de una rama dándose impulso con las piernas pudo llegar a una parte alta. No apartó las hojas que la cubrían, si lo hacía su cabello podía delatar por el color tan claro y algo indiscreto.

[♡]───Ne, Ne- Vasilios....¿Puedes decirme lo que vez? Mi vista no es tan buena como la tuya.

le susurró a el mayor, solo empujó una que otra ramita con sus manos para siquiera poder observar con más facilidad. Si bien no podía saber que ocurría en la lejanía o que se aproximaba, mínimo estaría al pendiente de sonidos o energías que tratarán de acercarse a ellos.

En el sonámbulo camino de tierra se reflejaban los blancos rayos de la luz de luna; sonámbulo como un espejo con vista de águila en la oscura noche, sonámbulo por la placidez que deslumbra con su quieta reflexión, sonámbulo por su íntegra lisura que le dota de la blancura nocturna. Amargo ante el cuarto de tonelada y su impacto como pasos de mi caminar; perturbando su composición llenando de fango tal espejo lunar.

Parecía una gala, por dos finos trajes su cuerpo no ferroso era adornado. Fino por su elección, un abrigo de tela color café oscuro, una bufanda azul, unos pantalones negros, unas botas a juego, unos ojos verdes tan vivos como los alegres, una cabellera castaña frondosa, una tez caucásica con forma germana, toda la complexión humana como componente del aspecto que portaba. El báculo era la cereza del pastel de la mofa de hechicero encubierta en la academia Legacy.

    "RECIBIDO." Fue la respuesta escrita en el comunicador al informe de nueva misión recibido desde Ossor; un patrullaje disfrazado de un paseo rutinario para introducir a alguien a la posición infiltrada.

Fue el saludo reconfortante, respondí con alegría al sedoso cabello rosado y los bien parecidos ojos verdes que me lo dieron. Siempre era gustosa la compañía, y durante las misiones era, además, muy útil en los distintos propósitos en que se podría necesitar.

    –El placer es mío, Freia. Mi nombre es Vasilios. Parece que seremos compañeros en esta vigilancia.

El factor sorpresa era algo determinante, las sombras nocturnas son aquellas por que nadie se ve perseguido; era ideal mantener el sigilo durante el absoluto aún en plena investigación. La vegetación resultaba un gran escondite dada su enorme cantidad en los alrededores de la academia; de inmediato acudí al llamado de Freia a inmiscuirme de un salto hacia las ramas de la frondosa arboleda y apostarme a su lado.

    —No veo a nadie en el exterior, el jardín parece estar desierto. Dame un momento oara recopilar más información...

    ...

    —Mi visión térmica confirma a un puñado de personas en las salas tras la entrada ¿Intento piratear los dispositivos electrónicos en el interior?

La última operación, si bien era la más efectiva para obtener toda la información en tiempo real sobre Legacy, era riesgosa dado a que requería un arduo control para que no fuese detectada. Por esa razón quería considerar el juicio de Freia; la visión infrarroja, por otro lado, era imposible de detectar al tratarse de una simple recepción de ondas como la luz.