La ayuda de un nuevo compañero. [Todoroki]

En la noche del viernes, tras una desafortunada derrota cuerpo a cuerpo, la albina regreso a Legacy con varios golpes sobre la piel.
Su ropa estaba desgarrada y le faltaba el preciado parche que le cubría parte del rostro.

Inmediatamente trataron y curaron sus heridas, para luego dejarla descansar un poco.

El interior de Fremy se llenaba de decepción hacia ella misma...


-Lunes一7:40 a.m.

El día comenzaba con un espléndido sol, adornado por las nubes a su alrededor y el azul del cielo.
Todo marchaba bien, pero, con el pasar de las horas, el entorno no parecía ser el mismo.

Aquella hermosa mañana se apagaba poco a poco ante los ojos descubiertos de la jóven, al recordar lo sucedido en aquel anochecer.

Tomó entre sus manos una larga venda blanca que envolvió sobre su cabeza y cara para cubrirse el ojo derecho con apariencia de demonio y la cicatriz en su frente.

Ya que parecía estar mejor, salió a caminar por los jardines de la academia, acompañada de su rifle.

Entre vueltas y vueltas algo le llamó la atención... Parecía ser un chico sentado sobre el esponjoso césped.
Hacía mucho que no intercambiaba palabras con alguien...Ahora solo quería que la escucharan...

一No es lo mismo. No se cubre igual. No se ve igual y es incómodo ¿Sabes?一
Exclamó con aquel toque bajo y suave de su voz mientras se aproximaba hasta quedar parada frente al contrario.

一No me gusta éste vendaje. Quiero mi antiguo parche, pero, está perdido.一 Continuaba con las palabras. . .

一¿Cuál es tu nombre?一

-Desde la lejanía Shoto únicamente se sentaba a observar hacia el horizonte, no era como si le importara pasar largos períodos de tiempo en soledad; más bien lo hacían sentir tranquilo.
Desde siempre y a consecuencias del rudo trato de su padre este quedó con ese carácter por el cual tanto le cuesta socializar.
Se encontraba relajado en tal soledad, envuelto por el silencio interrumpido en breves periodos por el ruido de la brisa o simplemente por algún ave que cantaba cerca del lugar, el césped seguía húmedo pues apenas minutos atrás había sido regando pero tampoco le importaba ya que para él era muy cómodo.
Debido a tan profundo silencio pudo notar que alguien se acercaba a él, las pisadas sobre el terreno le avisaban, además de poder escuchar ligeros susurros más lo dejo pasar al momento pues simplemente creyó que pasarían de largo; cosa que evidentemente no fue así.

Los rayos de sol dejaron de impactar sobre él y ahora yacía una silueta pequeña y delgada que apenas y alcanzaba a tapar con su sombra al bicolor quien no pensaba ponerse de pie aún.-

— ¿Mi nombre? Soy Shoto Todoroki.
¿Estás perdida? No te ves tan bien.

-Y vaya que era así, para comenzar seguía con vendajes sobre ella, además de tener aún una mirada perdida, rasguños y ligeros moretones. Todo apuntaba a que la chica había recibido una verdadera paliza tiempo atrás y para nada estaba recuperada.
No era doctor, pero eran cosas fácil de deducir, aquel chico dio un par de palmadas sobre el césped abriendo cancha para la albina.-

— Siéntate, te ves muy mal.

Al escuchar el nombre de su contrario, lo repitió un par de veces más en su mente, asegurándose de recordarlo.

─ Ya veo, Todoroki ─ Comentó con calma.

«¿Cuánto hace que descansa aquí?, Se ve bastante tranquilo y relajado...»
Era lo que pensaba al verle. Para ser sincera, Fremy se sentía un poco incómoda por así decirlo, pero, la amabilidad del joven hacia que todo fuera mas sencillo, esto cambiaba un poco sus perspectivas.

─ No estoy perdida ni nada por el estilo, no te preocupes... ─
Dijo, reaccionando al poco tiempo a aquella señal de invitación para tomar asiento.
De verdad que era considerado.

Se acomodó de rodillas sobre el espacioso lugar de pasto, este estaba bastante fresco, lo que le hacía recordar aquel mismo sitio donde llegó a parar herida... Claramente no podía olvidarse de su objetivo; recuperar el parche negro. Pero su condición la detenía. Es por eso que debía de ir acompañada en su búsqueda.

«"No te ves bien"
...Supongo que tiene razón.»

Parecía estar exagerando demasiado. Primeramente debía asegurarse de contar con ayuda, podría ser la ayuda de este muchacho al que acababa de conocer.

─ Todoroki, ¿alguna vez has ayudado a alguien? ─
Preguntó directamente, mirando el suelo...
«No hay que perder tiempo.»

-La chica tenía un comportamiento extraño, se mostraba amable, formal pero también muy pensativa y hasta reservada. Independiente de todas la acciones hechas por ella el bicolor seguía tranquilo reposando sobre el suave césped, además pensó que al haberla invitado a tomar asiento pues de alguna forma eso haría que la peliblanca se sintiera al menos más cómoda; el clima era agradable pues el sol resplandecía con fuerza y la brisa refrescaba cada rincón del lugar.-

— ¿Qué si alguna vez he ayudado a alguien? Pues... soy un candidato a héroe, básicamente ese es mi trabajo.

-La pregunta había sido curiosa, podía concluir que aquella chica sabía nada o al menos muy poco sobre su persona, tampoco le molestaba pero era curioso.
Tras la pregunta la incertidumbre del bicolor se alzó y por ello mismo dirigió la mirada hacia ella cuestionando.-

— ¿Por qué lo preguntas? ¿Necesitas ayuda?

Mantuvo su mirada baja y apagada. El verde del césped se reflejaba con colores opacos sobre el brillo de su grande ojo azulado. Sí que estaba pensando, tal vez en muchas cosas a la vez.

─ "Héroe" ─

Dejaba pasar unos momentos de silencio antes de volver a alzar la voz para responder.
La charla avanzaba.

─ Qué interesante. Debes tener ciertas habilidades.Vaya humano...─
Cerró los ojos y dejó salir un largo suspiro.

«¿Qué clase de poder tendrá?, No puedo averiguarlo ahora... además no tengo energía para elaborar pólvora. Será en otra ocasión.»

Fremy estaba tardando en pedir un simple favor, aparte de que aún tenía cosas por decir.

«¿Cuándo fue la última vez que necesite de alguien?, No...no lo recuerdo.»

─ Supongo que las cosas cambian. No me gusta ser una carga para nadie, y creo que no querrías colaborar con alguien como yo...─
Hizo pausa a sus palabras repentinas para desenvolverse el vendaje que cubría su otro ojo. Ahora este estaba a la vista del bicolor.
─ Alguien como yo...un demonio. ─

Si bien lo que quería era no ocultar detalles simples sobre ella...

«Me cabe pensar que esto disminuye las probabilidades de que se ofrezca a acompañarme.»

─ Un hombre tiene que escoger, en esto reside su fuerza: en el poder de sus decisiones, Todoroki.─

-Había llegado a él de forma repentina, sabiendo su nombre. Además de actuar de manera muy extraña, para nada era algo que el bicolor consiguiera razonar, ¿acaso alguien la había enviado? Por si fuera poco su imagen era pésima, se veía cansada, vacía, lastimada. Como si hubiera sido rescatada de alguna catástrofe. Para nada inspiraba buena confianza pero tampoco quería ser descortés y preguntar directamente >¿Qué necesitaba?< El problema era que aún con todo eso, ella no mencionaba ni una sola palabra, pasaba demasiado tiempo en silencio y cuando rompía este era para comentar un par de palabras al azar y posiblemente fuera de contexto.
Con solo ver el sol podía deducir que la hora del almuerzo estaba por llegar, ese sería punto clave para al menos intentar romper tanto silencio y de paso tomar un poco de confianza entre ambos.-

— Estoy entendiendo poco, básicamente nada. Es confuso, ¿para ti no lo es?

-No estaban avanzando, por el contrario la platica se había enfrascado y puesto tensa.
Shoto tomó la idea de ponerse frente a ella, hincado para quedar a una altura similar y mirarla fijamente, aprovechando ahora que había quitado su vendaje, sus ojos estaban apagados, con nada de ánimos.
No sonrío por la simple razón de ser malo en ello, pero lo que sí hizo fue frotar la cabeza de la albina suavemente, solo buscando calmarla un poco pues era algo que había escuchado de Mineta como consejo.-

— Tu... ¿acaso necesitas algo de mi?
Anhelo ser un héroe, si necesitara algo yo puedo ofrecerme como ayuda.
Pero antes hay que comer, no te ves bien.
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