L-2 | La cena

“La cena para ser perfecta, debe ir acompañada, de una buena compañía o… ¿Compañías?”



La academia era un temple que da lugar a varios alumnos con ambiciones para ser mejores, para sobresalir y luchar por lo que se cree correcto, existía una lucha que parecía no dar fin, según la historia, recorría desde mucho antes de su nacimiento y la situación no parecía mejorar al paso del tiempo, pero un tema a tratar en otra ocasión. Negando a caer a la monotonía que los tenía la academia, intento realizar algo diferente a la guía de estudio.

Suele asistir a varias clases extracurriculares y ha conocido un par de señoritas bastante simpáticas, invitarlas a cenar en una pequeña reunión no estaría nada mal. Su primera invitación fue para Mitsuri, estaban en una clase teórica sobre defensa contra algunos seres mágicos, es una chica bastante agradable, desde las lejanías se notaba sus buenas vibras, para nada dudo en invitarla, solo menciono que irían dos personas más a la cena, con la idea que no se sienta intimidada por él, ser un chico se puede mal interpretar sus intenciones de convivir.

La siguiente clase era sobre las diferentes armas que existen y las diferencia entre ellas, ya que no podías penetrar la dura piel de un dragón, con una espada que se especializa para exorcizar maldiciones, ahí fue que encontró a Lyam parecía un poco distante, con el enfoque de anotar todo lo dicho en clase incluso parecía tener toques de timidez, llamo su atención, después que el profesor abandona el salón, se levantó de su silla para acercarse, charlo con toda naturalidad Y después le invito a la pequeña reunión que estaba haciendo, le dejo las coordenadas de dónde sería.

La última persona que invito la encontró en la cafetería, parecía que estaba tomando una importante decisión o estaba indecisa de que comería está vez, ya había tenido clases con ella anteriormente, la conocía un poco, se acercó para hablar un poco y culminó invitándola a la cena.

Estaba complacido, había logrado invitar a un par de personas a una pequeña reunión, dispuesto a qué las situación sea agradable para todos, apartó un pequeño lugar en algunos de los jardines de la academia, agradecido estaba que era un lugar muy grande, pidió pizza la cena, algunos refrescos y golosinas de acompañamiento, se tomó el atrevimiento de agregar una botella de vino y copas, dada la situación que alguien disfrute de ese tipo de bebidas, aún que a ¿Quién engaña? Lo hizo por qué quiere relajarse, incluso llevo una cajetilla de cigarrillos.

Aún que parezca un chico bastante extraño, por el simple echo de llevar sus ojos cubiertos con una venda negra, pero se siente cómodo ir a clases de esa manera, después de todo, nadie podría hacerle daño ni de broma; Pero en esta ocasión, opto por llevar un par de gafas oscuras y redondas, uno Jens flojos y un suéter oscuro de cuello. Cómodo sobre una silla, se encontraba esperando a sus invitados, se relajaba al tiempo que tenía una chupeta en la boca, pasaba el caramelo de un lado a otro, haciendo que una bola sobre salga de su mejilla cuando la reposaba en ese sitio.

El sitio era en uno de los jardines delanteros del castillo, justo debajo de un kiosco, los faroles daban una buena ilusión, sin contar las pequeñas lucecita que recorrían todo el techo, daba un ambiente tranquilo, hasta se puede decir romántico si el caso fuera una cita, pero es un pequeño convivio con algunos compañeros de clase.

Desde su ingreso a la academia había tratado de mejorar en todos los aspectos, se la pasaba entrenando y puliendo ciertas habilidades para superarse a si misma, en sus tiempos libres le encantaba conocer a más personas y hacer nuevas amistades.

En una de sus tantas clases pudo conocer a Gojo un joven cuyos ojos estaban cubiertos por un vendaje oscuro, desde que lo observo por primera vez le pareció alguien interesante quería conocerlo más, así que no desaprovecharia aquella invitación que le haría para ir a cenar, cuando se entero que no estarían solos se emociono más ya que tendría la oportunidad de convivir con otros estudiantes, aceptando la idea sin ningún problema

Se alistó unas horas antes de lo acordado para que así el tiempo le alcanzará para no llegar tarde, no sabía con exactitud cómo debería ir vestida para una convivencia entre compañeros así que decidió llevar una falda de tonalidad oscura junto a unas medias y una blusa, a su parecer era el atuendo perfecto para la ocasión.

Una vez que estuvo lista se dirigió al lugar acordado, no sabía si ya la estarían esperando todos allí, asi que apresuró el paso para llegar lo mas pronto posible, a unos cuantos metros pudo ver el lugar y notar que ya había alguien esperándola, se acerco tranquilamente con una sonrisa en su rostro disfrutando de la hermoso paisaje que estaban presenciando sus ojos, con ánimos caminaba terminando de acercarse

—¡Hola! Lamento la tardanza

Saludando amablemente la pelirosa se sentaría junto a Gojo, para después observar la variedad de golosinas que se encontraban sobre la mesa, pero debía esperar a que todos estuvieran reunidos para empezar a degustar de la comida y tener una charla entre compañeros

Desde su llegada a la Academia Legacy, aquel chico azabache no se le notaba muy interesado en hacer alguna amistad, a duras penas entablaba conversación con sus compañeros cuando se trataba de algún tema de las clases o trabajos en grupo. Su único amigo era su pequeño pez beta “Blue”, quien le había acompañado tanto en los buenos como malos momentos.

Sin embargo, aquel pensamiento de ser un lobo solitario comenzó a verse afectado al hacer contacto con uno de sus compañeros, un chico albino que, a su punto de vista, era algo extravagante; en un inicio trataba de evitar seguirle la conversación pero finalmente cedió a escucharlo y aceptó su solicitud de cenar algo.

Dejó a su pequeño amigo acuático con suficiente comida en caso de que llegara a demorar más de lo planeado y se dirigió al lugar del encuentro portando una playera blanca, camisa negra y pantalón del mismo color, su único accesorio era un collar que tenía una pequeña placa de metal.

Al llegar a la ubicación acordada para la reunión, notó a una de sus compañeras, una chica de cabello rosa con un ligero degradado a verde en las puntas, por lo que pensó que había tardado mucho.

— Mis disculpas si los hice esperar, no me fijé en la hora —

Decía llevando su mano derecha a su cabeza para rascarse ligeramente, tras soltar un suspiro se acercó hasta tomar asiento al lado de aquella chica.

Estaba por no aceptar la invitación de su compañero, desde que tiene acceso a los laboratorios de química y a un sin fin de venenos, no ha querido salir de ese lugar, solamente quiere seguir experimentando, pero era tan insistente y que terminó con aceptar, además que era capaz de ir el mismo por ella si no asiste,.

Salió de laboratorio cerrando bien la puerta, noto que era muy tarde, seguro todos comenzaron a comer sin ella y no dejarían más comida, así que antes que la mesa quedará vacía, comenzó a correr por los posillo hasta salir de la academia, odiaba los jardines tan grandes que tenía el castillo pero por fin logro ver el kiosco iluminado.


—¡No se terminen la comida!

Gritó desde la lejanía, mientras seguía corriendo, ni siquiera se había quitado el uniforme, una vez que llegó, apoyo sus manos en sus rodilla y comienza a jadear para recuperar el aliento, sin dudas necesita salir más de ese laboratorio, hacía mucho que no entrenaba su cuerpo, pero ahora solo quería comida.

—Yo.... Yo corri mucho ¿Tienen comida?

Decía con dificultad por la falta de aire, pero lo curioso es que pese a su cancancio mantenía una muy grande sonrisa, que podría tonarse un poco siniestra por las luces.

No tuvo que esperar más tiempo, la primera invitada llegó, rápidamente se levantó de su silla para saludarla y agradecer que haya asistido a su pequeña reunión.

—Que va, eres la primera en llegar.— Menciono dejando que se sienta para después el hacer lo mismo y antes que pudiera decir algo más, llegó su otro compañero.

—Lyam, en realidad llegan justo a tiempo.— Menciona el albino con una gran sonrisa, por un momento sentía que nadie vendria, pero al verlos se alegro bastante.

Levantó su cabeza un poco, estaba seguro que escucho una voz femenina a la lejanías, pero no logro entender lo que intentaba emitir, hasta que ve un pequeño bichito a lo lejos, corría como si el diablo se llevará su alma.

—¿Shinobu?— Se cuestiona ladeando la cabeza hasta que ve a la pequeña mujer llegar, parecía fatigada y cansada, no pudo evitar soltar una risa.

—Bueno, ya que llegamos todos, los presento... Ella es Mitsuri — Señalando con su mano a su compañera de cabellos rosados— Él es Lyam y la recién llegada es Shinobu y lamento decirte que no hay comida, llegaste tarde.— Soltó en broma mientras que la mesa estaba repleta de comida, tal parece que todos siempre llegan tarde en Legacy, incluso hasta su servidor.

Al cabo de unos minutos, los dos compañeros restantes por fin habían llegado, no conocía muy bien al azabache ya que solo lo reconoció por que anteriormente lo había visto en ciertas clases y por los pasillos de la academia, pero nunca tuvo la oportunidad de entablar una conversación con el y conocerlo más; mientras que con Shinobu se podría decir que sabía más sobre ella gracias a ciertas actividades que compartirán, pero aún así había cosas que aún no sabía de la misma.

Todos le parecían muy interesantes y el aura de ser un poco reservados era lo que más le atraía, haciendo comentarios positivos sobre ellos en su mente cómo solía hacer siempre que veía a alguien

Los saludo amablemente mientras era presentada por el albino, esta sería una gran oportunidad para que supiera aún más de ellos y quizá hacerse buenos amigos.

— Encantada de conocerlos. — Diría demostrando entusiasmo al poder tener una pequeña convivencia con sus compañeros.

Observandolos contenía la risa apretando sus labios evitando que saliera un sonido de ellos, le parecía gracioso el comentario de aquella chica. Si hubiera llegado unos minutos más tarde entonces no encontraría nada sobre la mesa gracias a la joven de cabellera rosa y su apetito voraz pero para su suerte aun no comenzaban a degustar de aquellos alimentos y sobre la mesa aún se mantenia la comida intacta.

Algo en sus adentros le decía que hubiera sido mejor idea para él el llevar a su mascota, desconocía qué tan bien podría llevarse con todos; sabía que seguramente terminaría observando cómo todos hablaban con naturalidad mientras él se mantenía al margen de todo.

Al notar la llegada de la última invitada, el azabache no podía evitar pensar en que su forma llegaba a ser algo tierna al igual que aquel comentario.

Sin embargo, debía mantener su característica faceta seria, por lo que procedió a ponerse de pie y mostrar una ligera reverencia llevando su mano a su pecho.

— Es un gusto conocerlas, señoritas —

Sabía que su manera de ser podía tomarse como que era demasiado formal pero, simplemente no podía no hacerlo, era algo parte de su naturaleza.

—¡¿Aaaaah?!

Da un chillido por qué en verdad cree que no había comida, a pesar que la mesa seguía repleta de toda ella, para después darse cuenta que si habia, solo entre cierra su mirada para ver al albino, como si lo amenazara para después cambiar todo su semblante a una sonrisa amistosa, se acercó a sus compañeros para estirar su mano.

—Mucho gusto Mitsuri...

Tomo su mano y la movió un poco, después se acercó al chico e hizo la misma acción.

—Mucho gusto Lyam...

Luego se acercó a Gojo y le da un leve golpe en su hombro por su broma, para después pasar de largo y comenzar a tomar algunos bocados de la mesa.

—Tomare un par de cositas antes que se lo terminen de verdad.

Ríe mientras tomaba entre sus manos un plato y utensilios.

Esta feliz al ver a sus compañeros llevarse bien. Soltó unas risas cuando si última compañera en llegar fue directo al área de comida, hace un movimiento de cabeza indicando que estaba bien que comieran, después de todo de eso se trataba esta cena.

—Vamos, no sean tímidos — Menciona para caminar hacia la mesa.— Que si no toman su plato, shinobu acabara con toda la comida.— Termino por agregar, para molestar un poco a su pequeña amiga.

Al igual que ella, sirve variedad de comida, aún que se enfoco más en carnes y pastas, luego fue hacia la mesa para esperar a todos y comer todos juntos, los refrescos y vinos estaban en el centro de la mesa, solo se necesitaba tomar lo que quisieran beber y el opto por un vino tinto, lo sirve en una copa y sirve otros más dado caso que quisieran beberlo.