Los libros del misterio (Logan)

Luego de una tarde algo ocupada el día anterior y una noche desvelada como las anteriores, el chico se dirigía algo distraído hacia la biblioteca pues le interesaban los estudios y libros de viejas leyendas y necesitaba saber la información de un ser ancestral bastante poderoso del que se dice solo es una leyenda. A pesar de estar constantemente con sueño y despreocupado si se preocupaba de su presentación personal, sin duda odiaba el desorden. Cuando finalmente llego a la biblioteca cerró los ojos un momento y dio un leve suspiro un segundo antes de sentir como alguien chocaba contra su pecho, al instante abrió los ojos y notó el desastre que había provocado su descuido, una chica bastante guapa se encontraba en el suelo recogiendo algunos libros, rápidamente recogió los que algunos de ellos para poder devolvérselos a la chica en el momento en que se levantase mientras se disculpaba algo exaltado.

Oh cielos...juro que lo siento, yo debería disculparme, estaba algo distraído señorita

Un chico de cabello color ceniza sostenía un par de libros que había recogido luego del pequeño accidente que había tenido con aquella muchacha que no había visto nunca anteriormente, se le veía bastante caballeroso a pesar del extraño color de sus ojos, luego de esto extendió su mano amablemente en pos de ayudar a la dama a levantarse.


Le pido muchas disculpas en serio permitame ayudarle, espero poder compensar mi falta de atención, mi nombre es Logan siento importunarla.

Su mano seguía extendida esperando a que la chica la tomara y esperaba no generar problemas y menos con una dama, sinceramente se encontraba algo nervioso pues no se perdonaría a si mismo si la dama no le perdonara a el, era muy preocupado de la opinión de las chicas debido a su puesto como demonio pero sin duda en este caso no buscaba corromper si no que se sentía realmente apenado por aquella situación. Estaba sumamente distraído por que al igual que en toda la semana sus horas de sueño habían sido muy pocas y sus sentidos no estaban del todo en alto. Se sentía responsable de lo sucedido y esperaba poder compensarle como correspondiera

La chica aceptó mi ayuda para levantarse y luego darme las gracias, sin duda su presencia se me hacía bastante agradable en muchos sentidos, luego de levantarse me quedé en silencio un rato viendo como esta actuaba frente a la situación haciendo el momento algo divertido debido a su notorio nerviosismo luego de esto en un suceso que no acababa de comprender del todo cayó yogur sobre mis zapatos lo que en general no provocó más allá de una leve risa por el accidente. Ella a diferencia se notaba bastante avergonzada y me dio un pañuelo para limpiar mis zapatos.

Oh....Señorita no se preocupe, fue solo un accidente, no es bueno que ensucie el pañuelo de una Dama como usted en mis zapatos...creo que traigo una servilleta en algún lugar.

Cordialmente y con una sonrisa bastante amplia y alegre devolví el pañuelo y procedí a buscar la servilleta que me habían dado en el desayuno en los bolsillos de mi chaqueta y pantalón para luego limpiar finalmente mis zapatos, mientras lo hacía escucho la dulce voz de la chica hablar sobre un enfrentamiento con alguien de Merak lo que levantó mi interés aun más. Tiré la servilleta a un basurero cercano y finalmente oí su nombre. Charlotte, definitivamente un nombre muy elegante y vino acompañado de una invitación a beber café, lo que me impresionó gratamente y en definitiva lo aceptaría.

Charlotte, que bello nombre, el gusto es mío y aceptaré su invitación con mucho gusto también. Merak sin duda se ha vuelto un problema pero ya llegué y estoy dispuesto a detenerlos....se que tengo un aspecto físico bastante estándar pero se sorprendería con lo que puedo hacer.

Reí un poco algo confiado de mi fuerza a pesar de saber que desde el lado de ellos tenían fuertes exponentes también. Escuché una segunda pregunta: ''cuanto tiempo lleva acá'' sin duda era algo difícil de contestar pues en realidad en el mundo llevaba demasiado pero en aquella academia no llevaba más de un mes.

Llevo aproximadamente 1 mes compartiendo lugar con todos aquí y con usted también claro a pesar de habernos conocido hoy sin duda debimos haber pasado por el mismo pasillo más de alguna vez...oh y señorita Charlotte le pido por favor que no se deje guiar por mi rostro despistado y cansado ni mi cabello desordenado, soy un hombre de estudio y últimamente me he quedado hasta tarde leyendo textos muy antiguos en busca de una información importante de una investigación que estoy haciendo...

Me perdí un poco en mis palabras mientras avanzábamos hacia la cafetería, a paso calmado, la presencia de la chica que me generaba calma y bajé un poco las revoluciones a las que solía correr comúnmente mi pensar, finalmente llegamos luego de seguir las direcciones de una señalética en donde caballerosamente abrí la puerta invitando a Charlotte a pasar y dirigirnos a una mesa.

¿De que le gustaría hablar señorita Charlotte?, considereme un libro abierto para usted.

Finalmente nos habíamos ubicado ya en los asientos de aquella cafetería que inundaba un delicioso aroma cuando oyó la pregunta de la muchacha con la que se encontraba. Luego de pensarlo un rato se cruzó de brazos y mirándola a los ojos de manera bastante amable respondió a su pregunta.

No me atrevería a decidir entre literatura o historia, ambas son clases que entregan información demasiado valiosa e importante, creo que se les toma bastante poco peso con respecto al que realmente necesitan y la verdad, me sorprende mucho que usted sea una droide, si no me equivoco sería usted la primera en su clase a la cual dirijo mis palabras, de verdad es un gusto, en mi caso, no se asuste porfavor, soy un demonio

Terminó su frase cuando finalmente se acercó el mayordomo a lo que mi compañera pidió un té con leche y galletitas de coco, por mi parte solicité un café bastante cargado y ojalá de tamaño grande pues no había dormido correctamente, el mayordomo finalmente se retiró para ir a buscar la orden solicitada mientras veía como se ponía más a gusto, quizás eran solo ilusiones de mi parte pero veía a la chica bastante interesada en saber de mi, lo que me preocupo de algún modo, quizás se tratase de algún espía de Merak pero no tenia pruebas en lo absoluto.

Luego de un rato el mayordomo finalmente presentó el pedido poniéndolo sobre la mesa cuando oí la segunda pregunta de parte de ella, nuevamente me quedé pensandolo un rato pero esta vez con más facilidad ya que era algo más simple de responder y tratar.

La verdad solo conozco a algunas personas por encima... no tengo ningún conocido en profundidad o alguien que pueda llamar amigo para serle sincero

Revolvía mi café luego de haberle puesto unas cucharadas de azúcar cuando la escuché hablar de Merak, de un sujeto que lanzaba humo al parecer, pero más le impresionó el hecho de la invitación, si se le puede llamar así, de parte de ella para ir a atacarle.

Ciertamente señorita no se si lo más correcto sea que yo ataque a estas alturas, tengo poder,
si pero está sellado y necesito de mi espada para recuperarlo y por ahora no puedo ir por mi espada si me entiende claro, lo idóneo a mi parecer es simplemente obtener información, no nos conviene llegar y atacar, hay que saber contra que nos enfrentamos.... tengo entendido de que existe alguien que tiene la capacidad de prevenir los ataques de su enemigo con su ojos.... hay una chica que puede clonarse a voluntad y ahora esta persona de la que usted me habla... creo que deberíamos prepararnos, cuente conmigo pero un ataque sería algo muy apresurado

Terminé mi pequeño discurso bebiendo un poco de café cerrando mis ojos al sentir el calor descender por mi garganta para luego devolver la taza a la mesa y mirar a la chica a los ojos esperando oír su respuesta.

Luego de aquel golpe al suelo de ella por algún motivo lo tomó como si fuese una competencia por lo cual luego de ella dio una leve sonrisa para levantar su pie de la misma manera dejando caer el taco del mismo al piso, en ese momento se sintió un pequeño temblor en aquel lugar provocando que todos se levantaran de sus asientos creyendo que era un ataque, el candelabro se soltó un poco del techo y las murallas se trizaron un poco junto con el piso en el lugar en el que había dejado caer su pie. Luego de esto se levantó y en voz alta dijo:

—Lo siento señores y señoritas, tuve un tropiezo

Juntó sus manos y luego de unas palabras en voz baja una energía roja emanó de su cuerpo recorriendo todo el lugar reparando todos los daños dejando el lugar como nuevo para sentarse nuevamente y mirar a su acompañante.

Me inscribí en este lugar como Domador, y puedo hacerlo, invocar bestias del tamaño que quiera pero no es mi principal característica como podrá notar, por favor no se equivoque debido a mi fachada de caballero y gusto por la lectura, en lo que a guerra, fortaleza y estrategia se refiere no me quedo atrás pues ya he estado presente en muchas años atrás...
Soy bastante brusco si se necesita así que no tome un libro por su portada como dirían muchos.
Me sorprende su fortaleza señorita y sus ganas de combatir, la verdad no tenía muchas ganas de hacerlo pero gracias a usted he recibido un nuevo aire y tengo ganas de luchar...

Tomaba la taza de café sosteniéndola en su mano para luego reventarla dentro de la misma haciéndola partículas más pequeñas que el polvo.

Cuente conmigo.

Dijo para que luego la misma energía roja recorriera la taza devolviéndola a su estado anterior y apoyándola cuidadosamente sobre la mesa

Al ver sus movimientos simplemente quedé sorprendido, era cierto que por primera vez interactuaba con un droide y me gustaba la idea a decir verdad, al ver sus movimientos y más que por competir si no por adquirir conocimiento llegué a la conclusión de que le pediría un duelo para comprender su poder y sus limites ademas de como un ser robotico podría enfrentarse a un ser mágico.

Señorita, su poder me tiene fascinado y me gustaría pedirle de manera cordial y amistosa un combate, de 3 rounds, el primero que caiga al suelo sería el perdedor. Es más que nada para conocer las fuerzas del otro, Que dice?

Metía las manos en mis bolsillos mientras le miraba de manera seria pero sin dejar la sonrisa de mi rostro, no era su obligación aceptar y podía mostrarme su poder sin una pelea pero prefería sentirlo en carne propia aunque dudaba si en realidad me mostraría todo su poder pues desde que se supo que habían infiltrados de Merak ya nadie quería hacer muestras de sus capacidades por miedo a que los del otro bando supieran. En mi caso me daba igual pues sabía que aunque vieran mi poder no sabrían de que manera lo ocuparía lo que era una desventaja para ellos.

ISi no quiere aceptar está bien, aunque me hace algo de ilusión probar sus capacidades al máximo...si le interesa que el resto no la vea, puedo llevarnos otro plano dimensional...

Dio un leve bostezo cubriéndose la boca debido al sueño que tenía por no haber dormido anteriormente, vio como la chica se preparaba y apuntaba un láser a su pecho que el supuso era para apuntar quizás algún arma o hacer seguimiento de su movimiento.
Cerró los ojos dando un largo suspiro de calma cambiando su postura a una más recta y erguida, sus ojos se abrieron de golpe y el rojo de los mismos se veía más brillante y profundo como si ardieran con fuerza. Comenzó a caminar de manera calmada y en linea recta manteniendo silencio a la vez que se acercaba a ella poco a poco mientras sus puños se iban cerrando lentamente.

—Las damas primero, estoy esperando que usted empiece esta batalla.

Aun faltaban algunos metros para estar cerca de ella por lo que se detuvo en seco y abrió los brazos hacia los lados en señal de querer recibir un ataque, antes incluso de atacar el quería probar un poco del poder de ella, no estaba para nada confiado y sabía que podía salir muy dañado, por lo mismo estaba preparado para esquivar aquello que sintiera fuera demasiado incluso para el.
Volvió a cerrar los ojos sin bajar los brazos, esperaba quizás un tiro, un misil o un puñetazo, cualquiera estaría bien para el, solo quería conocer el verdadero poder de su contrincante.

Detección del movimiento del adversario, leve ardor en el pecho, era el láser?.
El viento parecía detenerse frente a ambos participantes de la pelea en aquel momento. Ignoró totalmente el ardor del láser fijándose total y precisamente en los movimientos de la contraria. Una esfera rosa apareció sobre ella. Que oculta eso? debo preocuparme de aquello?.
Se acerca a mi. Respiración calmada. Ojos carmesí ardiendo con fuerza cuando un soplido de viento resuena. Ya no estoy frente a ella. Viento se detiene de nuevo.
Da una patada al suelo que hace crujir la tierra levantándola en el otro extremo, desestabiliza el terreno para lograr un movimientos más complicado. No se quedará ahí. Segunda patada al suelo, grietas se expanden por el mismo y se siente un temblar fuerte en la tierra a su alrededor que mese los edificios adyacentes. Un Aura oscura recubre la espalda del peliblanco, una aura que es imposible de ver pero hasta un Robot podría sentirla.
Apertura de chaqueta. Manos en los bolsillos, mirada fija en la oponente. Su propia respiración no se oye, es como si no existiera en ese lugar.

—Elwind.

Susurro leve saliendo de sus labios. Viento poderoso recorre el lugar, viento que corta. Terreno desestabilizado y área cubierta de viento cortante. Si ella llegara a moverse muy rápido solo le hacía un favor a aquel ataque mágico.

Mente en blanco, vista fija en el objetivo, manos en los bolsillos, ojos carmesí ardiendo, repite el plan en su cabeza.
''Terreno desestabilizado, quitándole movimiento terrestre, área de combate asediada por hechizo, debilita su movimiento, si se mueve muy rápido posible decapitación'' Fin de su movimiento.