Enemigo mío. Perdidos en otro mundo. [Berserker]

por **Charlotte Dunois** Jue Sep 21, 2017 9:39 pm

Por aquí, hace un par de meses, un alumno de Merak eligió este lugar para guardar su tesoro. Era una caverna muy extraña, muy oscura, excepto por esas "venas" o lo que parecían raíces o grietas que envolvían las paredes y el suelo, las cuales brillaban de un color celeste bastante luminoso. No se escuchaba nada, ni siquiera habían criaturas acá, ni murciélagos. ¿Será por los altos niveles de magia que por aquí fluían?

Encendió su linterna y vio que un largo pasillo se extendía a lo que parecía ser una sala principal de ceremonias. Lentamente, se empezó a acercar y vio una especie de altar con una piedra muy brillante de lo que parecía ser una estatuilla con seis brazos que refulgía de ese mismo color celeste. No entendía muy bien qué es lo que hacía esta cosa, pero éste era al parecer ese tesoro mágico de increíble poder.

Se acercó a la estatuilla y un rayo le llegó en su mano. - ¡Ah! - exclamó de dolor la rubia y cayó hacia atrás. Esta especie de reliquia tenía una especie de hechizo protector, y no podía tomarlo con las manos desnudas. - ¿Cómo tomaré esta cosa? - se preguntó. Sin embargo, algo escuchó unas pisadas, y una especie de humo. Su corazón comenzó a palpitarle fuerte. ¿Será el de los trenes? Maldición, y no podía usar su traje mecha o podrían quebrar el tesoro. Cerró sus ojos y se colocó al lado de la abertura principal, esperando a que llegara el corrupto guerrero.

por **Arael Kusanagi** Sáb Sep 30, 2017 1:57 pm

-Oscuridad, frio y soledad, un paraje algo familiar era lo que se presentaba para el pelinergo en aquella caverna, la humedad en cierta forma era placentera para el, el frio era algo que no le daba problemas y la oscuridad le permitia moverse con libertad y gracia dentro de aquel lugar sin experimentar problema alguno. Parecia una criatura de la noche que se movia para buscar su presa en aquella cueva pero.. cual era exactamente su objetivo? bien no era de extranarse que el hubiese escuchado la historia de aquel tesoro guardado en ese lugar mas aun siendo el poseedor de este un alumno de Merak lo cual hacia que se interesase mas en el tesoro, su objetivo era claro, debia recuperarlo-

-Por el gran pasillo solo se podian observar dos orbes de color rojizo encendido los cuales se paseaban con suma rapidez , esto se debia a que su ser podia esconderse facilmente en medio de las sombras por lo cual no tendria ningun problema, lo unico era esa aura corrupta que emanaba de su cuerpo la cual le seguia como humo. Sus pasos aumentaban en velocidad hasta que por fin dio con la sala donde se encontraba aquel tesoro. Le sorprendio un poco que pareciese una suerte de altar ceremonial , y mas aun la estatua que sostenia la joya la cual parecia de una especie de deidad-

Bien... parece que no hay trampas ni nada mas

-Musito mientras poco a poco entraba a la habitacion -

No hay guardianes, no hay trampas.... solo una mocosa

-De sorpresa tomo el mango de una de sus dos espadas, siendo esta una de acero normal. Casi en un parpadeo la espada fue lanzada por el hacia la chica, no buscaria darle pero si rosaria un poco el rostro de ella si no se quitaba, quedandose esta clavada en la pared. Para el fue muy facil sentirla pues gracias a su misma capacidad como servant pudo sentir la energia de la chica en ese mismo lugar pero al inicio ignoraba esto hara llegar a la sala-

Entonces... me diras que haces aqui? o debo sacarte la verdad?

-Dijo sin voltear a verla-

por **Charlotte Dunois** Mar Oct 03, 2017 8:30 pm

La espada que le había arrojado casi le había llegado en el rostro, - Escudos activados - ahora ya tenía cierta protección contra los proyectiles. Allí estaba ese oscuro sujeto de la otra vez, el que se había transformado en un objeto aéreo. ¿Será una especie de robot mágico? Eso había pensado la rubia. Quitó la espada de la pared de la caverna, y la empuñó con ambas manos - No te lo diré nunca, primero moriré - así con la espada va girándola como si fueran las aspas de un molino con el propósito de protegerla de cualquier objeto contundente que le arrojase.

De pronto, le da una patada en el pecho al de la oscura armadura, y lo envía a esa estatuilla de seis brazos, la cual le tiró un rayo a ambos. Charlotte cayó de rodillas. Sintió que ese rayo al fulminarla le había cansado demasiado, su cuerpo estaba pesado, pero el espíritu invencible de la francesa resurgía- No me rendiré ante el mal. Jamás - se levanta, se limpia la ropa de la suciedad, extiende sus brazos, y de allí un traje mecánico abraza su cuerpo.

Este era el traje de batalla de Dunois. Un monstruo de tres metros con un arsenal bastante grande. Misiles, espadas, láseres y rifles. - Puedo ver que eres un luchador. Déjame decirte que soy clase tanque- alza ambas manos frente a él, y sonríe. La rubia era capaz de ser sometida a una gran cantidad de golpes. Ahora vendría la pelea de verdad, pero solo esperaba a no destruir esa estatuilla.

por **Arael Kusanagi** Miér Oct 11, 2017 12:08 pm

-La patada certeramente habia dado en su pecho , empujandolo hacia la estatua que no tardo mucho en lanzar un rayo que habia impactado en su contra, el cayo de rodillas un momento, pero logro recuperarse rapidamente gracias a su condicion de espiritu y mas aun , su habilidad de "Infinite arms" el cual le da una resistencia mounstruosa. Sin mas Lancelot se puso en frente de la femina, quien habia al parecer activado una suerte de armadura cibernetica que recubrio el cuerpo ajeno-

Valla, al parecer usaras la misma de la vez anterior

-Musito con calma y confianza pues el caballero negro no se habia visto intimidado por la maquina que protegia a la chica y mucho menos pues ella habia cometido un error cuando tomo la espada de el, pero eso era algo que probablemente la rubia desconoceria por ahora-

Bien, veamos si sabes luchar , aunque dependas de esa maquina para protegerte

-Su intension era la de provocar a la chica mientras el se mantenia con calma posicionandose en forma defensiva para analisar a su contraria mientras mantenia cuidado de sus posibles movimientos-

por **Charlotte Dunois** Lun Oct 16, 2017 9:19 pm

Se acercó a él lo suficiente para agarrarlo de las piernas y lanzarlo contra la pared. Charlotte estaba furibunda, y de sus ojos caían lágrimas de impotencia y rabia. No entendía por qué las cosas tenían que ser así, por qué este soldado de armadura tenía que propagar oscuridad, pero tampoco es que pudiera culpar a esta persona de anidar maldad en su corazón. La joven Dunois sentía enojo porque la vida misma lleva a gente que quizá pudo ser buena a circunstancias realmente miserables.

De pronto, la estatuilla que estaba en el medio comienza a lanzar más y más rayos, una especie de chirrido monstruoso comienza a sonar alrededor de esa extraña y misteriosa figura. Un punto negro que se ensanchaba y se hacía más grande, y que tragaba todas las piedras. - Ese portal nos va a destruir - señaló- Nunca quise ser así. Yo... discúlpeme por lo que haré. - le toma de los hombros con fuerza, y una especie de metal líquido comienza a cubrir la negra armadura del contrario.

Ese vórtice echaba más y más rayos. Se suponía que cualquier cosa que fuera lanzada hacia allí iba a ser triturada hasta un punto minúsculo, pero si era necesario sacrificarse para neutralizar a un enemigo tan audaz como éste, lo iba a hacer sin trepidar siquiera dos veces.- ¡Gaaaaaaahhh! - exclamó y se arrojó hacia ese portal junto con él. Pudo sentir un gran peso en cada centímetro de su cuerpo y entonces, cayó inconsciente. Todo era negro.

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