El viento guía a la curiosidad (libre)

El día de hoy comenzó con buen clima, pues tras el amanecer todo estaba soleado y no se veía ninguna nube en el cielo. Aunque Eukene lo veía de otro modo, pues por este mismo motivo podía decirse que la luz cegaba levemente y la radiación ultravioleta proveniente del sol quemaba la piel un poco, pero igual, parte de un viaje eran ciertos climas "extremos" y algo molestos.

Todo lo anterior ya fue motivo de olvido para cuando el chico comenzó a adentrarse en el bosque siendo cubierto por la sombra de los arboles, convirtiendo esta parte de el  viaje en algo más tranquilo hasta que el bosque comenzó a llegar a su final, pero entonces fue cuando este chico a lo lejos divisó un castillo y se detuvo a contemplarlo un momento, pero no solo eso, sino que concordaba con la descripción que le habían dado acerca de la academia legacy antes de embarcarse en esta aventura.

-Bien, al parecer estoy en el lugar correcto, veamos de que se trata todo esto...Ojalá valga la pena el viaje

Tras decirse eso a sí mismo continuó caminando a la entrada de dicho lugar con un perfil aparentemente bajo, pero ocultar su energía era una técnica que aún no dominaba, y por lo tanto esta era algo fuerte.

El día ya había comenzado pero la pelirroja no se podía limitar a solo cuidar lo que era el interior la academia así que salió a los jardines delanteros, era mejor estar prevenida de cualquier cosa. Las manos de la chica, se deslizaron hasta los bolsillos de su falda, por un momento solo se quedo apreciando lo que eran los jardines, pues siempre era lo que daba la primera impresión a todos los nuevos alumnos hasta que observo a los lejos una leve silueta de un chico , así que solo la chica se concentro en lo que venía sacando una de las manos del bolsillo para llevarla hasta por encima de su frente para impedir que el sol le molestara al ver a lo lejos

— no me avisaron que habría un nuevo alumno, en estos momentos— la curiosa joven solo dio unos leves pasos hacia adelante aunque un poco dudosa a los tres pasos hacia al frente se volvió a detener — o será de Merak? bueno , como sea  si no me acerco no sabre quién es el joven — así con un tono más de seguridad la pelirroja volvió a meter sus manos en los bolsillos para poder caminar solo soltando un suave suspiro lo que importaba era dar una apariencia de seguridad en estos momentos  — Hola, buenas soy Rías Gremory — decía la chica al solo ya tener al castaño de frente

Sus ojos de color turquesa observaron con un leve asombro al chico pues no aparentaba ser malo, pero tampoco me tendría que dejar llevar por las apariencias— ¿cómo te llamas tú? — la chica extendió una de sus manos para poder saludar esta vez con más confianza al castaño. pero esta vez con una sonrisa más confiable en las rosadas comisuras de sus labios, para ponerse al lado de él con la mirada que tenía hasta el inmenso castillo, que era la academia — Wow que gran vista se tiene desde este lugar, es hermoso, no? —

El castillo le pareció asombroso, definitivamente excepcional ante lo visto en Europa y otras partes de Asia. Pero este no seria momento solo para sentarse a contemplar mirando y pensando en la nada, si había un lugar así era obvio que había algo más grande en el fondo, la misión auto asignada por el chico seria explorar la situación, e incorporarse si era posible, pues ya era bastante tiempo de estar laborando como mercenario.

Vaya que pasó poco tiempo de tranquilidad, pues el joven no tardó mucho en darse cuenta de una silueta que salia del castillo, al no estar dándole el sol directo a la cara fue capaz de distinguir a dicha persona, y en lo primero que se fijo fue en lo que en su mente describió como "Un bonito cabello, el". Este procedió a dar unos pasos en dicha dirección aunque lo hizo de una forma lenta y algo cuidadosa, que tal que se tratara de un lugar hostil.

-Hola, me llamo Eukene, un gusto.

Comentó el joven respondiendo a la mujer ahora frente a el su pregunta, sin embargo no se esforzaría en fingir una sonrisa, solo mostraría un leve gesto antes de que su expresión volviera a ser neutra mientras extendía su mano para sujetar la de Rías y estrecharla con cierta firmeza.

-Así es, es bastante bello, pero quiero saber mas sobre el, y sobre que está pasando.

Tras conseguir un nuevo rollo para seguir tomando fotografías, aquella pelirrosada salió del castillo para dirigirse a los hermosos jardines delanteros y disfrutar de la vista, el clima era agradable, el aroma de las flores y el cantar de las aves hacia el lugar idóneo para tomar el té.
Por fortuna, siempre llevaba consigo su termo de té de belladona.

Se dispuso a encontrar un lugar donde relajarse cuando a lo lejos logro visualizar a 2 personas hablando, una mujer pelirroja y a una persona de cabellos castaños.

─Esa es la maestra Rias,¿no?

Lanzo la pregunta al aire con la intención de que su familiar la escuchara.

─Parece que habla con un chico…¿o será una chica? No logro identificar…

Forzaba la vista con la intención de ver claramente a la persona desconocida, sin embargo, no logro mejoría, por lo que uso su cámara para lograr ver su rostro.

─¡oh! ¡Es un chico! Y parece un tanto…serio… igual que tú, Colt

Aquella pelirrosada soltó una leve risa para luego soltar un quejido.

─Auch… oye, eso dolió…

Hacia un puchero mientras frotaba su cabeza donde su familiar le había golpeado.

─Bueno… ¿Qué tal si nos acercamos a saludar?

“No creo que sea conveniente interrumpir, seguramente es un nuevo alumno y la profesora Rias le esté dando la bienvenida”

─Si es para darle la bienvenida, no hay problema.

Esta sonríe tiernamente mientras se acercaba hacia los individuos con la intención de ser amable y saludar.

─¡Buenos días, Rias! –dijo mientras se dirigía a la profesora, entonces su mirada se enfocó al castaño, ladeó su cabeza hacia la derecha y sonrió dulcemente- ¡Buenos días también para ti!

La ultima respuesta del chico me causo un poco de duda saber que de la nada hacía una aparición para solo pedir información de la gran academia, me causo una leve mala insinuación  en estos momentos no se debía fiar de cualquier persona, eso la profesora Rías lo tenía muy claro, pero solo por eso no tenía que dejar de lado su responsabilidad de dar lo mejor, ser muy respetuosa y amable sin importar lo que pudiera pasar. Un leve suspiro de despojo de los labios de la pelirroja para solo cruzar los brazos un poco por debajo del abdomen de si misma — oh, bueno pero, ¿cuál es la duda, o el interés que tiene acerca del castillo? — la joven solo observo a los marrones ojos del ajeno esperando su respuesta, aunque el rostro de él parecía demasiado serio para ser un joven, a decir verdad muy muy joven

— hum? — por un momentos esos ojos celestes de la chica, se desviaron del castaño al escuchar una femenina voz, que se acercaba hasta esta dirección así solo observe a Ayana, con una linda sonrisa como siempre la solía mostrar muy adorable así solo le respondía con la misma sonrisa de mi parte, haciéndome a un lado para que ella pudiera entrar en nuestro círculo de conversación —¿cómo estas Ayana? — decía viendola a los ojos , en este momento haría una presentación pero el chico no me había dicho su nombre en este momento así solo me quede junto  a la pequeña pelirosa — mira Ayana, él será un nuevo compañero, y quiere saber acerca de la Academia — decía extendiendo la mano a modo de mostrárselo

Solo espere a que ellos entablaran una conversación , mientras pensaba en darle un recorrido al castaño haber si podía tomar una confianza más con nosotras — ¿Qué te parece un recorrido ?, por los alrededores de la academia, Ayana puede acompañaros, ella parece mas de tu edad, así te sentiras más a gusto —

Pues creo que mi duda seria todo, solamente se que el lugar es una academia llamada Legacy, no sé nada más.

Comentó el chico mientras volteo un poco la mirada hacia el castillo nuevamente, aunque la regreso a donde estaba cuando notó que alguien mas se acercaba, una chica pelirrosa, al principio este le asignó unos 12 años basándose en su apariencia, pero no dio nada al respecto pues no la conocía. En cuanto lo saludo este solo respondió haciendo un gesto, como una especie de sonrisa a medias y movió su mano saludando.

-Hola...

"¿Compañero? ¿Nuevo?" fue el primer pensamiento que atravesó la mente del joven al escuchar las palabras de la señorita Gremory, pues recientemente había llegado y no sabía de que se trataba todo. Y ahora era recibido con o que el describía como "los brazos abiertos" sin duda algo inesperado.

-Pues supongo que no es mala idea lo del recorrido, me apunto

Encogió levemente los hombros pues resultaba ser para el un factor neutral el hecho de un recorrido, pero además comprobó que su estimación de la edad de aquella chica era incorrecta, tal vez dando algo más de confianza para el, aunque sea un poco.

─Oh, bueno, he estado bien, solo una leve alergia por el polen, pero estoy bien jeje

Tras decir aquellas palabras, una mariposa se había posado en su nariz, causando que esta estornudara tiernamente como si esta fuera un gatito.

─M-Mariposa… justo en la nariz, es usted muy traviesa.

Estiro la mano para que la mariposa se posara en su dedo, los ojos bicolores de la pelirrosada se posaba en el insecto, para luego soplar levemente haciendo que esta se fuera volando.
Parecía estar fuera de su mundo, como si no estuviera presente, aunque estuviera justamente en frente de aquellas personas.
Tras seguir con la mirada el vuelo de aquella mariposa, la voz de su profesora tras proponer un recorrido y la afirmación del castaño la hicieron volver en sí, bajó la mirada al suelo mientras musitaba algunas palabras.

─¿Puedo ir…?

Solo bastó unos segundos para que la chica sonriera alegremente y diera un salto de emoción.

─¡Vale! ¡No te preocupes!

Tras darse cuenta de que su actitud seria extraña para las personas a su alrededor se disculpó inclinándose levemente ante los presentes.

─Perdonen mi actitud, Gracias por tenerme en cuenta, Por cierto…. Mi nombre es Ayana Shade, es un gusto conocerte.

Ladeaba torpemente su cabeza mientras mostraba una dulce sonrisa.

— oh alergia ? ya fuiste a la enfermería? — decía un poco preocupada, pues siempre la pelirroja se solía preocupar por ellos, más por las personas un poco calladas pues raramente suelen confiar en alguien, y esperaba algún día lograr una confianza con Ayana, pues era una gran chica, de gran carisma — jajajajjajaj creo que eres dulce para las mariposas, por eso les atraes — solo ver esa reacción de la menor, pues de la nada esa pequeña mariposa se había posado por la delicada nariz de la pelirrosa. Mi mano saco uno de los pañuelos dentro de mi bolsillo del uniforme, que solo lo extendí hacia ella ofreciéndole amistosamente — ten , puedes estornudar aquí con gusto —

La palma de la chica se posó sobre los rosados cabellos de la chica como si fuera una niña pequeña. pero del mismo modo le dio palmadas al castaño de una forma poco maternal , para soltar un suspiro con suavidad, entre sus delicados labios rosados — no te disculpes Ayana, puedes emocionarte todo lo que quieras — la observó de reojo con una sonrisa en sus labios, al ya haberse presentado la chica, pero el joven aun seguía con esa rara aura de misterio, así solo pensé que era muy apartado para hacer nuevas amistades — bueno fue una linda presentación de parte de ambos, felicidades—

— mmm bueno no sé donde podemos empezar — decía viendo a la dirección del castillo pues sí comenzaba a decidir por mí, pues el castillo era muy grande, diversas habitaciones, gimnasios, así que la mejor idea era que él decidiera que quería hacer — mmm — los turquíes ojos de la pelirroja se posaron sobre la silueta del castaño — oye chico, decide dónde quieres ir, así te lo mostrare, los salones, jardines, gimnasios —

El chico se limitó bastante a permanecer al límite en la charla de ellas dos ya que no conocía a nadie prácticamente o al menos no muy bien, lo cual hacía hasta cierto punto difícil buscar la forma de decir algo, pero en fin, para el la escena se comenzaba a tornar levemente incomoda pero  dicha aura de tensión duró bastante poco y finalmente se disipó (al menos para el) cuando se percató de las leves palmadas, al menos pensaba que no lo consideraban una amenaza.

"¿Presentación? no creo que esta escena califique muy bien como una válida" pensó para poco después escuchar la pregunta de la pelirroja y dirigir la mirada hacia el castillo inspeccionándolo con cuidado, aunque viéndolo desde lejos era difícil tratar de adivinar donde se encontraba cada habitación, resultaba un poco confuso.

Es complicado escoger, creo que mejor me someteré a sus elecciones, puesto que no conozco en absoluto el lugar

Comentó este en un tono neutro mientras dirigía de nuevo su mirada a Rías para agregar una última pregunta que había dado algunas vueltas en la mente del chico.

Solo por curiosidad ¿Es usted profesora del lugar?

Antes había escuchado que se trataba de una academia, así que bueno, era hora de buscar respuestas a preguntas existenciales. El chico se sentía particularmente con suerte por alguna razón.

Esta niega con la cabeza ante la ofrenda del pañuelo.

─No es necesario, gracias, aunque las criaturas se apegan a mi debido a mi aroma.

Ríe levemente mientras saca su cámara fotográfica, apuntando su lente hacia el rostro del castaño y le toma una fotografía.

─Oh, qué buena toma. Puede que el primer momento es sorpresivo, pero al menos será algo que guardaras por siempre.

Da unos pasos atrás para luego girar sobre su talón para así estar al lado de la profesora.

─Señorita Rias, es…normal que él no sepa dónde ir, después de todo, esta es la primera visita. ¿Por qué no guiarlo primero por los jardines y lugares externos? Así ira conociendo los alrededores, después lo guiaremos en los salones del primer piso y así sucesivamente…

Intentaba tener la iniciativa para que el muchacho estuviera cómodo, solo esperaba que su propia actitud lo incomodara, aunque entendería que él se alejara de ella por esas mismas razones.

─Oh, por cierto… ¿Has comido algo, chico sin nombre? Un viaje tan largo cansa a cualquiera, tengo algunos pastelillos y té, por si quieres comer… p-pero si no te gusta lo dulce, hay platillos muy buenos en la cafetería.

Se mostraba un tanto torpe al intentar impresionar al castaño, solo quería hacerlo sentir bienvenido.
Entonces algo le llamo la atención, una extraña ave de plumaje azulado se posó en su cabeza, parecía estar cómodo en su cabello.

─Oh, genial… Hola amiguito ¿Estas cómodo?

Coloca la cámara frente a ella para así tomarse una “selfie” con el ave en la cabeza.

─¿Lo ve profesora? Es mi pan de cada día jeje hablando de pan…

Saca de su mochila un pedazo de pan para hacerlo trizas y colocarlo en una superficie plana para que el ave pueda comer.

─No es mucho… pero espero lo disfrutes…

Dijo susurrando para sí misma y el ave azulado baja de su cabeza para comer.

─ ¡muy bien! ¿en que estábamos?

Se reincorpora con la pareja, mostrando una leve sonrisa.

— mm sí, soy una profesora — decía con una simple respuesta , no sabía muy bien como interactuar con alguien como él  muy pocas palabras, más a ser poco expresivo  y con muchas preguntas solo me llenaba de dudas saber cual era el motivo que él tenía en este lugar — oh ? — sus pensamientos fueron interrumpidos por el comentario de ella, claro tenía razón. Él no tenía el conocimiento de todos los alrededores de la academia, aunque no que quería lograr en sí que él diera alguna idea por si la cafetería , las habitaciones, los gimnasios, o lugares simples, aunque solo afirme con un movimiento de mi cabeza, a la idea de la pequeña pelirrosa.

— esta bien, aunque por que no lo guías Ayana, jeje parece que tienes mas ideas para poder mostrarlo, así que vamos pequeña te seguiremos — decía moviendo un poco mi mano izquierda al momento que estaba hablando, aunque era muy tranquilo estar en momento así. Hasta que un pequeño canto de unas aves llamó mi atención  , pero al poco momento solo observe a la chica que alimentaba esas aves con uno de los panes que ella mantenía, solo me quedaba un poco sorprendida parecía ser que era un imán para los animales, los pocos momentos los pequeños animales se acercaron a ella con tanta facilidad, así solo volteaba a ver a otro lado después de ver ese lindo gesto.

— bueno entonces, sí él tiene hambre, ¿por qué no empezamos por ir a la cafetería? — decía con un simple comentario, aunque no sabía muy bien cuanto tiempo llevaba caminando , pero tampoco se notaba cansado del todo, su apariencia era más serena, sin una gota de sudor de su persona — entonces, ? dónde gustan comenzar? —

El joven percibía bien el aroma de la chica, no se sentía atraído por este en lo absoluto pero lo recordaría para identificarla. Aunque fue en ese momento cuando vio la lente de la cámara apuntarle y no supo si sonreír o posar, así que se quedo a medias.

-Ojalá las fotos fueran para siempre, tendría recuerdos más claros.

Este se cruzó de brazos y permaneció así mientras ellas hablaban hasta que tras un momento solamente respondió a la primera pregunta de la pelirrosa mostrándose levemente más abierto a entablar una conversación.

-Pues no, no he comido desde hace algunos días aunque mi viaje no fue tan largo, partí desde Tokio. Y por cierto...mi nombre es Eukene, en cuanto a comida prefiero la salada.

Finalmente escuchó las propuestas de aquellas dos mujeres en cuanto a que lugar debía visitar primero, estuvo de acuerdo en lo comentado por la profesora así que antes de hablar asintió levemente.

-Supongo que la cafetería esta bien, puede ser el lugar para comenzar.

La joven de cabellos rosados se mostraba preocupada ante el comentario de aquel extraño chico castaño, ¿realmente no había comido en días? Tan bien que se podía notar, ni siquiera mostraba un síntoma de fatiga o de desnutrición, pero al parecer las apariencias engañan.

Aquella chica se acercó al joven para posteriormente tocar su rostro, no decía una palabra, solo tocaba y miraba fijamente a los ojos de aquel chico.

─Bueno… si no has comido en días, no podrás comer mucho o te dará cólico. Así que tendrás que comer lentamente y en pequeñas cantidades.

Después de comentar, se aleja lentamente tomando distancia, dio un giro sobre su talón y camino unos cuantos pasos para luego dar media vuelta.

─está bien, los guiare, así que por favor, ¿podrían seguirme?

Sonríe levemente para luego seguir caminando hacia la entrada.

─La cafetería se encuentra en el primer piso, pasando por este pasillo, giras a la derecha y encontraras un letrero donde dice “cafetería”. Además, hay un cartelón donde indica la comida del día, también si hay rebajas en algunos alimentos.  También puedes pedir que cocinen algo en particular, solo que eso tiene cargo extra.

Continuaba caminando hasta llegar a la entrada de la cafetería, esperando que el castaño mirara el cartelón.

— Espera ! c-cómo que no has comido? — decía un tanto sorprendida e impactada, pues no podía creer que estuviera con una buena apariencia, no sabía el motivo de por qué no decidió comer, será por que en su recorrido no había restaurantes, o por que son de las personas que pueden comer en pocas cantidades y estarán bien por unas semanas extra, y sin problemas de desnutrición — es normal en ti no comer, o solo lo hiciste por el largo viaje que tuviste ? — decía la pelirroja con un tono de preocupación , no importaba sí era humano o alguna otra especie normalmente todos se alimentan de algo.

— aunque te guste la ensalada, he de sugerir que debes de comer por hoy algo mas variado en los alimentos, pues ahí recobrarás todas las energías que perdiste en ese viaje — solo observé como la pequeña se acercaba al castaño pues eso demostraba que también ella estaba preocupada, y asombrada por la normal apariencia que él tenía pues no se notaba que estuviera mal — bueno, entonces te seguimos Ayana — decía con una sonrisa, para caminar tras de ellos, por seguridad ya que después de todo ellos eran los alumnos para mí.

Mi mirada, solo se posaba por la espalda de ambos jóvenes, aunque solo iba distraída, mis manos solo se encogieron un poco para entrar por los bolsillos de mi falda, con rumbo a la entrada de la gran academia, pues estaba un poco solo pues en este momento algunos mantenían clases, y otros solo estudiaban , así solo recapacite en mis cinco sentidos al momento que habíamos llegado a la cafetería ese delicioso aroma, abarcaba todo el pasillo  completo , era sumamente atrayente, para solo soltar un delicado suspiro — que rápido llegamos aquí — decía con una sonrisa para adelantarse y abrirle las puertas a los chicos y que fueran los primeros en pasar.

Este de verdad no había comido casi nada en días, si bien no era normal (o al menos el no lo consideraba así) se volvió una actividad ocasional por distintas razones, aún así siempre es genial disfrutar una buena comida. El joven siguió la mano de la pelirrosa hasta que tocó su rostro y no espero mucho tiempo para aparta su mano con la de el, no acostumbraba a ser tocado a no ser que se tratara de un ataque.

-¿Cólico? nunca he tenido uno de esos por comer y lo de ahora se ha vuelto una actividad frecuente, prefiero comenzar con el plato fuerte. Pero en fin, te sigo

Acto seguido al comenzar a seguir a la pelirrosa, se volvió hacia la profesora de cabello rojo para dar la explicación de su ayuna, no veía de que servía la pregunta pero igual la respondió tranquilamente.

-Pues no, no he comido aunque no es porque no quiera, normalmente es por falta de tiempo como ahora por el viaje y también para ahorrar algo de dinero hasta llegar a mi destino.

Al oír las instrucciones de la pelirrosa este se puso a pensar y hacer cuentas en su mente, el problema no era costear una buena comida sino racionar los recursos por un largo rato pues aún no sabía cuanto tiempo pasaría ahí ni cuanto podría costearse en su estancia, sin duda una complicada estimación.

-La verdad no soy mucho de ensaladas, no las evito pero prefiero algo con más sabor y masa.

Este continuó caminando junto a ellas sin dejar de observar el lugar y recorrerlo con la mirada, hasta ciero punto le agradaba la apariencia y decoración, además de que no había visto o estado en un lugar así antes. Llegando al lugar que ambas señalaron como cafetería, el joven olfateó un poco esbozando por primera vez en todo el trayecto lo que parecía una leve sonrisa, aunque a medias.

-Huele bastante bien a decir verdad~.

Finalmente espero a que ambas se encaminaran a la entrada para así entrar después de ellas o a su lado, se negaría a entrar antes.