Día de casería (Kurumi- Himiko)

Era sábado por la noche, la hermosa gorgona caminaba tranquilamente por el bosque, en las afueras de el internado, siendo cautelosa de ni ser encontraba por nadie, de vez en cuando volteaba hacia atrás para reiterar que estaba sola.


- hum~ - Soltó un ligero suspiro, sin poder evitar pensar en aquel pequeño chico de cabellos negros, que había conocido en la playa. Al darse cuenta de sus pensamientos dio unas ligeras palmadas en su mejillas sonrojándose- Oh vamos vamos...

Siguió caminando, sin rumbo alguno, cerro los ojos agudizando sus sentidos escuchando que algo o alguien se encontraba cerca de ahí, aun lejos.
Aproximadamente unas 30 mts. Por lo cual no podía deducir quienes eran.
Decidió ignorar a aquellas personas, pensando en que todo estaría bien, sin sospechar nada siguió caminando. Hasta que algo atoro su pierna, quedando atrapada. Sintió como alguien sr acercaba por detrás aprisionandola aún mas.

¡H-hy- su grito no salio, rápidamente la amarraron con sus propias armas y la dejaron en el piso, así viendo a sus agresoras.

Mh~?!- Intentando safarse fruncio un poco el ceño- (¿Porque...soy mas lenta?)

Después de hacer varios intentos, logró zafarse así, atrapando a las dos chicas con sus cadenas

El tiempo era la medida favorita de Kurumi, era su don y maldición. Solía perder la noción del mismo, pero podía medirlo en  sus actividades, últimamente Legacy parecía ser un lugar demasiado aburrido. Por las noches salía en busca de algunas presas, asesinando a quién fuera el desafortunado que se encontraba con ella o ellas.

El cielo nocturno, servía como cómplice a los más descabellados actos de Kurumi, que actuaba sin piedad y sin mayor cautela. Sabía que su fuerza y dones, le protegían de cualquier criatura. No se limitaba a asesinar humanos, actos que carecían de un verdadero valor, se deleitaba en matar criaturas sobrenaturales, magos, brujas, demonios,ángeles.

Varios de sus clones circulaban en los alrededores de la ciudad de Yokohama.  Habían detectado la presencia de dos seres sobrenaturales, el clon principal, caminó hasta posicionarse cerca de la primera aparición. Había una mujer de cabellos violetas, que apareció ante sus asimétricos ojos. Por varios minutos la siguió, podría ser alguien interesante para jugar en esa helada noche.

Kurumi avanzó sin esconderse demasiado, después de todo no era la única y quería ver si su futura presa entraría en pánico cuando la tuviera cerca. De manera sorpresiva, una cadena la tomó sin darle tiempo a reaccionar, más no era suficiente razón para revelar su poderes. La joven había revelado una de sus cartas, pero la pelinegra no lo haría, al menos no hasta que fuera verdaderamente necesario.


Ara, Ara...¿Por qué tanta agresividad?

La noche sería acompañada por cierta rubia de aspecto rebelde daba paso entre el bosque siendo algo desconocido para Himiko; cosa de la cual no habría de mostrar o presentir temor. Sus pasos sigilosos le darían una ambientación más apaciguada. Un pensamiento le vino a la mente, claro todo haría entorno hacía aquél peliverde que llegó a ver por ahí; haciendo que una ligera sonrisa acompañada de un suave color carmesí se pusiera sobre sus mejillas.

Casi en el mismo instante, un crujido cerca de donde estaba. Tal que su sonrisa se transformó por una más extensa además de agudizar los ojos percatándose de la posible nueva victima y alguien más, ágil mente se acercó a ambas tomando el arma de una para lograr acorralar. Sin embargo, desconocía el uso y manejo del mismo, provocando una acción contraria para la cual estuvo inmóvil.

A pesar de encontrar se presa tal ocasión le fue una gracia.  Casi sin dar importancia.

La gorgona  levanto la tela que cubría sus ojos y miro a Himiko desconcertada para después ver a Kurumi.

- Es estúpido intertar atacar a alguien sin tener cautela, o tan siquiera un plan para hacerlo- Entre cerro un poco los ojos sin dejar que las cadenas se aflojaran, las soltaría hasta que estuviera  totalmente segura de que ellas no serían una amenaza.

- Y-yo no fui la agresiva desde un principio, por favor- Se puso nerviosa- y un juego podria ser..