Se bienvenid@ Invitado a ~ +ACADEMIA LEGACY+ Foro de rol literario ~. Fue creado el Jue Mar 13, 2014 4:55 pm, es decir que tenemos exactamente 3906 días de vida. Hasta ahora sus 160 usuarios han escrito 12128 temas en los 120 foros que existen. Tú, Invitado, haz escrito 0 posts desde que te registraste el Miér Dic 31, 1969.
El último de nuestros usuarios registrado fue Asuna Yuuki
El último de nuestros usuarios registrado fue Asuna Yuuki
Conectarse
Notificaciones
Online
¿Quién está en línea?
En total hay 350 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 350 Invitados Ninguno
El record de usuarios en línea fue de 426 durante el Sáb Nov 02, 2024 6:16 am
Últimos temas
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 2.0
Academia Seeds of Legacy por Beatrice y Gilgamesh se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Permisos que vayan más allá de lo cubierto por esta licencia pueden encontrarse en https://academialegacy.activoforo.com/.
El crédito por el diseño del foro se da a Jack, quien ha trabajado en la estructura visual de éste y en otros aspectos metafuncionales. Los planificadores de la trama del foro son los administradores Beatrice y Gilgamesh. El crédito por el sistema interno del foro se da a los miembros fundadores: Jannei MC.Clov., Jyu Viole Grace, Mavis Blanc y Suigintou, en conjunto con los otros administradores. Asimismo, a Darren Criss por el modelo de fichas, a las obras de varios autores -cuyo uso está exento de ánimos de lucro- y a los administradores que operan desde la página oficial de Facebook, la cual es propiedad del foro. Ante cualquier semejanza con el diseño y trama de este foro, los administradores llevarán a cabo el proceso pertinente estipulado por la normativa de Creative Commons para iniciar acciones relacionadas a propiedad intelectual.
Academia Seeds of Legacy. 2014-2021.
Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
5 participantes
Página 1 de 1.
Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Situado en el terreno del antiguo Castillo Edo, el Palacio Imperial de Tokio hoy en día funciona como residencia del Emperador de Japón y su familia. Cuando finalizó el shogunato en 1868, se decidió utilizar los muros y terrenos del antiguo castillo para construir allí el Palacio Imperial y fijar en Tokio la residencia del Emperador. Durante los 20 años que duró la construcción del Palacio, el Emperador Meiji vivió en el Castillo Edo hasta que el Palacio estuvo terminado y listo para habitarse. Aunque el Palacio fue destruido por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, se ha reconstruido en 1968 intentando seguir el estilo arquitectónico original.
El Palcio Imperial se encuentra ubicado dentro de un parque rodeado de paredes de piedras macizas, en el distrito de Chiyoda, uno de los 23 barrios especiales de Tokio. Frente al Palacio Imperial hay una gran plaza, la plaza Kokyo Gaien, desde la cual es posible observar los puentes Nijubashi, que son la entrada a los jardines. Solo los Jardines Orientales del Palacio Imperial o Kōkyo Higashi Gyoen pueden ser visitados libremente por cualquier turista.
El palacio y el resto de jardines que lo rodean no están abiertos al público, y sólo los días 2 de enero y 23 de diciembre, los visitantes pueden entrar al recinto y ver a los miembros de la Familia Imperial, quienes hacen apariciones públicas desde su balcón. El resto del año, solo se realizan visitas guiadas en japonés, con un folleto en ingles y audioguía, la cual requiere una cita con bastante anticipación. Sin embargo, nuestros personajes no tenían tiempo para una visita agendada.
De entre todos los sitios investigados, este sería posiblemente el de más difícil acceso. Desde que el primer ministro había sufrido una terrible muerte a sangre fría enfrente de la mismísima guardia real, cuyo asesina se presumía que era la esposa del propio ministro, el palacio estaba bajo máxima seguridad. No había una sola esquina sin guardias, y la mayor parte de las áreas habían sido limitadas únicamente al acceso de personal autorizado.
Así es, la situación no era sencilla. Investigar los secretos detrás de este crimen no iba a ser una tarea sencilla, o esto es lo que nuestros protagonistas habrían de creer. Pero sucedió que, al llegar al Palacio Imperial, encontraron a todos los guardias muertos. "¿Muertos, has dicho?" Así es. Todos y cada uno de los soldados habían sido congelados, aprisionados en una gruesa capa de hielo hasta la muerte. Se notaba en todas las "estatuas" el rostro de terror por intentar escapar de algo o de alguien, claramente sin éxito. Las luces del lugar estaban encendidas, y el sitio entero estaba bañado en nieve. ¿Descubrirán nuestros personajes la verdad que esconden estos extraños sucesos?
El Palcio Imperial se encuentra ubicado dentro de un parque rodeado de paredes de piedras macizas, en el distrito de Chiyoda, uno de los 23 barrios especiales de Tokio. Frente al Palacio Imperial hay una gran plaza, la plaza Kokyo Gaien, desde la cual es posible observar los puentes Nijubashi, que son la entrada a los jardines. Solo los Jardines Orientales del Palacio Imperial o Kōkyo Higashi Gyoen pueden ser visitados libremente por cualquier turista.
El palacio y el resto de jardines que lo rodean no están abiertos al público, y sólo los días 2 de enero y 23 de diciembre, los visitantes pueden entrar al recinto y ver a los miembros de la Familia Imperial, quienes hacen apariciones públicas desde su balcón. El resto del año, solo se realizan visitas guiadas en japonés, con un folleto en ingles y audioguía, la cual requiere una cita con bastante anticipación. Sin embargo, nuestros personajes no tenían tiempo para una visita agendada.
De entre todos los sitios investigados, este sería posiblemente el de más difícil acceso. Desde que el primer ministro había sufrido una terrible muerte a sangre fría enfrente de la mismísima guardia real, cuyo asesina se presumía que era la esposa del propio ministro, el palacio estaba bajo máxima seguridad. No había una sola esquina sin guardias, y la mayor parte de las áreas habían sido limitadas únicamente al acceso de personal autorizado.
Así es, la situación no era sencilla. Investigar los secretos detrás de este crimen no iba a ser una tarea sencilla, o esto es lo que nuestros protagonistas habrían de creer. Pero sucedió que, al llegar al Palacio Imperial, encontraron a todos los guardias muertos. "¿Muertos, has dicho?" Así es. Todos y cada uno de los soldados habían sido congelados, aprisionados en una gruesa capa de hielo hasta la muerte. Se notaba en todas las "estatuas" el rostro de terror por intentar escapar de algo o de alguien, claramente sin éxito. Las luces del lugar estaban encendidas, y el sitio entero estaba bañado en nieve. ¿Descubrirán nuestros personajes la verdad que esconden estos extraños sucesos?
Cuentacuentos
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Caminaba el Rey Demonio al frente de su grupo de investigación. Aquel se había ofrecido personalmente a aquella situación, pues se consideraba a sí mismo el más capacitado para reaccionar y proteger a su equipo en caso de que hubiera un ataque sorpresa. A su vez, su percepción mágica también le hacía la mejor opción para una misión de reconocimiento, por lo que no había dudas de quién era la mejor opción para aquella situación. Por supuesto, el limo no lo hacía solo por ayudar. Rimuru Tempest no es especialmente altruista. Decir que solo quiere lo mejor para la misión no era más que una tapadera de las verdaderas intenciones tras su comportamiento. Intenciones en lo absoluto dignas de alguien que se hacía llamar un demonio, y es que su principal objetivo era proteger a su compañera de escuela, Rin Tohsaka.
« ¿Un demonio preocupándose por alguien más? ¡Estúpido! ¡Absurdo! ¡Imposible! ¡Un monstruo no puede tener aprecio por una criatura insignificante! »
Estas palabras se repetía a si mismo el limo en su mente con tal de ignorar sus verdaderos sentimientos. No podía aceptar su amistad con aquella mujer. Era completamente ilógico que un Rey Demonio pudiera sentirse cómodo al lado de alguien más. Pero ahí estaba, odiándose a sí mismo por no ser capaz de ver a la humana como un peón más en su tablero y actuar con tanta irracionalidad como para exponerse a cualquier emboscada en pro de salvaguardar a quien consideraba si bien no débil, al menos mucho más frágil que él. Avanzaba con aparente calma y tranquilidad, fingiendo un rostro de completa despreocupación, pese a que su lenguaje corporal delataba a viva voz su cautela, como si estuviera esperando que algo ocurriese en cualquier momento.
– ¿Pero qué...?
Al llegar a la entrada de los jardines del Palacio Imperial, el slime alzó una ceja en gesto de sorpresa. Plantas, árboles, suelo e incluso personas. Todo cuanto se encontraba detrás de las cintas policiacas que impedían el paso había sido convertido en aterradoras piezas de decoración que hacían juego con el viento helado y los copos de nieve que flotaban en el aire. ¿Qué clase de monstruoso ser podría haber causado algo como eso? Bueno, el slime tenía el poder para hacer un desastre de esa magnitud. Además, no era el único. Conocía a un legaciano que tenía el poder para congelar una ciudad entera, y tan solo en Asgard había una usuario de hielo igual de poderosa. Pero ninguno de los tres había realizado aquello, eso era más que obvio. Entonces... ¿El responsable de este acto era tan poderoso como cualquiera de los mejores guerreros de Legacy y Asgard?
El limo comenzaba a realizar conjeturas a medida que iba atando cabos en su mente. La idea que tenía en la cabeza le resultaba preocupante, pero aún así entró en la escena del crimen como Pedro por su casa. Tenía que mostrarse seguro. Tenía que denotar confianza. ¡Eso es lo que hace un rey! ¡Un rey mantiene la moral de sus aliados! ¡Enardece sus corazones y los lleva a la victoria absoluta! Es por eso que Rimuru Tempest tenía que seguir adelante y mitigar cualquier sentimiento de temor o preocupación al respecto. Fue así como, llevando la mano a su bolsillo, extrajo su encendedor y encendió una llama, misma que arrojó hacia arriba como quien lanza una moneda y, ya en el aire, la hizo expandirse como un globo que proveía de luz y de calor al grupo, pues el aire era tan frío que costaba trabajo respirar.
– Bueno, creo que todos saben la situación. El enemigo... El enemigo al que haremos frente... Es Pingu, el pingüino. Sí, sé que es una noticia devastadora. No tenemos oportunidad contra él. ¡Seguramente muchos mueran en combate hoy, pero es un precio que estoy dispuesto a pagar! Sé que los pingüinos mágicos son la debilidad de muchos, pero por eso debemos esforzarnos y seguir adelante. ¡Por el honor! ¡Por la patria! ¡Por... Las chicas mágicas del mundo! ¡Adelante!
Aquellas palabras habían sido narradas como si fueran parte de una telenovela, de la forma más cómica y dramática que se puedan imaginar. Incluso los gestos y ademanes de la peliazul eran de lo más dramáticos. No sabía si aquello conseguiría hacerle gracia a su grupo, pero al menos lo intentaba. Su intención era relajar las expectativas de todos, evitar que fueran a sentirse tensos en medio de aquel tenebroso laberinto de hielo que eran ahora los jardines. Después de todo, el limo tenía en mente el siempre hacer las cosas de forma perfecta. Así que lograrían completar su misión de forma impecable, y regresarían con los demás en un instante. Ese, al menos, era el plan. Sin embargo, el grupo no tenía la menor idea de aquello a lo que se enfrentaba, y era esa la incertidumbre que los mantenía alertas en todo momento.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
« ¿Un demonio preocupándose por alguien más? ¡Estúpido! ¡Absurdo! ¡Imposible! ¡Un monstruo no puede tener aprecio por una criatura insignificante! »
Estas palabras se repetía a si mismo el limo en su mente con tal de ignorar sus verdaderos sentimientos. No podía aceptar su amistad con aquella mujer. Era completamente ilógico que un Rey Demonio pudiera sentirse cómodo al lado de alguien más. Pero ahí estaba, odiándose a sí mismo por no ser capaz de ver a la humana como un peón más en su tablero y actuar con tanta irracionalidad como para exponerse a cualquier emboscada en pro de salvaguardar a quien consideraba si bien no débil, al menos mucho más frágil que él. Avanzaba con aparente calma y tranquilidad, fingiendo un rostro de completa despreocupación, pese a que su lenguaje corporal delataba a viva voz su cautela, como si estuviera esperando que algo ocurriese en cualquier momento.
– ¿Pero qué...?
Al llegar a la entrada de los jardines del Palacio Imperial, el slime alzó una ceja en gesto de sorpresa. Plantas, árboles, suelo e incluso personas. Todo cuanto se encontraba detrás de las cintas policiacas que impedían el paso había sido convertido en aterradoras piezas de decoración que hacían juego con el viento helado y los copos de nieve que flotaban en el aire. ¿Qué clase de monstruoso ser podría haber causado algo como eso? Bueno, el slime tenía el poder para hacer un desastre de esa magnitud. Además, no era el único. Conocía a un legaciano que tenía el poder para congelar una ciudad entera, y tan solo en Asgard había una usuario de hielo igual de poderosa. Pero ninguno de los tres había realizado aquello, eso era más que obvio. Entonces... ¿El responsable de este acto era tan poderoso como cualquiera de los mejores guerreros de Legacy y Asgard?
El limo comenzaba a realizar conjeturas a medida que iba atando cabos en su mente. La idea que tenía en la cabeza le resultaba preocupante, pero aún así entró en la escena del crimen como Pedro por su casa. Tenía que mostrarse seguro. Tenía que denotar confianza. ¡Eso es lo que hace un rey! ¡Un rey mantiene la moral de sus aliados! ¡Enardece sus corazones y los lleva a la victoria absoluta! Es por eso que Rimuru Tempest tenía que seguir adelante y mitigar cualquier sentimiento de temor o preocupación al respecto. Fue así como, llevando la mano a su bolsillo, extrajo su encendedor y encendió una llama, misma que arrojó hacia arriba como quien lanza una moneda y, ya en el aire, la hizo expandirse como un globo que proveía de luz y de calor al grupo, pues el aire era tan frío que costaba trabajo respirar.
– Bueno, creo que todos saben la situación. El enemigo... El enemigo al que haremos frente... Es Pingu, el pingüino. Sí, sé que es una noticia devastadora. No tenemos oportunidad contra él. ¡Seguramente muchos mueran en combate hoy, pero es un precio que estoy dispuesto a pagar! Sé que los pingüinos mágicos son la debilidad de muchos, pero por eso debemos esforzarnos y seguir adelante. ¡Por el honor! ¡Por la patria! ¡Por... Las chicas mágicas del mundo! ¡Adelante!
Aquellas palabras habían sido narradas como si fueran parte de una telenovela, de la forma más cómica y dramática que se puedan imaginar. Incluso los gestos y ademanes de la peliazul eran de lo más dramáticos. No sabía si aquello conseguiría hacerle gracia a su grupo, pero al menos lo intentaba. Su intención era relajar las expectativas de todos, evitar que fueran a sentirse tensos en medio de aquel tenebroso laberinto de hielo que eran ahora los jardines. Después de todo, el limo tenía en mente el siempre hacer las cosas de forma perfecta. Así que lograrían completar su misión de forma impecable, y regresarían con los demás en un instante. Ese, al menos, era el plan. Sin embargo, el grupo no tenía la menor idea de aquello a lo que se enfrentaba, y era esa la incertidumbre que los mantenía alertas en todo momento.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Rimuru Tempest
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Detras de aquel rey demonio, caminaba ni más ni menos que su servant, pues bes claro ella no lo iba a dejar solo en ningún momento, pues es su responsabilidad cuidar de este a toda costa. Aunque el supiera defenderse esta no lo dejaría solo y daria todo por el.
Saber se mantenía en completo silencioso. Era algo raro pues la emperatriz de roma no es de tener esa actitud, tal parece que las cosas eran muy serias, pero ella se mantenía firme ante la situación, no mostraba miedo alguno o desconfianza.
—Uhmm.... Sea lo que sea a lo que nos enfrentamos no será nada fácil. Pero... Tampoco debemos confiarnos máster.
Susurro en voz baja muy cerca de este. Ver aquel lugar lleno de nieve y todas aquellas personas congeladas era algo aterrador sin duda alguna. Pero no era momento para dejarse intimidar por eso.
Nero tenía sólo un objetivo. Salir victoriosos de este y ayudar a su máster. Pues el tenía a una de las mejores servant y esta ocasión sería la mas precisa para que ella destacara.
—Bueno debemos ma tenernos alerta y claro no separarnos. No sabemos en momentos pudiéramos recibir un ataque
Mencionó en tono muy serio. Esta tomo aquella hermosa espada color rojo carmesí y levantó esta haciendo que esta se encendiera un momento para haci proporcionar algo de calor.
Saber se mantenía en completo silencioso. Era algo raro pues la emperatriz de roma no es de tener esa actitud, tal parece que las cosas eran muy serias, pero ella se mantenía firme ante la situación, no mostraba miedo alguno o desconfianza.
—Uhmm.... Sea lo que sea a lo que nos enfrentamos no será nada fácil. Pero... Tampoco debemos confiarnos máster.
Susurro en voz baja muy cerca de este. Ver aquel lugar lleno de nieve y todas aquellas personas congeladas era algo aterrador sin duda alguna. Pero no era momento para dejarse intimidar por eso.
Nero tenía sólo un objetivo. Salir victoriosos de este y ayudar a su máster. Pues el tenía a una de las mejores servant y esta ocasión sería la mas precisa para que ella destacara.
—Bueno debemos ma tenernos alerta y claro no separarnos. No sabemos en momentos pudiéramos recibir un ataque
Mencionó en tono muy serio. Esta tomo aquella hermosa espada color rojo carmesí y levantó esta haciendo que esta se encendiera un momento para haci proporcionar algo de calor.
Kefla
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Pateo una pequeña piedra que iba a medias de su paso, no entendía a veces el porque debían ir a escenas del crimen pasadas para buscar pistas. Aparte, sabía que sería definitivamente difícil el infiltrarse en el palacio imperial pues no tenían ninguna autorización que validara sus pasos sin restricción. La única razón por lo cual se había ofrecido a acompañar a ese grupo era sencilla, estaba Rimuru y Sakura.
”Aunque aun me sigo preguntando qué es lo que pudo causar asesinatos de tal calibre en distintos puntos de la ciudad: desmembramientos, explosiones de aviones (sin fallas técnicas aparentemente)... y más, siendo casualidad que los únicos sospechosos a veces eran los mismos familiares en los mejores casos de pistas…”
Volteo a ver a sus aliados en tal grupo, a su derecha caminaba Rimuru; su mentor y camarada más cercano de momento, al lado de este se encontraba Nero, la gran emperador de Roma; servant clase Saber. Del lado derecho, por el contrario de su lado izquierdo se localizaba su propia hermana Sakura y del lado de está la estudiante de heroína, Uraraka Ochako. La única legaciana que se ofreció a acompañarlos.
No negaría que eso sí era tener valentía de estar en un grupo de asgardianos que tienen ventaja sobre ella, y su actitud era completamente energética cuando llegaron a la Torre, misma que se mostró cuando saludo tan animada a Serena Tsukino, la chica rubia que anteriormente se había encontrado en el parque de cerezos de Yokohama una vez; y está había decidido ir con el grupo B al aeropuerto, con la mayoría de héroes.
—¿Pero qué…?
El frío viento golpeó su cuerpo y rostro, haciendo que un corto escalofrío recorriera el mismo, sus ojos se entrecierran un poco ante el escenario, pero cuando los volvió a abrir un brillo de sorpresa se extendió por estos, haciéndolos brillar como dos cianitas. Todo, absolutamente todo estaba congelado… ¿Qué era aquello? ¿Por qué esa noche justamente? Tal suceso debía haber ocurrido esa misma noche, o la prensa hubiera estado loca desde la tarde, ¿qué clase de monstruo o persona tenía tal poder de congelar? Ella no conocía a nadie con tal poder…
—¡R-Rimuru! No entres tan descuidado.
Comentó, siguiendo al slime dentro del palacio tras retirar las citas policiacas, uh, sí que el frío ahí dentro era increíble, y agradeció mentalmente el gesto de encender una llamarada sobre sus cabezas para mantener la temperatura. Con un gesto de sus labios y un susurro ocasionó que su traje se expandiera por su cuerpo, si bien este había sido creado para protegerla de su propio fuego también podía tener la función de actuar como ropa térmica que aislaba el frío y por lo mismo podría moverse libremente.
Negó con la cabeza, una sonrisa pequeña naciendo en sus labios por el discurso motivador del Rey, en definitiva a veces podía ser una criatura muy adorable con esos pequeños gestos que buscan aliviar la tensión y los signos de alerta.
—Lo más sensato es lo que dijo Saber, pero por el contrario tendrá sus contras… Seremos un blanco más fácil si estamos juntos, pero por el contrario sí nos separamos podríamos darle la victoria a nuestro oponente al dividirnos…
Paso saliva, sí era necesario haría runas en la piel de sus camaradas de equipo para pelear más libres, aunque tal vez esto no fuera necesario con el fuego de Rimuru y el calor de la espada de Saber. Ahora que lo pensaba era una ironía sí su enemigo es afín de hielo cómo subelemento, considerando que ellos mismos tenían tres afines de fuego en tal grupo (Rimuru, Nero y ella).
—Entonces, ¿cuál será nuestro próximo movimiento? Todo esto podría ser una trampa bien elaborada…
”Aunque aun me sigo preguntando qué es lo que pudo causar asesinatos de tal calibre en distintos puntos de la ciudad: desmembramientos, explosiones de aviones (sin fallas técnicas aparentemente)... y más, siendo casualidad que los únicos sospechosos a veces eran los mismos familiares en los mejores casos de pistas…”
Volteo a ver a sus aliados en tal grupo, a su derecha caminaba Rimuru; su mentor y camarada más cercano de momento, al lado de este se encontraba Nero, la gran emperador de Roma; servant clase Saber. Del lado derecho, por el contrario de su lado izquierdo se localizaba su propia hermana Sakura y del lado de está la estudiante de heroína, Uraraka Ochako. La única legaciana que se ofreció a acompañarlos.
No negaría que eso sí era tener valentía de estar en un grupo de asgardianos que tienen ventaja sobre ella, y su actitud era completamente energética cuando llegaron a la Torre, misma que se mostró cuando saludo tan animada a Serena Tsukino, la chica rubia que anteriormente se había encontrado en el parque de cerezos de Yokohama una vez; y está había decidido ir con el grupo B al aeropuerto, con la mayoría de héroes.
—¿Pero qué…?
El frío viento golpeó su cuerpo y rostro, haciendo que un corto escalofrío recorriera el mismo, sus ojos se entrecierran un poco ante el escenario, pero cuando los volvió a abrir un brillo de sorpresa se extendió por estos, haciéndolos brillar como dos cianitas. Todo, absolutamente todo estaba congelado… ¿Qué era aquello? ¿Por qué esa noche justamente? Tal suceso debía haber ocurrido esa misma noche, o la prensa hubiera estado loca desde la tarde, ¿qué clase de monstruo o persona tenía tal poder de congelar? Ella no conocía a nadie con tal poder…
—¡R-Rimuru! No entres tan descuidado.
Comentó, siguiendo al slime dentro del palacio tras retirar las citas policiacas, uh, sí que el frío ahí dentro era increíble, y agradeció mentalmente el gesto de encender una llamarada sobre sus cabezas para mantener la temperatura. Con un gesto de sus labios y un susurro ocasionó que su traje se expandiera por su cuerpo, si bien este había sido creado para protegerla de su propio fuego también podía tener la función de actuar como ropa térmica que aislaba el frío y por lo mismo podría moverse libremente.
Negó con la cabeza, una sonrisa pequeña naciendo en sus labios por el discurso motivador del Rey, en definitiva a veces podía ser una criatura muy adorable con esos pequeños gestos que buscan aliviar la tensión y los signos de alerta.
—Lo más sensato es lo que dijo Saber, pero por el contrario tendrá sus contras… Seremos un blanco más fácil si estamos juntos, pero por el contrario sí nos separamos podríamos darle la victoria a nuestro oponente al dividirnos…
Paso saliva, sí era necesario haría runas en la piel de sus camaradas de equipo para pelear más libres, aunque tal vez esto no fuera necesario con el fuego de Rimuru y el calor de la espada de Saber. Ahora que lo pensaba era una ironía sí su enemigo es afín de hielo cómo subelemento, considerando que ellos mismos tenían tres afines de fuego en tal grupo (Rimuru, Nero y ella).
—Entonces, ¿cuál será nuestro próximo movimiento? Todo esto podría ser una trampa bien elaborada…
Rin Dulce
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Ochako se había separado del grupo en el que había llegado a la Torre, pensaba que su amiga Serena estaría con ella en lo que restaba de la noche, pero ambas serían separadas, ochako opto por acompañar al grupo de Asgardianos. La castaña encontró esto como una nueva forma de poder hacer amistades, aunque esto era realmente complicado.
Al ser la única de Legacy, sentía un poco de temor, no sabía si confiar plenamente en ellos, ¿Que pasaría si estos la atacaban?, aunque no parecía que estuvieran interesados en atacarla, estaban concentrados en encontrar a los responsables de esos terribles asesinatos. La castaña soltó un ligero suspiro de alivio, el verlos tan interesados en el caso la tranquilizaba, pues mantenían algo en común y es que todos querían lo mismo, atrapar al culpable.
Ochako se limito a hablar, dado que no los conocía a la perfección, aunque admitía que acompañarlos fue la mejor elección que esta pudo haber hecho, rumores en la Academia se expandían sobre estos chicos, eran los más fuertes y listos, y a juzgar por las apariencias la castaña no tenía duda de ello, sería todo un honor poder luchar ante tan grandes personajes, incluso aprovecharía para poder aprender algo de ellos.
Un frío comenzó a recorrer su cuerpo, era evidente que la noche se estaba poniendo extraña, tenía muchas preguntas en su cabeza, quería deducir quien podría ser el culpable pero estaba uy lejos de saberlo. El discurso del Rey demonio, la había hecho reír, no sabía que los Asgardianos tenían buen sentido del humor, el ambiente pronto se torno algo cómodo.
—Rin tiene razón, estamos en completa desventaja, no importa si nos separamos o estamos juntos, de todas formas nuestro oponente nos atacará en cuanto tenga oportunidad.—
Al fin se atrevía a decir algo, y es que en efecto si pensaba muy bien lo que su compañera había dicho, era evidente que no les convenía separarse, aunque estando juntos también resultaba ser un problema, de todas formas tarde o temprano alguien los atacaría, la castaña pensaba que era mejor estar juntos.
—En mi opinión creo que lo más conveniente es permanecer juntos, y esperar a que el oponente nos ataque, podemos seguir adentrándonos por todo el palacio, creo que quedarse en un solo lugar sin hacer nada no es una buena opción.—
Agrego esperando a que sus compañeros la tomaran en cuenta, tal vez no era buena estratega, pero creía que lo mejor era seguir investigando, de por si el el caso ya le llamaba mucho la atención, tenía curiosidad por saber con que se encontrarían más adelante. Al principio Ochako no confiaba mucho en sus compañeros, pero no podía negar que poco a poco, ellos se iban ganando su confianza, ¿A que se debía aquello?, aún no lo sabía, tal vez aquellas personas no eran muy distintas a ella. Estaba segura de querer ayudarlos, no tenía dudas, no importaba que tan fuerte fuera el enemigo, esta daría su mayor esfuerzo para protegerlos, porque al final de cuentas era lo que una heroína tenía que hacer.
Al ser la única de Legacy, sentía un poco de temor, no sabía si confiar plenamente en ellos, ¿Que pasaría si estos la atacaban?, aunque no parecía que estuvieran interesados en atacarla, estaban concentrados en encontrar a los responsables de esos terribles asesinatos. La castaña soltó un ligero suspiro de alivio, el verlos tan interesados en el caso la tranquilizaba, pues mantenían algo en común y es que todos querían lo mismo, atrapar al culpable.
Ochako se limito a hablar, dado que no los conocía a la perfección, aunque admitía que acompañarlos fue la mejor elección que esta pudo haber hecho, rumores en la Academia se expandían sobre estos chicos, eran los más fuertes y listos, y a juzgar por las apariencias la castaña no tenía duda de ello, sería todo un honor poder luchar ante tan grandes personajes, incluso aprovecharía para poder aprender algo de ellos.
Un frío comenzó a recorrer su cuerpo, era evidente que la noche se estaba poniendo extraña, tenía muchas preguntas en su cabeza, quería deducir quien podría ser el culpable pero estaba uy lejos de saberlo. El discurso del Rey demonio, la había hecho reír, no sabía que los Asgardianos tenían buen sentido del humor, el ambiente pronto se torno algo cómodo.
—Rin tiene razón, estamos en completa desventaja, no importa si nos separamos o estamos juntos, de todas formas nuestro oponente nos atacará en cuanto tenga oportunidad.—
Al fin se atrevía a decir algo, y es que en efecto si pensaba muy bien lo que su compañera había dicho, era evidente que no les convenía separarse, aunque estando juntos también resultaba ser un problema, de todas formas tarde o temprano alguien los atacaría, la castaña pensaba que era mejor estar juntos.
—En mi opinión creo que lo más conveniente es permanecer juntos, y esperar a que el oponente nos ataque, podemos seguir adentrándonos por todo el palacio, creo que quedarse en un solo lugar sin hacer nada no es una buena opción.—
Agrego esperando a que sus compañeros la tomaran en cuenta, tal vez no era buena estratega, pero creía que lo mejor era seguir investigando, de por si el el caso ya le llamaba mucho la atención, tenía curiosidad por saber con que se encontrarían más adelante. Al principio Ochako no confiaba mucho en sus compañeros, pero no podía negar que poco a poco, ellos se iban ganando su confianza, ¿A que se debía aquello?, aún no lo sabía, tal vez aquellas personas no eran muy distintas a ella. Estaba segura de querer ayudarlos, no tenía dudas, no importaba que tan fuerte fuera el enemigo, esta daría su mayor esfuerzo para protegerlos, porque al final de cuentas era lo que una heroína tenía que hacer.
Ochako Lottus Jun
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
Sus razones son bastante inciertas para adentrarse a investigar esta irregularidad . Todo se debía a querer absorber quien hizo eso , mientras más poder acumulaba jamás tendrías bajas al momento de luchar. No es la mejor , ni siquiera tuvo un digno entrenamiento como maga por parte de los Matou, incluso su poder de tener la habilidad de la alineación a cualquier elemento fue cambiado por solo el control de agua dejándola perdida como una pequeña ave tratando de sobrevivir en una piscina. Solo tendría el control absoluto de su elemento imaginario , haciendo la posibilidad de encarcelar y ensartar su objetivo en una dimensión separada y compuesta completa de sombras pero sabe que es no suficiente, al menos , esa es su carta de triunfo y que usaría contra quien sea que fuese su enemigo. En ese caso, su hermana Rin, que le acompaña en aquel pequeño grupo le defendería por igual.
- Frio … – Observa con cuidado aquellos pobres desdichados que estuvieron en el momento y en el lugar equivocado. No tiene un mínimo de compasión por estos , solamente los ve como pruebas fehacientes . – Es reciente… – Escucha a sus compañeros hablar , aunque no estaba muy pendientes de estos. Caminaba por la nieve, esta descalza pero el malestar de los pies entumecidos no le afecta. Ahora seguiria a reunirse con estos.
- Ya nos separaron del resto, ¿Por qué hacerlo de nuevo? Solo se le daría ventaja al enemigo … – Tenia experiencia en aquello , ella misma ideó planes así – Y avanzar más profundo pondríamos caer en trampas … es muy evidente dejar todo esto así para hacernos irlo a buscar, fufufu – La situación le divertía ¡hasta ya deseaba felicitar a quien hizo esta azaña! – ¿Qué dicen? ¿Nos unimos a la diversión de buscarle y ver que más hay adentro? ¿Les damos el gusto? Apuesto que debe estar viéndonos deseoso de saber que paso tomaremos… la chica de Legacy tiene un punto … quedarse aquí nos dejara llenos de curiosidad por saber que más hay ahí.
De vez en cuando podría Sakura pensar de este modo, desde de todo , una mentalidad tan retorcida tendria sus ventajas al equipo lo malo es que podria distorsionar un poco las cosas.
- Frio … – Observa con cuidado aquellos pobres desdichados que estuvieron en el momento y en el lugar equivocado. No tiene un mínimo de compasión por estos , solamente los ve como pruebas fehacientes . – Es reciente… – Escucha a sus compañeros hablar , aunque no estaba muy pendientes de estos. Caminaba por la nieve, esta descalza pero el malestar de los pies entumecidos no le afecta. Ahora seguiria a reunirse con estos.
- Ya nos separaron del resto, ¿Por qué hacerlo de nuevo? Solo se le daría ventaja al enemigo … – Tenia experiencia en aquello , ella misma ideó planes así – Y avanzar más profundo pondríamos caer en trampas … es muy evidente dejar todo esto así para hacernos irlo a buscar, fufufu – La situación le divertía ¡hasta ya deseaba felicitar a quien hizo esta azaña! – ¿Qué dicen? ¿Nos unimos a la diversión de buscarle y ver que más hay adentro? ¿Les damos el gusto? Apuesto que debe estar viéndonos deseoso de saber que paso tomaremos… la chica de Legacy tiene un punto … quedarse aquí nos dejara llenos de curiosidad por saber que más hay ahí.
De vez en cuando podría Sakura pensar de este modo, desde de todo , una mentalidad tan retorcida tendria sus ventajas al equipo lo malo es que podria distorsionar un poco las cosas.
Invitado- Invitado
Re: Una alianza momentánea [Grupo A: Rin, Rimuru, Nero, Uraraka y Sakura].
El demonio escuchaba atentamente las opiniones de todos sus compañeros. Claramente había un gran dilema al que habrían de hacerse frente y que no podía ser otro sino el decidir si deberían continuar como un grupo o por separado. Ser un grupo en primera instancia parecía la idea más indicada, pues al permanecer juntos podrían cuidarse las espaldas y hacer frente al enemigo en todo momento. Sin embargo, el moverse por separado ofrecía otra ventaja también muy importante: tiempo. Investigar por separado les permitiría abarcar una gran área como era ese enorme palacio en mucho menos tiempo que si todos se movieran por el mismo sitio a la vez. Eso hacía que el demonio también se pensara dos veces la opción correcta, pero finalmente sus emociones le hicieron inclinarse más fuertemente por una dirección.
– De acuerdo, avancemos juntos entonces. El enemigo no tendrá oportunidad contra mosotros si trabajamos como equipo, así que no hay nada de qué preocuparse. Además, para mí no existen puntos ciegos. Si alguien se acerca, definitivamente podré verlo antes de que pueda tendernos una emboscada.
A la verdad, la intención principal del slime era proteger a la azabache, y qué mejor que si el grupo completo se desplazaba para cubrir múltiples debilidades. Es cierto, la labor de investigación tomaría mucho más tiempo del que pudo haber ocupado, pero vale la pena hacer sacrificios por ciertas cosas. Además ¿No estaba aquel subestimando la fuerza de su oponente? Es cierto que el slime se sentía demasiado confiado por el hecho de poder acabar con oponentes de hielo con suma facilidad, pero no conocía al enemigo y quizá aquel palacio invernal no fuera su carta de triunfo. Creer que podría acabar contra cualquiera era demasiado engreído de su parte, aunque no quisiera admitirlo. Mantenerse alerta y pelear en grupo era sin duda alguna la mejor opción, por lo que aquella es por la que se había decantado.
Fue así como comenzó el andrógino a avanzar a través del laberinto. Sorprendentemente, no aparecía una sola trampa o enemigo en todo el sitio. Lo sabía a la perfección. Su "Habilidad Extra: Percepción Mágica" siempre había sido infalible, por lo que no había forma de que algo se ocultase a sus ojos. Sin embargo, eso no hizo que se mantuviera calmado durante el trayecto, ni siquiera al conseguir salir de la encrucijada sin ningún percance. ¿Acaso el enemigo se habría ido tras cometer su atrocidad? Nada era seguro. Lo único cierto era que no parecía haber nadie en los alrededores, y que habían conseguido llegar a la entrada del palacio sin problema alguno.
– Oigan... ¿Alguien más piensa que eso es demasiado extraño? Adentro... No hace frío.
Rimuru señaló con el índice hacia la entrada del palacio, la cual estaba cerrada por cierto. Es posible que nadie lo notase salvo él, debido a que su visión estaba hecha para percibir la energía, pero mientras que la temperatura afuera era ya de -42°C y continuaba descendiendo, el interior del palacio mantenía una estabilidad en los 25°C. Era prácticamente como si el clima normal estuviera encerrado dentro de la edificación, mientras que toda la parte exterior se había convertido en un congelador gigante. Eso no era imposible con algo de tecnología de por medio, pero... Era demasiado inusual. El demonio moría de curiosidad al respecto, la cual era su principal debilidad, y en un instante ya estaba caminando a la puerta.
– Nuestro enemigo podría estar tras estas puertas. Prepárense para atacar en caso de que así sea 'k?
Y, sin dar más explicaciones, el peliazul alzó una mano al aire. A su lado creció entonces del suelo una enorme raíz espinosa, negra como la noche, y con el grosor de un cedro, que inmediatamente arremetió contra la entrada, derribando las puertas de un solo golpe hacia adentro del edificio. Dentro podían verse luces encendidas, un impecable piso de madera y muros con color de mármol que daban en conjunto una apariencia muy japonesa, como era de esperarse. Todo era de lo más normal en el interior, como si nada hubiera ocurrido, con una pequeña excepción: no había absolutamente nadie dentro. Afuera había guardias y turistas congelados por todas partes, pero en el interior no había ni un alma. ¿¡Acaso no el crimen que investigaban había sido dentro para empezar!?
– ¿... Ho...?
Repentinamente, un sonido como el de algo quebrábdose hizo que el demonio voltease a mirar, más por instinto que por necesidad, hacia su propia raíz. Esta comenzó a resquebrajarse de la nada, agrietándose y despedazándose como piedra hasta el punto en que fue reducida a escombros. La Raíz de la Rosa Negra es una habilidad con afinidad de fuego. Cuanto más calor hace, más poderosa se vuelve. Sin embargo, pronto descubría el demonio lo que eso realmente significaba, y es que si el fuego las fortalecía, el frío era capaz de erradicarlas. Si una temperatura de -42°C había sido suficiente para destruirla en menos de un minuto, ¿Qué tanto se verían afectadas si el clima continuaba empeorando?
– Qué demonios... Está pasando aquí...
Mencionó la pequeña criatura con un rostro preocupado, casi aterrado, al ver que su mejor arma de combate era reducida a nada en un instante.
– De acuerdo, avancemos juntos entonces. El enemigo no tendrá oportunidad contra mosotros si trabajamos como equipo, así que no hay nada de qué preocuparse. Además, para mí no existen puntos ciegos. Si alguien se acerca, definitivamente podré verlo antes de que pueda tendernos una emboscada.
A la verdad, la intención principal del slime era proteger a la azabache, y qué mejor que si el grupo completo se desplazaba para cubrir múltiples debilidades. Es cierto, la labor de investigación tomaría mucho más tiempo del que pudo haber ocupado, pero vale la pena hacer sacrificios por ciertas cosas. Además ¿No estaba aquel subestimando la fuerza de su oponente? Es cierto que el slime se sentía demasiado confiado por el hecho de poder acabar con oponentes de hielo con suma facilidad, pero no conocía al enemigo y quizá aquel palacio invernal no fuera su carta de triunfo. Creer que podría acabar contra cualquiera era demasiado engreído de su parte, aunque no quisiera admitirlo. Mantenerse alerta y pelear en grupo era sin duda alguna la mejor opción, por lo que aquella es por la que se había decantado.
Fue así como comenzó el andrógino a avanzar a través del laberinto. Sorprendentemente, no aparecía una sola trampa o enemigo en todo el sitio. Lo sabía a la perfección. Su "Habilidad Extra: Percepción Mágica" siempre había sido infalible, por lo que no había forma de que algo se ocultase a sus ojos. Sin embargo, eso no hizo que se mantuviera calmado durante el trayecto, ni siquiera al conseguir salir de la encrucijada sin ningún percance. ¿Acaso el enemigo se habría ido tras cometer su atrocidad? Nada era seguro. Lo único cierto era que no parecía haber nadie en los alrededores, y que habían conseguido llegar a la entrada del palacio sin problema alguno.
– Oigan... ¿Alguien más piensa que eso es demasiado extraño? Adentro... No hace frío.
Rimuru señaló con el índice hacia la entrada del palacio, la cual estaba cerrada por cierto. Es posible que nadie lo notase salvo él, debido a que su visión estaba hecha para percibir la energía, pero mientras que la temperatura afuera era ya de -42°C y continuaba descendiendo, el interior del palacio mantenía una estabilidad en los 25°C. Era prácticamente como si el clima normal estuviera encerrado dentro de la edificación, mientras que toda la parte exterior se había convertido en un congelador gigante. Eso no era imposible con algo de tecnología de por medio, pero... Era demasiado inusual. El demonio moría de curiosidad al respecto, la cual era su principal debilidad, y en un instante ya estaba caminando a la puerta.
– Nuestro enemigo podría estar tras estas puertas. Prepárense para atacar en caso de que así sea 'k?
Y, sin dar más explicaciones, el peliazul alzó una mano al aire. A su lado creció entonces del suelo una enorme raíz espinosa, negra como la noche, y con el grosor de un cedro, que inmediatamente arremetió contra la entrada, derribando las puertas de un solo golpe hacia adentro del edificio. Dentro podían verse luces encendidas, un impecable piso de madera y muros con color de mármol que daban en conjunto una apariencia muy japonesa, como era de esperarse. Todo era de lo más normal en el interior, como si nada hubiera ocurrido, con una pequeña excepción: no había absolutamente nadie dentro. Afuera había guardias y turistas congelados por todas partes, pero en el interior no había ni un alma. ¿¡Acaso no el crimen que investigaban había sido dentro para empezar!?
– ¿... Ho...?
Repentinamente, un sonido como el de algo quebrábdose hizo que el demonio voltease a mirar, más por instinto que por necesidad, hacia su propia raíz. Esta comenzó a resquebrajarse de la nada, agrietándose y despedazándose como piedra hasta el punto en que fue reducida a escombros. La Raíz de la Rosa Negra es una habilidad con afinidad de fuego. Cuanto más calor hace, más poderosa se vuelve. Sin embargo, pronto descubría el demonio lo que eso realmente significaba, y es que si el fuego las fortalecía, el frío era capaz de erradicarlas. Si una temperatura de -42°C había sido suficiente para destruirla en menos de un minuto, ¿Qué tanto se verían afectadas si el clima continuaba empeorando?
– Qué demonios... Está pasando aquí...
Mencionó la pequeña criatura con un rostro preocupado, casi aterrado, al ver que su mejor arma de combate era reducida a nada en un instante.
Rimuru Tempest
Temas similares
» Una alianza momentánea [Crow, Nejire, Mirajane, Rimuru, Rin, Mordred, Hawks, Atalanta, Izuku, Arturia, Ochako, Chess, Sakura, Jeanne, Serena, Tsuna, Nero, Morgiana, Lacus, Tamaki]
» Una alianza momentánea [Grupo B: Nejire, Serena, Izuku, Ereshkigal, Sombra]
» Una alianza momentánea [Grupo C: Crow, Arturia, Shuten, Young, Himiko y Rider].
» Sakura Feudal [Élite]
» Alianza o amistad ¿cual de las dos valdrá más? (Astolfo)
» Una alianza momentánea [Grupo B: Nejire, Serena, Izuku, Ereshkigal, Sombra]
» Una alianza momentánea [Grupo C: Crow, Arturia, Shuten, Young, Himiko y Rider].
» Sakura Feudal [Élite]
» Alianza o amistad ¿cual de las dos valdrá más? (Astolfo)
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Ayer a las 3:38 pm por Add
» Cruzando a territorio enemigo (Byprox, Giyu, Mitsuri)
Sáb Nov 09, 2024 11:09 pm por Shinobu Kocho
» Una acción inesperada (Artemisa, Lancer, Jeanne, Sung)
Sáb Nov 09, 2024 9:22 pm por Jeanne Alter
» Oculto (Lisa Minci)
Lun Nov 04, 2024 8:26 pm por Lisa Minci
» En la cancha de básquetbol (Clase B: Teyvat Guild)
Jue Oct 31, 2024 9:33 pm por Anton
» Academia Legacy: La Guerra del Medallón
Vie Oct 25, 2024 9:36 pm por Jellal Fernandes
» Historia de Legacy (Parte VI)
Vie Oct 25, 2024 6:53 pm por Jellal Fernandes
» The First Folio [ Libre! ]
Mar Oct 22, 2024 1:19 am por Sung Jin-woo
» Alto al fuego (Shinobu, Douma)
Vie Oct 18, 2024 9:25 pm por Douma
» El portal hacia Japón (Natsu, Erza, Selene, Ignia)
Jue Oct 17, 2024 5:30 pm por Cuentacuentos
» La propuesta de Diluc
Mar Oct 15, 2024 8:43 pm por Kanao Tsuyuri
» Un encuentro inesperado... (Rena, Luciela)
Miér Oct 09, 2024 1:35 am por Add