G4: Tren sur

Tyrande había planeado varias situaciones en las reuniones con su pequeño grupo, pero ahora era el momento de la lucha y de la verdad. Se habían hallado unas antiguas vías y tras varios intentos por fin habían logrado conseguir que estas funcionasen, así que era el momento de hacer que llegasen las municiones a la academia. Tyrande suspiró y observó como varios de sus compañeros subían a los otros tres trenes, ella había decidido tomar ese y estaba esperando a ver que todos subían, había que defender ese vehículo por lo que ahí estaba para conseguir sus planes.

Tyrande subió al tres y en vez de buscar donde sentarse lo que hizo fue comprobar cada una de las salidas y encargarse de bloquearlas para evitar cualquier entrada por ellas, tras eso preparó su arco y miró hacia el interior del tren.

-No permitiré que nadie ataque este tren.-y tras eso miró por la ventana y esperó a que el vehículo se pusiese en marcha.

-La pelinegra elegía al azar el tren a destruir, tan sólo se limitaba a esperar sobre las vías, finalmente tarde o temprano uno aparecería y ese sería destruido, pero antes de todo quería divertirme con aquel o aquella que venía dispuesto a proteger dicho tren, a unos metros de distancia el tren se acercaba ya, mi vestido carmesí resaltaba claramente-.

Perfecto, por fin han llegado, veamos quién será mi contrincante - tomando velocidad saltaba sobre el tren por la parte de enfrente, quedando sobre su techo, comenzaba a caminar con fuerza sobre el, con la finalidad de anunciar mi llegada-.

Vamos, quien viene aqui, sal ahora a divertirte Kurumi Tosikaki ha llegado y esta lista para cumplir su misión.

- Hablaba mienntras de pie invocaba a Zafkiel, teniendo mis mosquetes en las manos-

¡Zafkiel! ....

Tyrande escucho los sonidos sobre ella, el primero seco y después como si estuviesen bailando sevillanas. Frunció el ceño y apuntó hacia el techo pero en ese instante escuchó el horripilante sonido, ese sonido que ya había escuchado antes. Tomó aire y salió hacia el andén donde apuntó a todos esqueletos.

Apuntó con el arco hacia el cielo y llamo a su ataque de varios proyectiles, tenía intención de cargarse a todos de un ataque, por supuesto no perdió de vista el techo del tren donde había una persona que le pareció totalmente extraña.

-¿Porqué estará ahí?-murmuró, entonces supuso que era enemiga. Pero lo primero era lo primero y en este caso eran esos esqueletos, no sin perder de vista a su otro contrincante.

-Mi contrincante había tomado posición dejandose mostrar al atacar al pequeño escuadrón de huesos que me había sido enviado como ayuda, aunque en principio no les di importancia, estaba equivocada ahora mi rival no podía concentra toda su atención en mí,  saltando a unos metros frente a ella, el suelo del anden comenzaba a ponerse negro de el emanaban varios pares de brazos, cinco pares en total, los cuales buscaban sostener las piernas de Tyrande-.

Hola soy Kurumi Tokisaki he venido vencerte...-tomando mis mosquetes marcándose la octava hora de mi reloj invoco a Chet en 6 ocasiones haciendo aparecer un grupo de Kurumis equivalente a las balas disparadas-

Chet, Chet, Chet, Chet, Chet, Chet..-tres de mi grupo se iban con el escuadrón de huesos y el resto se quedaba a pelear contra Tyrande-

Te daré la oportunidad de huir, ¿la tomas? ....

Tyrande observó y escucho las palabras de la joven, la miro intensamente y en sus labios se mostró una media sonrisa, ¿de verdad estaba siendo amable? Que hipocresía, pensó. Su mente preparo la lucha, era el momento de mostrar su valía en el combate y hacer que esa enemiga saliese de ahí con el rabo entre las piernas. Lo siguiente que la chica dijo le hizo romperse en carcajadas.

-¿Huir? Creo que te has tomado demasiadas setas.-soltó cuando por fin pudo dejar de reír, dijo setas por qué sabía que había algunas demasiado alucinogenas. -Te hago la misma propuesta, puedes huir si quieres.-sonrió.

El ataque que había lanzado se dirigía hacia los esqueletos pero ahora centraba su combate sobre la chica.

Solo trataba de salvarte la vida, pero veo que no aprecias mi esfuerzo, entonces no veo razón para contenerme, tristemente creo que morirás aquí o por lo menos si vuelves a Legacy será con la noticia de que perdiste este tren, jajajjajaa...-reía con soberbia-

Bueno que comience el baile, ha llegado la hora  de la diversión - marcando la séptima hora de mi reloj, disparo la bala de Zayin en dirección a Tyrande, esta bala tenía por objetivo atraparla en una burbuja dejandola en estado de pausa por unos segundos, para poder causarle daño, al disparar, si no la esquivaba disparaba 10 veces en la dirección de donde ella se encontraba, mientras el resto de mis Kurumis la rodean-.

-El viento soplaba de forma abrumadora, dado que Tyrande se enfoco en mí las tres Kurumis que estaban con el escuadrón  de huesos ingresan a los vagones del tren, concentrándose en analizar el espacio para dar paso a la destrucción del tren-.