Algo no anda bien

[i]،ぬ Habia pasado un buen tiempo oculto en las sombras, siempre observando todo desdé una distancia segura, sin intervenir y sin llamar demasiado la atención, no era necesario para él hacer algo como eso y todo para poder terner una mejor perspectiva y panorama para ello decidió leer todo lo que habia podido recolectar y analizarlo con mucha tranquilidad en una zona "segura" para él o eso creia.

Conocía bien las montañas tanto como las dagas que llevaba consigo cada árbol, cada arbusto y cada capa de nieve sabía con precisión si alguno de estos elementos fuera alterado y sabria distinguir perfectamente si se trataba de un animal o de alguna o de algunas personas lo que venia a ser en este caso.

Asumio directamente que eran enemigos así que apresurandose un poco dejo aproposito un rastro fácil de seguir entre varios árboles, pero con la ligera sorpresa que este habria usado hilos de delgados de metal para crear una ligera telaraña mortal que los rebane como si fuera mantequilla siendo cortada por un cuchillo.

-- Eso los mantendra ocupado al menos un poco mientras borro mi rastro y consigo llegar a mi refugio...

Entre más rápido temine esto podre elegir que hacer ahora en adelante....

Hace una semana, Ainchase sintió una perturbadora energía maligna emanando de las montañas nevadas cercanas a la Academia Legacy. Observó el panorama oscuro y sombrío, mientras la nieve caía en forma de copos helados. El frío cortante se filtraba en sus huesos, pero su determinación no menguaba. Sabía que algo terrible estaba ocurriendo y que debía investigar.

De repente, el albino percibió la presencia de alguien acercándose. Se ocultó rápidamente detrás de un viejo árbol muerto, tratando de no hacer ningún ruido. Mantuvo la respiración contenida mientras observaba a su alrededor. Decidió realizar una maniobra de distracción, lanzando una piedra hacia el otro lado del camino. El sonido resonó en el silencio del paisaje. Su intención era llamar la atención de este ser.

Sin perder un instante, Ainchase alzó la mano y conjuró una esfera de energía. Su objetivo era claro: el pecho de su contrincante. La esfera salió disparada con velocidad, atravesando el aire helado de la noche. Este tipo era mucho más poderoso que el ángel, así que había que acabarlo con rapidez.

- ¡Toma esto, maldito diablo. Este es territorio de Legacy! - vociferó. Tenía que atacarle y derribarle con prontitud porque la represalia de este enemigo iba a ser titánica.

،ぬ Aun caminaba entre aquella espesa nieve y con la trampa ya armada este se sentia más seguro hasta que sintió claramente como habia una acumulación de magia cerca de el, en tan solo milisegundos este se voltio arrojando una de sus dagas en dirección a aquella acumulación solo para que aquel arma chocara con el orbe de luz haciendo lo estallar y alzando una gran nube de blanca hecha por la nieve que habia expandiendola, el mayor no era tonto y aprovecharia aquella gran nube de por lo menos unos 4 metros para acercarse o eso pensaba antes de aer arrojado algunos metros hacia atras al recibir una explosión cercana hecha con... ¿Un tubo de ensayo? ¿Una alquimista? Tienes que estar bromeando como si el no tuviera suficiente ya con tener que tratar con aquel mago ahora tenia que tratar con una alquimista y una bastante buena ya que hasta para el y sus conocimientos hacer algo igual le costaria y no tendria el mismo efecto o intensidad.

Pero dejando de lado la situación al tener contantes nubes de nieve provocadas por las mismas explosiones decidio calcular donde se encontraba el alquimista en cuestión basandose desde donde eran lanzados los tubos de ensayo y al tener más o menos la latitud y la longitud lanzo una segunda daga que atraveso las nubes e impacto en uno de aquellas pociones que habia lanzado la cual por suerte para el mayor se encontraba a 1 metro de donde fue lanzada.

Aprovechando la situación y que lo más seguro es que eso le bastaria para dejar fuera de combate por algunos minutos a el alquimista se arrojaria a toda velocidad contra el mago no sin antes tomar otras dos dagas ocultas en su chaleco [en el cual se encontraban un total de otras 6 dagas más aparte de las ya lanzadas] y lanzarlas en la posición que ya habia triangulado este, las lanzo no para darle a el sujeto si no para interrumpir cualquier intento por lanzar un segundo ataque y dejarlo vunerable para que este pudiera culminar sin mucho esfuerzo su existencia dandole alguna muerte lo suficientemente rápida para que este no le doliera tanro y ahorrarse tambien algo de tiempo para ir a por el segundo atacante.

￣???? ࣪₊ - Ustedes si que son una gran molestia.... Desaparezcan...

En un instante, Ainchase percibió que uno de los objetos arrojados por el demonio se dirigía directo hacia uno de los frascos de Aimée. Sin dudarlo, Ainchase extendió su mano y, mediante un acto de magia, trató de desviar la trayectoria del objeto pero falló. La explosión seguramente afectaría a Aimée, pero muy dentro de sí sabía que faltaría mucho para siquiera afectar a la rubia.

- Nunca nos vamos a rendir, monstruo -En el siguiente momento, mientras avanzaba con paso firme hacia el enemigo, Ainchase notó que los objetos que lanzaba el demonio eran afiladas dagas en pleno vuelo. Con maestría y precisión, detuvo su trote y esperó a que las cuchillas se clavaran en el suelo a su alrededor. No podía atacar. Le era imposible ahora. Sabiendo que Aimée necesitaba una guía en medio del caos, el arcángel alzó ambas manos hacia el cielo, dejando que su resplandor luminoso inundara el lugar y revelara la ubicación del enemigo a su compañera.

Los destellos de luz envolvieron el campo de batalla, creando un aura sobrenatural que contrastaba con la oscuridad opresiva de ese demonio. Ainchase, el arcángel de la Academia Legacy, se convirtió en un faro de esperanza para su aliada y novia, mientras sus poderes de luz iluminaban el camino hacia la victoria.